Trolling

[Shiloh Shipton]

Uno de los deportes favoritos de Shiloh era incomodar a la gente. Sobre todo a las alumnas, porque las mujeres tenían una variedad de reacciones tan amplia que jamás se aburría y nunca sabía con certeza cómo iban a reaccionar ante las situaciones en las que las ponía. ¿Se imaginan que está haciendo algo muy perverso? Imaginan mal.

Shiloh estaba parado frente a la puerta de los baños de damas del tercer piso. Apoyaba la espalda contra la pared y tenía las manos en los bolsillos del pantalón, lo que hacía que la túnica se mantuviese abierta de forma nada casual, mostrando la camisa ligeramente salida en un lado de la cintura. Apoyaba un pie en la pared, para aumentar la imagen despreocupada que quería transmitir. Él sabía que la actitud corporal no era algo para descuidar.
¿Cuál era el deporte en sí, se preguntarán? Mirar. Pero no mirar traseros y otras actividades burdas como esa, él miraba a la altura de los ojos de las chicas que salían, haciendo rápidos ajustes a la altura de cada una de ellas.
Cuando las chicas salían del baño, lo primero que veían era a Shiloh ahí parado, solo. Y mirándolas a los ojos fijamente. Luego del primer momento, en el cual la naturaleza de cada una de ellas solía salir a la luz por instinto (algunas le sonreían, otras miraban el suelo y luego lo miraban nuevamente, otras se acercaban unos pasos a él porque entendían que quería hablarles...), él dejaba la vista fija en ese punto y no la movía más. Como si estuviese perdido en sus pensamientos y nunca hubiese tenido la intención de mirarlas.
A veces estaba media hora así, riéndose de ellas para sus adentros. A veces hasta tenía suerte y salía alguna chica más atrevida que el resto y se ganaba un poco de acción. ¡Díganme si no era un deporte genial!

[Shiloh Shipton]

((Doy por hecho que estás enamorada de mí pero que soy inalcanzable hasta que tengas tetas deje de ser amigo de tu hermano))

Me olvidé de aclarar que, cuando las chicas entraban al baño, él miraba hacia otro lado, dentro de lo posible. El elemento sorpresa era importante. La cosa solo se le complicaba cuando entraba una chica mientras estaba saliendo otra: ahí o se perdía a una o se deschavaba de antemano con la otra.

Cuando Polly salió y le mantuvo la mirada con las cejas de Gabe, Shiloh tuvo que hacer un esfuerzo sobrehumano para dejar el rostro inmutable y mantener la vista en el mismo lugar. Es que ¡era Gabe en miniatura y con cabello largo! Le fue muy difícil, pero logró pasar otros cinco eternos segundos sin moverse.
-¡Vete ya!-, pensó. ¿Cuál era la gracia de trollear a alguien con quien no quería meterse?

[Shiloh Shipton]

((Yo quiero que seas besada, pero no por mí))

Cuando ella empezó a avanzar, la mirada de él se mantuvo fija, por lo que a la larga terminó mirando por sobre su cabeza. -¿Qué quiere? ¿No tiene nada que hacer?-
"Vete, niña", le dijo sin moverse y olvidándose su nombre a propósito. "¿No tienes que ir a jugar con muñecas o algo?", agregó en tono de hastío. Si ella se paraba allí, las chicas que salieran del baño pensarían que estaban juntos por alguna razón.
¿Para qué quería él estar junto a ella? Tendría que sacársela de encima como sea.

[Shiloh Shipton]

La miró con expresión de hartazgo. "Eso es lo que claramente estoy tratando de hacer", dijo, señalando hacia la puerta del baño. No es sorpresa que Shiloh sea un poco sexista, ¿no?
"Pero me estás interrumpiendo, así que vete o le digo a tu hermano que te cuelgue de algún árbol. No me importa que seas niña". Hizo varios revoleos de mano, como queriéndo sacársela de encima y aún mirando hacia la puerta del baño.

