Por fin es viernes

[Joss Brackenbury]

Joss se imaginaba que podrían detener al primer random que pasara por ahí cuando quisieran una foto. Un completo extraño no pediría estar en la foto también. Si quisieran fotos en la sala común, se complicaba un poco, pero siempre estaban los de primero. Si el momento que querían capturar fuera un poco más privado, esperemos que la cámara que ella planea conseguir prestada tenga temporizador automático. Oh, no, sospecho que tus pensamientos aterrizaron en mi mente en lugar de en la de Dion.
Cuando notó que llevaba varios segundos con la mirada fija en un libro sin tener ni la más remota idea de cómo se llamaba o si era el que quería, se dio cuenta de que, en el futuro, quizá no le convendría ir a la biblioteca con Dion. Por lo menos no si el plan era buscar libros en serio. Inhaló profundamente y luego suspiró.

[Dion Thornhill]

Todos estos años pensando que tenías personajes con aptitudes en legeremancia y al final resultó ser que la que tenía capacidad de leer mentes era la player. Solamente quiero pedirte que no me la leas demasiado, porque aunque paso mucha parte del día en la alcantarilla, hago un esfuerzo por mantenerme del lado de la luz.
"No sé mucho de cámaras fotográficas" dijo en voz baja, pensativo. "¿Cómo haremos con el revelado?" preguntó, girando el rostro hacia Joss para mirarla. Para él esa era la parte más complicada, no tenía idea de cómo se hacía y la idea de confiarle las fotos a alguien era muy estresante.

[Joss Brackenbury]

Estuve a punto de escribir 'quisiera', pero la verdad es que no, no quisiera poder leer la mente de otros, muchas gracias. Y sólo tuve un personaje así, pobre.

Dion estaba haciendo preguntas muy válidas para las que ella todavía no tenía respuestas. Sabía que el truco de las fotos mágicas era la solución en la que se revelaba la película, pero no sabía cómo prepararla (no era algo que enseñaran en la clase de Pociones cuando estabas en cuarto). Sólo sabía que su hermano tenía una cámara, y que él se encargaba de pasarle las fotos que sacaba cuando se la prestaba en el verano a cambio de hacer algunas de sus tareas en casa. Sin embargo, si todas las fotos iban a ser de ella y Dion, evidentemente no iba a permitir que su hermano las viera. Pero calma, si Colin Creevey pudo resolverlo en su primer año en Hogwarts, no tengo dudas de que Joss podrá también. "No puede ser tan difícil" aseguró, más contestándose a ella misma y sus preguntas mentales que a Dion. "Seguramente la poción está en un libro aquí" añadió. No aquí, porque estaban en la sección de Artimancia, pero aquí en la biblioteca.

[Dion Thornhill]

Ah, la biblioteca: el lugar con todas las soluciones a sus problemas. Dion aceptó que realmente debía hacer las paces con la bibliotecaria, porque aunque ya estaba en séptimo, no podía vivir con miedo a tener que conversar casualmente con Madame Pince.
"Tienes razón" le dijo. Alzó la mano que tenía agarrada a la de Joss a la altura de sus hombros y la miró. "¿Pausa?" preguntó. O sea, va a ir a buscar esos libros ahora, ya. Ya. No la soltó, por si más que pausa era un stop. Y si era un stop, mejor ni pausaba.

[Joss Brackenbury]

Si bien su mirada se fue inevitablemente a las manos que tenían tomadas, su cerebro se tardó un par de segundos en procesar lo que él le estaba diciendo. Con razón no toda la gente se paseaba por Hogwarts con las manos enlazadas; era sumamente agradable (aunque yo cuestiono a Dion por disfrutar sostener la mano helada de Joss), pero también era muy poco práctico. Detuvo un pucherito manipulador que había comenzado a formarse en sus labios. No, necesitaba buscar su libro de Artimancia, y era innegable que soltar a Dion era la mejor de las ideas en ese momento. Además, él dijo 'pausa'. Movió la cabeza afirmativamente. "Pausa".

[Dion Thornhill]

La mano fría de Joss era una oportunidad única para sentirse dador de calidez, no le saques lo poco que tiene en la vida. No las bajó, aunque sonrió un poco cuando ella aceptó la pausa.
Acercó su rostro a las manos, rozando apenas con la nariz uno de los nudillos de ella y bajó la voz. "Ya regreso" dijo en un susurro, como si se lo avisara a la mano de Joss y no a su dueña. Levantó lentamente sus dedos, uno por uno.

[Joss Brackenbury]

Joss entreabrió los labios, tratando de asimilar lo más rápido posible la avalancha de reacciones que Dion desencadenó haciendo algo tan simple. Pero se sentía como si acabaran de moverle el piso, además de mandarle una nube de mariposas al estómago. Instintivamente cerró los dedos alrededor de su mano, como negándose a dejarlo ir. Después recordó cómo ser una persona racional y estiró los dedos, liberándolo. Apartó la mirada, tratando de enfocarse en los libros del estante. "Voy a estar aquí" anunció.

