Por fin es viernes

[Dion Thornhill]

Miró a Joss y entrecerró un poquito los ojos, tratando de entender si realmente estaba siendo sincera o solamente era muy buena en fingir demencia. Dion estaría todavía con la voz quebrada explicándole innecesariamente a la bibliotecaria que realmente intentó darle una chance a su recomendación pero que no hubo química.
"Estás alimentando mi paladar con chocolates exóticos" respondió, alejando la vista de Joss para ver los libros a los que estaban enfrentados. -¡Ah!- hasta lo ayudaba a buscar esos libros para principiantes que claramente ella no necesitaba.

[Joss Brackenbury]

Habría soltado una carcajada si no estuvieran en la biblioteca. El chocolate del que le había dado, te recuerdo, sólo un cuadrito de la barra, tenía lo mismo de exótico que Dumbledore de ignorante. Sobre lo de la bibliotecaria, además de que para este momento ya se le olvidó, porque llevan toda la vida ahí, ella lo recordaría como que no había hecho absolutamente nada para ayudar. "Difícilmente califica como exótico" comentó. "Además, ¿cómo sabes que no sigo aquí porque estoy esperando que te ofrezcas a saldar tu deuda?". Por si tú o él no recuerdan, Dion había prometido que iba a ganar algo si ella encontraba uno de los libros primero, cosa que hizo.

[Dion Thornhill]

Apretó los labios para intentar no sonreír. Inhaló por la nariz profundamente e hizo un esfuerzo en enseriarse.
"¿Qué deuda?" preguntó mientras fingía no saber de qué hablaba ella, sin dejar de mirar los libros ahora como si le interesaran un montón. Como si le interesaran más que mirar a Joss. Ahora ni accidentalmente podía evitar encontrar los libros, ¿eh? No se sentía victorioso de llegar a ese momento.

[Joss Brackenbury]

Se mordió el labio inferior para no sonreír. "Está bien. No soy una persona particularmente paciente, pero tampoco llevo prisa por cobrar" dijo con calma. "Ya te acordarás" añadió. Si a partir de ese día Dion comienza a encontrar notas tipo '¿ya recordaste?' en sus libros, en los bolsillos de sus túnicas, debajo de los platos en los que coma, desayune y cene... no fue Joss, porque ella no tiene ese nivel de dedicación. Recomiendo que lo reporte al jefe de su casa.

[Dion Thornhill]

Lo que faltaba: pasar el último año con un elfo doméstico, convertido en stalker, al que alguna vez le pidió que le recuerde poner a lavar la túnica, y con el que nunca volvió a cruzarse para avisarle que ya la lavó hace tres años.
"Me siento libre de presiones y preparado para recordar promesas en cualquier momento" confirmó, ya no aguantando una pequeña sonrisa. "¿Leíste alguno de éstos?" preguntó girando la cabeza para verla, por si ella tenía alguna recomendación.

[Joss Brackenbury]

Por fin dirigió la mirada a los libros, la supuesta verdadera razón por la que llevaban toda la vida en la biblioteca, y leyó algunos de los títulos aunque sabía perfectamente que no, no había leído ninguno de esos porque fue su hermano el que le enseñó a usar la cámara y después todo fue cuestión de práctica. A lo mucho había consultado por dudas específicas, pero eso no contaba como 'leerlos'. Negó con la cabeza. Usó su mano libre para sacar el tomo que le gustó más (no sé qué significa eso... le sonó bien el título, o el apellido del autor, o le agradó el color) e inspeccionó la portada. Quería hojearlo, mas no podía con sólo una mano.

[Dion Thornhill]

Dion la observó sacar el libro y pasó la vista a los restantes, por si alguno le llamaba la atención a él: había uno sobre cómo fotografiar el atardecer perfecto (¡con tips sobre cómo fotografiar el amanecer perfecto, gratis!), cómo capturar mascotas inquietas para fotografía animal, básicos de la fotografía, guía para magos y brujas sobre cómo sacar las mejores fotografías familiares, y un manual sobre cómo aplicar los mejores hechizos para la protección del equipo fotográfico. Bueno, había otros libros, seguramente, pero Dion había ladeado la cabeza para leer esos títulos.
"Las cámaras se pueden encantar para que tengan como..." dejó de ladear la cabeza para ver a Joss "¿temporizador?" preguntó.