[Shiloh Shipton]

La miró nuevamente, levantando una ceja. "¿Y por qué crees que no lo haría? No eres mi hermana, por suerte, así que si terminas pasando la noche colgada de un árbol no se me moverá ni un pelo", respondió, todavía sin entender que ella se refería a que su hermano no le haría nada.
Antes de terminar de hablar, la puerta del baño se abrió, por lo que Shiloh terminó la frase y se quedó mirando a la chica de cuarto año que salía de allí. Sin mover el cuerpo o el rostro, dejó la mirada fija en los ojos de la rubia, que se detuvo a guardar algo en el bolso y de paso volver a mirarlo, sin entender el por qué tanta atención hacia ella.

[Shiloh Shipton]

Ni me preocupo por educarte porque, con la familia que tienes, seguro que eventualmente te enterarás de cómo funciona el mundo para las enanas molestas. A Shiloh le encantaría ser que el destruya tus sueños, pero lo dejará en manos de la sociedad machista del momento. Él se queda con la parte de mirar a las chicas y hacerlas sentir incómodas, nada más.

Aunque por lo visto no en ese día...
"¿De qué mierda hablas?" le preguntó, olvidándose por completo de cuidar el lenguaje para parecer un señorito de alta sociedad. Giró el cuerpo alejándose de ella, más para evitar futuros golpes que porque le haya dolido el anterior. (Que, por cierto, sí le había dolido.)
"Está loca", le dijo a la rubia.

[Shiloh Shipton]

"¡No le creas nada, está loca!" repitió hacia la rubia. ¿Y por qué le importaba tanto lo que piense la rubia? Porque estaba relativamente buena para tener 14 años y porque no podía permitir que la hermanita de su amigo lo humillara.
Por lo visto, la rubia no opinaba eso de Polly, así que se acercó un par de pasos a Shiloh (sacando valor de quién sabe dónde, porque Shiloh no es conocido por ser una muy buena persona) y estiró una mano protectora hacia Polly, aunque sin tocarla. '¿Por qué no te metes con gente de tu edad?' le dijo, horrorizada por el acoso que casi había presenciado.

[Shiloh Shipton]

No, claramente el más malo no gana siempre la pulseada. El mundo está lleno de mocosas mentirosas como tú. Shiloh tiene un largo camino por recorrer si quiere volverse inmune a esa plaga.

Shiloh sí que la vio, y el rostro se le empezó a colorear de indignación. "¿Viste lo que hace?" se quejó, como si fuese un infante él también. Dio un paso hacia Polly, como para zarandearla, pero la rubia se le interpuso y lo amenazó con una voz algo temblorosa: 'Si no la dejas en paz... ¡llamaré a un Profesor!'
Shiloh volvió a frenar y miró alrededor. Detrás de ellas dos, a lo lejos, había un grupito de chicas que se había detenido en su trayecto hacia el baño y los observaba. nada bueno saldría de esto si no se detenía pronto. Sabía que no tenía ni un testigo que lo defendiera si tenía que explicarse ante algún Profesor.

[Shiloh Shipton]

Levantó las cejas, asombradísimo del descaro de Polly. ¿Para qué carajo querría que la acompañase? Shiloh se sintió bastante acorralado, a decir verdad: ¿sería peor el castigo o lo que fuese que quería la hermanita de su amigo con él?
Esperanzado en tener trayectos sin público en el camino, como para poder decirle todo lo que pensaba de ella sin miedo a castigos, eligió la opción menos escandalosa a nivel 'colegio': "Ok".
¿Qué? ¿Pretendías más palabras?

A todo esto, la rubia seguía desconfiando de él, pero tenía claramente ganas de deshacerse del problema (y de no ganarse enemigos), por lo que le dirigió a Polly una mirada preocupada y luego le aseguró a Shiloh que si Polly no llegaba bien a destino lo acusaría sin dudarlo.

Shiloh asintió, de mal humor, y estiró la mano con resignación.

((Perdón si fue mucho tiempo de acciones, cualquier cosa edito))

[Shiloh Shipton]

Al alejarse de la otra chica, a Shiloh le pareció innecesario disculparse, así que solo la miró con el ceño fruncido, sin decir palabra. Se sentía un idiota por estar yendo de la mano con la hermanita de su amigo. No solo era más chica, sino que era eso: la hermanita de su amigo.
Y pensar en eso le dio un escalofrío en la espalda, porque quizás en el fondo de toda su personalidad hay una célula con conciencia que aún no se murió: Polly era la hermanita de su amigo. Tendría que ir a aclararle bien las cosas a su amigo antes de que le llegaran chismes maliciosos. Sí, del tipo de chismes que él ayudaba a repartir.

