Cura para la idiotez

[Julie Olivier]

((me quieren colapsar los pulmones de la risa? ehh? ehh??))

Siguió la mirada de Kerry y vio a Nathan. Sin pensarlo miró atrás de él a ver si venía Kyle, sin verlo -¿?- La venganza de hermana puede ser muy dura si el castañito ese no iba a verla. Muy dura.

[Nathan Colbert]

Sabía que tampoco podía subir mucho la voz en la Enfermería (porque por algo esos cuadros de enfermeras ponían el dedo índice sobre sus bocas haciendo puchero, ¿no?), pero ¡qué bueno verlas bien!
"¿Cómo están?" preguntó, deteniéndose entre ambas camas, tomándose un momento para calmarse y actuar como un chico de quince años y no una niña de 5 que ve a Papá Noel por primera vez.

[Kerry Whittaker]

Kerry miró de reojo a Julie; no era difícil adivinar lo que estaba pensando, aunque sí era fácil entender mal. De modo que, tras alzar los hombros como para restarle importancia al asunto (un par de costillas rotas, la pierna de Julie, ya sabes, lo de cualquier fin de semana), volvió los ojos a Nathan y preguntó: "¿Y Kyle?" de una manera completamente casual. Ella había querido ver a Nathan más que a nadie en el mundo, pero si tuviera un hermano gemelo, tal vez querría verlo en cuanto despertara.

[Julie Olivier]

Yo creo que esa solidaridad hacia su compañera va a arrancarle el corazón a Nathan.
Miró sorprendida a Kerry, en un primer momento pensó que estaba preguntando por su hermano por elección propia, luego los fantasmas ridículos de hermana celosa desaparecieron, y le semi-sonrió con un tic a su compañera, para fijar la vista en Nathan en espera de una respuesta.

[Nathan Colbert]

Tragó saliva, la sonrisa desapareció para ponerse serio. Sí, cierto, Kyle. Bajó la cabeza, metiendo la mano en el bolsillo del pantalón, quizás debería recordar para qué iba.
"El horario de visitas no empieza hasta dentro de un buen rato, McGonagall me dejó venir para traerles el castigo" sacó el papel del bolsillo, pero no se lo extendió a ninguna. No tenía ganas de arruinarles el día tan temprano. Miró a Julie, tendría que haber buscado a Kyle y cederle el honor.

[Kerry Whittaker]

Sintió un 'ouch' de diferente naturaleza. El castigo, a eso había ido Nathan. Se cruzó de brazos, sin estar muy segura de cómo responder. Al final optó por no hacerlo. Recuperó la cuchara con comida y la sacó del cuenco para llenarse la boca con el contenido de dudoso aspecto. También desvió la mirada al lado opuesto de donde estaban Julie y Nathan, como si la visita no fuera para ella y no quisiera entrometerse.

[Julie Olivier]

Miraba a Nathan y a Kerry sin emitir palabra. Si era obvio que les iban a dar un castigo, ¿por qué Kerry actuaba así? Por suerte Julie no tenía demasiada energía como para pensar en si debería entender qué pasaba allí y meterse o no. Estiró la mano para que Nathan le diera el papel, "No te preocupes, pero dile a Kyle que más vale que venga después".

[Nathan Colbert]

Nathan extendió el papel hacia Julie, sin querer mirar a Kerry. La verdad es que había estado mal en aprovechar la chance de visitarlas. ¿Él qué sabía, después de todo? Era obvio que Kyle, como hermano de Julie, tenía más derecho que él a estar ahí. Hasta Kerry lo sabía.
"Claro" se pasó las manos por el sweater, hacia abajo, nerviosamente. "Me..." tomó aire por la boca "me alegra verlas bien" dio un paso hacia atrás.

[Kerry Whittaker]

Se llevó otra cucharada de coso a la boca, porque la primera ronda fue masticada con tanta furia que no le duró demasiado el gusto (realmente sabía mejor de lo que se veía). Anda, no había notado que había alguien en una cama del otro lado de la habitación. ¿Quién sería? ¿El niño psicológicamente arruinado? No, era una niña.

[Julie Olivier]

((Eres mala, Kerry! Con Nathan y con el pobre niño traumado que debe estar durmiendo en un baúl acolchado de camino a su casa))

Su hermano vendría después, ¡no era el fin del mundo! Por lo único que esperaba que vaya pronto era para poder influenciar en lo que él le escribiría a sus padres, nada más. No es que lo necesitase para curarse más rápido ni nada parecido. Por eso no entendía aún el silencio de Kerry, ¿no la ponía contenta la visita? La miró mientras tomaba el papel de la mano de Nathan y luego volvió la vista a él. "Gracias", la cabeza le latiría menos si dejase de hablar, o quizás ya necesitaba más pociones. "Quédate. Ya estás aquí, no te pueden decir nada si te quedas un momento, ¿no?", le dijo señalando una silla que había cerca.

[Nathan Colbert]

Miró a Kerry, que ni siquiera estaba mirando en su dirección. Vaya, así pagaba haber sido tan idiota el día anterior, sabía que se lo merecía y aún así, dolía.
Se llevó una mano a la nuca, pasándose la palma por ésta con nerviosismo. Dejó de mirar a Kerry para ver a Julie con una sonrisa incómoda "Pues no sé, imagino que debería dejarlas descansar" se disculpó por adelantado.

[Kerry Whittaker]

((LOL, no soy mala con Nathan. Con el niño sí, muahahaha. Ok, no XD))

Se tensó cuando escuchó la invitación de Julie. -Quédate, quédate, quédate-. Dejó la cuchara en el cuenco y apartó la mesita-bandeja, todavía sin posar los ojos en alguno de sus compañeros. "Deberías" murmuró. "Además, sólo venías a dejar el castigo, ¿cierto?" añadió. Lo miró con resentimiento. Un poco sensible esta mañana, ¿no?

[Julie Olivier]

Y entre la cabeza que le latía y que no entendía demasiado de lo que estaba pasando, Julie se limitó a mirarlos a ambos cuando hablaron, tomando un poco más de agua -¿para qué hablé?-. Mejor dormirse, es verdad, estaba cansadísima. Tan cansada que sostenía el castigo en la mano izquierda y aún no lo había abierto.

[Nathan Colbert]

"Sí" confirmó con una mentira. Si Kerry no quería que se quedara, lo natural era retirarse.
"Que sigan bien, chicas" saludó, mientras giraba en dirección a la puerta y caminaba en esa dirección. Las observó por última vez antes de atravesar la puerta, por encima del hombro, pero siguió caminando.

[Kerry Whittaker]

No le aventó el cuenco con comida a la espalda porque sus movimientos iban más lentos que de costumbre gracias al dolor y las pociones. Pero ganas no le faltaron, y lo siguió con una mirada de odio hasta que desapareció. Luego movió el cuerpo hacia abajo en la cama, para poder hudir la cabeza en la almohada.