[Joss Brackenbury]

Decidió tantear la situación y aflojar discretamente el agarre que tenía en la mano de Dion. Era como tirar el anzuelo al agua, a ver si el pez picaba. Si él no metía resistencia, le iba a soltar la mano para retomar su vida como humana con cuatro extremidades funcionales, al menos por uno o dos minutos, en lo que revisaba si el libro que había sacado cumplía los requisitos.
"Depende de la cámara, pero se puede con la que voy a conseguir" aclaró. Y ella sabía cómo hacerlo, porque era una de las funciones que necesitaba cuando se sacaba fotos con Kit.

[Dion Thornhill]

"Cool" respondió, estaba interesado en aprender cómo funcionaba eso también. Sintió la mano de Joss un poco más floja, y aunque su instinto fue agarrarla un poco mejor como para que no se 'cayera', luego entendió que probablemente ella necesitaba la mano que él estaba secuestrándole.
"¿Necesitas que te preste esto un ratito?" preguntó, levantando unos centímetros la mano de Joss, sonriéndole.

[Joss Brackenbury]

Inevitablemente se sonrojó por la pregunta. Era demasiado pronto para que se hubiera acostumbrado a que al parecer Dion prefería ser directo, no como ella, que optaba por tantear el terreno antes de actuar. Pero luego sonrió de lado, en cuanto procesó las palabras. ¡La mano era suya! "Si no te molesta" contestó, aunque su tono era más desafiante que otra cosa.

[Dion Thornhill]

"Haré el sacrificio" exageró con una sonrisa. Levantó las manos hasta su boca para susurrarle un 'pórtate bien' a los nudillos de la mano de Joss antes de aceptar soltarla. Ya la había visto cargar con cosas y no dudaba de las capacidades de Joss, por eso esperaba que la mano de la que pensaba adueñarse fuera a cooperar con el estilo de vida del que ya estaba acostumbrada ella.
Giró la cabeza hacia la estantería otra vez, donde quizás había más títulos que podrían ayudarlo a decidir por un tomo, asumiendo que el que estaba por revisar Joss estaría aprobado.

[Joss Brackenbury]

Aunque el efecto de lo que hizo no fue tan poderoso como la primera vez (por el factor sorpresa, seguramente), Joss de todas formas sintió cómo se alborotaban las mariposas en su estómago por la proximidad de los labios de Dion a su mano. Agachó ligeramente la cabeza, tratando de ocultar el color en sus mejillas. Una vez que su mano fue libre, cerró el puño con suavidad y flexionó el brazo, para acercarla a su pecho, casi como quien intenta calmar a un cachorrito que acaba de tener una experiencia muy intensa.
Después recordó lo que planeaba hacer y abrió el libro para revisar el índice, aunque en realidad 3/4 de su atención estaban en su compañero.

[Dion Thornhill]

Dion volvió a ladear la cabeza para leer algunos títulos: definitivamente no iba a escoger ninguno de esos hiper-específicos, porque no estaba todavía a ese nivel, pero tampoco quería escoger una guía demasiado simple que solamente explicara cosas como asegurarse de que la gente esté en cuadro. Encontró uno que parecía interesante, un libro que parecía bastante nuevo. Lo sacó de la estantería y revisó la información sobre el autor en la chaqueta.
Luego pasó páginas al azar, deteniéndose cuando había alguna ilustración con acciones numeradas al costado. Le gustaban esas cosas, le parecían útiles para aprender a familiarizarse con algo físico como una cámara.

[Joss Brackenbury]

Después de revisar el indice tres veces, su cerebro por fin logró hacerse con una idea general de los contenidos del libro, que a Joss le sonaron bastante bien. Eran cosas básicas pero importantes para un principiante, además de que los últimos capítulos entraban en temas que incluso ella necesitaría checar para mejorar su propio desempeño con la cámara. Y le latía que los autores fueran fotógrafos profesionales (el título lo implicaba) , así que era gente que tenía que saber lo que era no tener ni idea pero sí ganas de aprender.

Sonrió para sí misma, porque de pronto sentía que se estaba comprometiendo demasiado con un proyecto y eso siempre la ponía nerviosa. Por lo menos no era con el peor de los planes que habían barajeado ellos dos.

[Dion Thornhill]

Colocó ese libro bajo su brazo y agarró otro, el de los básicos que estaba entre cómo sacarle fotos a las mascotas y el de las fotografías familiares. Pasó las páginas al azar otra vez, había muchas fotografías como ejemplos. Eso también le resultaba útil. Qué difícil era elegir, pero eso le pasaba por no recordar lo que había dicho la bibliotecaria.
Frunció el entrecejo, buscando el año de publicación en las primeras páginas.