Promesas hechas para ser cumplidas

[Julie Olivier]

((Alta PERV tu mamá O_o!!))

Siguió de reojo el movimiento de él, suponiendo que era el día en que Duke Temple hacía buenas acciones a los demás por elección propia y habñia levantado algo que se le habñia caido a ella. Levantó la vista hacia la mesa -¿¡y eso!?- y siguió hasta mirar a Duke, con una ceja más levantada que la otra y una mejilla colorada aún. Una diosa, sí, no me digan que no.
No tenés respeto por el cansancio ajeno, tirano.

[Duke Temple]

((En mi fantasía me adoptó Angelina Jolie, ¿qué querés?))

Qué lástima, Julie Olivier, que estés cansada. En serio, una lástima. Pero mis zapatos están cansados de no estar lustrados, hay que pensar en ellos también.
"Mis zapatos" se los presentó a Julie, por si no estaba entendiendo qué eran, o de quién. Y ojalá se acordara de la consecuencia que aceptó, aunque a Duke no le molestaría recordársela.

[Julie Olivier]

((Easy answer: A Brad Pitt, por supuesto!!))

Lo miró con la ceja más levantada aún, luego a los zapatos, luego de nuevo a él. ¿Qué demonios significaba eso? "Veo... ¿y por qué están en la mesa?", buenísimo que a Duke le chifle la neurona y se haya olvidado de reclamarle los masajes.

[Duke Temple]

((JAJAJA, sos peor que yo))

Nunca una frase mejor armada: Duke, efectivamente, solamente tenía una neurona, y esa era la que se había acordado de la lustrada de zapatos. La que se iba a acordar de los masajes se murió el otro día, cuando se golpeó la cabeza contra un estante.
"Oh, disculpa" agarró los zapatos y los levantó justo frente al rostro de ella antes de acercárselos al pecho, esperando que los agarre con amor y cuidado. La miró, ¿ahora sí estaba bien? ¿Era de mala educación ponerlos en la mesa, no?

[Julie Olivier]

((Aunque el rumor de que lo va a dejar por Johnny Depp me está matando... Muy linda Angelina, pero no merece un Johnny en su vida!!! T_T))

-¿?¿?¿?- Ok, estaba dormida aún, pero ese era el despertar más bizarro del mes, y eso que competía con un despertar en la enfermnería y todo, ¿eh?
Sus brazos quedaron a los lados del cuerpo sin moverse en ningún momento. Si Duke soltaba los zapatos, éstos caerían así nomás al suelo. La ceja indicadora de cortocircuito estaba latiéndole ya con fuerza.

[Duke Temple]

((Vos quedate con ellos y mandame a Angie a casa, basta de problemas (?)))

Bueno, entonces los zapatos cayeron al suelo. Duke frunció el entrecejo "Se te cayeron" le informó, no le hacía gracia. Eran carísimos esos zapatos, no estaban como para tirarlos al piso como si fueran zapatillas de lona hechas en China.
"Hey" llamó, con seriedad. No le causaba gracia ya nada.

[Julie Olivier]

La expresión se le aproximó al de un pichón de asesina serial, Duke, tené cuidado de cómo haces que se despierte esta leoncita, porque puedes perder un par de dientes en el camino. "¿Qué?", se alejó un paso de los zapatos, mirando a Duke ya a punto de golpearlo, porque ¿qué estaba haciendo allí tan pesadamente? ¿por qué no seguía su camino después de ayudarla a levantarse? Ya dudaba de que no haya sido él el que la despertó.

[Duke Temple]

Se agachó una vez más a levantar sus zapatos, y los dejó otra vez sobre la mesa.
"¿Los zapatos?" preguntó, señalándolos con un dedo "¿Los ibas a lustrar, hola?" alzó las cejas. ¿Todavía estaba dormida, tenía una contusión, qué le pasaba? Duke estaba completamente ignorando si Julie estaba molesta. Él quería sus zapatos lustrados.

[Julie Olivier]

Lo miró con el rostro casi desencajado de asombro. ¡Desubicado! ¿Cómo se le ocurría que iba a trasnochar sólo para limpiar sus mugrosos zapatos? Sí, recordó la Consecuencia. Y ahora prefería que Duke se hubiese acordado de los masajes, al menos se podía alegar falta de fuerza mientras se hace el masaje y dormirse en el camino.
"Yo me voy a dormir", le dijo dando un paso hacia atrás, alejándose de él y dispuesta a dejar sus libros así desparramados hasta el día siguiente.

[Duke Temple]

"¡No!" exclamó, ¿estaba bromeando? La siguió, si ella daba un paso, el daba dos hacia ella. No volvió a agarrar sus zapatos. Tenía otro par, pero quería usar esos el día siguiente.
"Julie, necesito los zapatos para mañana" le explicó, quizás no estaba haciéndose entender bien. Eso solía sucederle. "Lustrados" ¿más explicación?

[Julie Olivier]

¡¡Aghhh!! La injusticia del juego que había propuesto era increíble. "¿Y por qué no te acordaste de día? Lo siento...", le dijo dando dos pasos más hacia atrás. "Te dije que te los lustraba, pero no aclaraste nada del horario. Eso lo decido yo", y sí, ahora ya se acordaba de toda la conversación. Otro pasito. Y en cualquier momento comenzaría a correr, te aviso.

[Duke Temple]

Ah, no, a llorarle a Godric con esas cosas, lo hubiera pensado antes de proponer el juego y presentarle el concepto de consecuencias.
"Hey, no, ¿desde cuándo?" preguntó cruzándose de brazos. Él quería sus zapatos lustrados, ¿cuántas horas faltaban hasta que empezaran las clases? ¿Ocho horas, nueve? No era culpa de Duke que ella necesitara dormir.

[Julie Olivier]

Otro pasito atrás. "Yo no inventé las reglas. Y no aclaraste horario en la consecuencia, así que...", levantó los hombros y giró fugazmente la cabeza hacia un lado, para ver con el rabillo del ojo si tenía el campo despejado hasta la escalera o se mataría en el intento de huída. Había gente charlando justo donde comenzaba -¡maldición!-, ¿y ahora? Quizás correr en círculos sea una solución momentánea.

[Duke Temple]

"¿Y cómo se yo que tú no inventaste las reglas?" preguntó, Duke jamás había escuchado hablar de ese juego hasta que ella lo propuso. De acuerdo, eso quizás se debía a que él tenía una árida vida social.
"Aparte no me habías dicho nada del horario, ¡estás haciendo trampa!" exclamó. Y era injusto, él la había llevado de caballito hasta once.

[Julie Olivier]

((JAJAJAJA Julie y Duke van hasta Once XD))

"Yo no las inventé", repuso mientras pensaba en cómo zafar de aquello. "Podrías haberme dado una consecuencia más estricta si querías...", hizo un paso al costado para interponer un sillón entre ambos, "... pero cuando se acepta, queda así", terminó, para aclarar que ahora no tenía forma de cambiar lo que ya había sido aceptado.