[Dion Thornhill]

Dion asintió como respuesta, tratando de fingir que no le causaba nada en particular que ya no estuvieran tomados de la mano. Quería confiar plenamente en que retomarían donde habían dejado la situación, pero no es tan confiado como para estar seguro de que Joss no cambiaría de opinión.
Dio media vuelta y desapareció por el pasillo, apurando el paso. No iba a perder tiempo: directo a preguntarle a la bibliotecaria en dónde estaban los libros sobre fotografía y revelado, y que le recomendara el mejor para aprender a hacerlo. Que fuera a pedirle otra recomendación, después del desastre anterior, tenía que contar como una ramita de olivo para la paz si es que no era imaginario su beef con Madame Pince cuando supiera que no leyó el libro que había devuelto.

[Joss Brackenbury]

Se obligó a no girar la cabeza cuando Dion comenzó a alejarse para seguirlo con la mirada. En lugar de eso, forzó a su cerebro a concentrarse en recordar el nombre del libro que tenía que buscar. Para su fortuna, su cerebro solía ser bastante obediente, así que no tardó mucho en volcarse en la tarea de localizar el ejemplar. Cuando lo encontró en el estante, le dio risa descubrir que había tres copias; nadie habría tenido que pelearse por nada. Sacó uno de los tomos. Ahora sí ya había más chance de drama para los siguientes que llegaran a buscarlo.
Colocó el libro encima del que ya tenía en brazos, y empezó a pasearse por el pasillo, checando qué más había.

[Dion Thornhill]

Dion fue hasta el escritorio de Madame Pince, donde estaba atendiendo a un Hufflepuff preadolescente. Se detuvo detrás, esperando como si hiciera una fila. Por suerte no demoró mucho en despachar al Hufflepuff con varios libros en sus brazos, y le preguntó a Dion qué quería. Aunque estaba todavía nervioso porque imaginaba que tendría que explicarle que sus recomendaciones no eran ideales para él, la bibliotecaria no le preguntó nada. Amablemente le dijo dónde estaban los libros sobre fotografía y sobre revelado (recomendó dos de fotografía en general, en el área de hobbies, y uno sobre revelados fotográficos mágicos en el área de pociones) y lo dejó ir.
Dion pensó en ir a buscar los libros, porque ese era el plan, pero sus pies lo llevaron de regreso a la sección de aritmancia.

[Joss Brackenbury]

Después de un par de minutos, en los que había comenzado a pasar las hojas de uno de los libros sin prestarles atención, se preguntó por qué no habían podido ir juntos a buscar lo que necesitaban para aprender a revelar fotografías mágicas. Era cierto que se habían mostrado un poco lentos en la simple tarea de encontrar y retirar un par de tomos de los estantes, pero si se lo proponían, ciertamente podrían lograrlo antes de que la biblioteca cerrara por el día.
Luego se dio cuenta de que, con su mano libre, la claridad de sus pensamientos era la usual. Y la diferencia era notoria. Sin embargo, había otras cosas que también pasaban cuando tenía la mano de Dion en la suya, y no estaba segura de que las cambiaría por ideas coherentes e inteligibles.

Si Dion no se arrepiente de regresar en ese momento, así la va a encontrar.

[Dion Thornhill]

Asomó la cabeza para ver si Joss seguía en la sección de Aritmancia. Se mordió el labio inferior al verla y tragó saliva. Ah, sí, ella parecía haber encontrado el libro, al menos. Él volvía con las manos vacías.
"Hey" saludó. "Tanto tiempo" agregó mientras caminaba hacia donde Joss estaba.

[Joss Brackenbury]

Levantó la mirada al escuchar la voz de Dion y cerró el libro que no estaba leyendo. Sonrió débilmente. "Se sintió como una eternidad" comentó, y esta vez sólo estoy 25% segura de que está bromeando. Después notó que él no llevaba nada en las manos, así que ladeó la cabeza ligeramente a la derecha. "Espera, ¿Hogwarts no tiene libros de fotografía mágica?" preguntó, sin esconder su sorpresa.

[Dion Thornhill]

Dion se detuvo apenas escuchó la pregunta de Joss, como si ella lo hubiera descubierto con las manos en la masa (ojalá).
"Sí hay" quiso tranquilizarla. "Pero surgió un inconveniente y necesito que vuelvas a... darme una mano" le ofreció su mano. Te juro que este chiste malísimo no lo viene pensando hace rato, se le acaba de ocurrir. Es más que comprensible que, después de escuchar algo tan horrible, no quieras volver a hablarle. Lamento que Dion me tenga de player, seguramente no es lo que él considera ideal.

[Joss Brackenbury]

Creo que tú y yo no imaginamos lo mismo al leer la frase 'con las manos en la masa'. Yo no querría que Joss cache a Dion así, para nada.

Al principio pensó que lo del inconveniente era algo real y se puso tensa. Después escuchó lo de la mano y, cuando procesó el significado, agachó la cabeza, en un intento patético de esconder que se estaba sonrojando otra vez. En su defensa, y como explicación a que no esté de acuerdo contigo en tu evaluación de tu sentido del humor (o el de Dion), Joss se estaba concentrando en que justo había estado pensando que podrían haber ido a buscar los libros juntos, y ahora Dion había regresado por ella. En su mente, eso opacaba cualquier otra idea.
Estiró el brazo y tomó la mano que le ofrecía.