"¿Por qué de la mano?" consultó, tratando de no mover demasiado la boca y de que solo ella lo oyese.

[Shiloh Shipton]

Mi ego dice que a la sombra hace frío, que te portes bien y te muevas, así se tuesta y se llena de manchas en la piel tranquilo. Dice que 'por favor', también, como para que le des más bola.

La gente por los pasillos los miraba pasar y se giraba para verlos de nuevo cuando pensaban que Shiloh no los llegaba a ver. Pero él se daba cuenta muy bien de quiénes no les prestaban atención y quiénes ya estaban cuchicheando entre sí sobre la extraña pareja que formaban la Hufflepuff flacucha sonriente y el Slytherin con cara de odiar al mundo que pasaban de la mano.
Shiloh estaba formando una lista mental nueva de gente que la iba a pagar algún día, y la lista la encabezaba Polly, aunque con ella no le quedaría otra opción que atenerse al dicho: 'La venganza es un plato que se come frío'. O para ser más exactos: 'La venganza es un plato que se come cuando Gabe egresa y Shiloh se busca un matón más grandote'.

"¿Cómo sabes que en el fondo no me gusta?" le dijo, tratando de sonar como si eso fuese verdad. No le salió demasiado creíble, pero al menos pudo vislumbrar algún tipo de via de escape si es que encontraba el interruptor correcto en la enana.

[Shiloh Shipton]

Con el 'cosas de princesas' nos enterneciste. No podemos torturarte tanto si nos decís esas cosas. Ah, no... Cierto que en este momento el que está sufriendo más es Shiloh.

"Es otra cosa más para la que voy a tener que esperar a que tu hermano egrese" comentó, tratando de sonar sincero y frustrado. "Porque tú no lo entiendes, ¿verdad?" le dijo, animándose a hacer algo extremo mientras hablaba: hacerle una caricia en el dorso de la mano que ella le apretaba con el pulgar, que era el único dedo que tenía libre.
A veces usaba en su beneficio la repulsión que lograba en general con su manía de toquetear chicas sin su consentimiento. No es que él ASUMA que es un toquetón repelente, pero en el fondo sabe que algunas cosas molestan a algunas personas demasiado puritanas.
Solo esperaba que Polly fuese de ese tipo de persona.

[Shiloh Shipton]

Que Polly se quede tranquila, entonces, porque Shiloh no quiere ser emperatriz. Gracias, pero él prefiere los puestos reservados para varones. Y mientras más importantes, mejor. Ya es Señor para sus elfos y no pretende ir para abajo sino para arriba. Quizás algún día consiga elfos que le digan Gran Señor Todopoderoso y con eso se quede conforme y no moleste más.

"No sé cuánto sabes de relaciones adultas, Polly, pero a veces es necesario decir algunas cosas" insistió, muy conforme consigo mismo por estar haciéndole eso a ella. ¿No que era como molestar a Gabe, en el fondo?
"Algunas otras, no" agregó, subiendo con el pulgar hacia la muñeca de ella y manteniendo la expresión del rostro, concentrado en no hacerle notar nada más que seriedad.

[Shiloh Shipton]

El comentario le dolió, aunque trató de disimularlo manteniendo su vista al frente. Igual Polly lo puede haber notado porque él aceleró el paso y el apretón de la mano. Con lo flaquita que era ella y de haber tenido más fuerza, Shiloh la podría haber llevado como un banderín.
"Habló la más linda..." le devolvió con tono ácido. Si no puedes vencerlas, húndelas. Lo van a escribir en su lápida. (Sí, esa lápida que muchas van a ir a escupir.)

[Shiloh Shipton]

"Pfff" se le rió, con cero tacto. "Solo trece... ¿A qué edad vas a crecer, entonces? Mis compañeras, a tu edad, ya tenían escote". Es malísimo, ahora entiendo por qué Gabe no quiso repetir de año para seguir siendo su amigo guardaespaldas.
"Aunque tengo una duda sobre eso... Sobre cómo serás cuando crezcas, quiero decir" le dijo, girándose y sonriéndole de forma un poco maliciosa. Si ella aún estaba ruborizada, él fue instantáneamente feliz.