Beyond Hogwarts RPG - Foro de rol Play-By-Post ambientado en el mundo de Harry Potter
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Ladrón de poca monta
- Valentine Young
- Salem
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Ladrón de poca monta
Ugh, mazmorras, al parecer estos británicos con su castillo embrujado no se hacían ni la más mínima idea de lo peligroso que era dar clases de pociones en un lugar como aquel, no habían vías de escape adecuadas, ni iluminación apropiada, ni suficientes conductos de ventilación. ¿Qué hacían cuando alguien explotaba un caldero? Para Val era todo un misterio, hasta el momento no había presenciado un acontecimiento como ese, pero estaba segura de que todos iban a morir en un santiamén, asfixiados o aplastados.
Pero haciendo un intento para olvidar lo poco que le gustaba aquella parte del castillo, Val caminaba por el pasillo donde se encontraban el aula de pociones, buscando la puerta que correspondía al despacho del profesor, ese hombre que parecía vampiro y le daba repelús. Lo buscaba porque, en la conmoción que se causaba al terminar la clase, al profesor se le había olvidado entregarle la redacción que había asignado sobre la Tercera Ley de Golpalott y ella no lo había recordado hasta llegar a su sala común. Ese pequeño problema con tener un apellido con ye y estar de ultimo en las listas. Al llegar a la puerta, le dio golpecitos por lo que le parecieron diez minutos, luego, al no recibir respuesta, se lanzo hacía el pomo para forzar su entrada, desesperada por tener de vuelta su pergamino. Porque, para ser un tema del 11er 6to curso las notas habían sido muy bajas entre sus compañeros.
Si alguna persona llegaba a asomarse por allí, se iba a encontrar con Val dándole golpes y empujones a la puerta del despacho de Snape como si se tratara de un ladrón con poca experiencia. Alguien por allí olvidaba el uso de la varita mágica para irrumpir ilegalmente en propiedades privadas.
Pero haciendo un intento para olvidar lo poco que le gustaba aquella parte del castillo, Val caminaba por el pasillo donde se encontraban el aula de pociones, buscando la puerta que correspondía al despacho del profesor, ese hombre que parecía vampiro y le daba repelús. Lo buscaba porque, en la conmoción que se causaba al terminar la clase, al profesor se le había olvidado entregarle la redacción que había asignado sobre la Tercera Ley de Golpalott y ella no lo había recordado hasta llegar a su sala común. Ese pequeño problema con tener un apellido con ye y estar de ultimo en las listas. Al llegar a la puerta, le dio golpecitos por lo que le parecieron diez minutos, luego, al no recibir respuesta, se lanzo hacía el pomo para forzar su entrada, desesperada por tener de vuelta su pergamino. Porque, para ser un tema del 11er 6to curso las notas habían sido muy bajas entre sus compañeros.
Si alguna persona llegaba a asomarse por allí, se iba a encontrar con Val dándole golpes y empujones a la puerta del despacho de Snape como si se tratara de un ladrón con poca experiencia. Alguien por allí olvidaba el uso de la varita mágica para irrumpir ilegalmente en propiedades privadas.
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Cuando entendió que los empujones no iban a funcionar, es decir, cuando su hombro y brazo empezaron a doler, decidió que era mejor probar con otro tipo de estrategia. Se quedo quieta por unos instantes, tomo una bocanada de aire y puso ambas manos sobre el pomo "Ábrete" le exigió al pedazo de metal para comenzar a girarlo en todas las direcciones que conocía, esperando que alguna lo hiciera ceder.
Pero aquello tampoco parecía funcionar, así que se vio obligada a detenerse y mirar la manija fijamente, pensando en una forma de abrir la puerta sin recurrir al uso de la fuerza bruta. Necesitaba ver la nota sobre su pergamino, no porque su madre fuese unatiger mom de los 80, no, claro que no. De la nada, un foco se encendió en su cerebro, sonrió triunfalmente, se llevo una mano al cabello, saco una horquilla de entre sus mechones y se agacho hasta que sus ojos quedaron al nivel del pomo. Doblo la horquilla y la fue acercando a la cerradura de la puerta, con mucha, mucha concentración, como si fuese el trabajo más delicado que existiera jamás. No había mejor forma de abrir una puerta que a la vieja usanza muggle, que la varita que le empezaba a pesar en el bolsillo se fuese a dar un paseo por los jardines.
Pero aquello tampoco parecía funcionar, así que se vio obligada a detenerse y mirar la manija fijamente, pensando en una forma de abrir la puerta sin recurrir al uso de la fuerza bruta. Necesitaba ver la nota sobre su pergamino, no porque su madre fuese unatiger mom de los 80, no, claro que no. De la nada, un foco se encendió en su cerebro, sonrió triunfalmente, se llevo una mano al cabello, saco una horquilla de entre sus mechones y se agacho hasta que sus ojos quedaron al nivel del pomo. Doblo la horquilla y la fue acercando a la cerradura de la puerta, con mucha, mucha concentración, como si fuese el trabajo más delicado que existiera jamás. No había mejor forma de abrir una puerta que a la vieja usanza muggle, que la varita que le empezaba a pesar en el bolsillo se fuese a dar un paseo por los jardines.
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Dejo la horquilla quieta justo frente a la cerradura, intentando recordar cual era la técnica apropiada para ese tipo de cerraduras, la puerta lucía vieja, al igual el resto del castillo que parecía una enorme y misteriosa tienda de antigüedades, por lo que cabía la posibilidad que la llave fuese una de esas largas con forma cilíndrica. Aquello suponía un problema para sus técnicas de ladronzuela, esas que sus primos de Arkansas se habían empeñado en enseñarle y su madre se había horrorizado al conocer; tal vez debía alargar más la horquilla, o añadir otra a su intento de llave, y luego hacer más de una torcedura. Ahg, ese ruido de pasos acercándose no le permitían concentrarse lo suficiente. Irrumpir en propiedades privadas requería de silencio y tranquilidad, no de... ¡Pasos! Lo que sonaba eran pasos, ¡Y estaban cerca!
Se quedo quieta con los ojos muy abiertos y el pedazo de metal bien cerca de la cerradura, incapaz de voltear para ver de quien se trataba. Casi podía sentir como se le hacía difícil respirar y el sonido de la sangre en sus oídos, -QuenoseaSnape,quenoseaSnape,quenoseaSnape- y ojala todas las brujas de Salem escucharan sus pensamientos y le concedieran su deseo.
Se quedo quieta con los ojos muy abiertos y el pedazo de metal bien cerca de la cerradura, incapaz de voltear para ver de quien se trataba. Casi podía sentir como se le hacía difícil respirar y el sonido de la sangre en sus oídos, -QuenoseaSnape,quenoseaSnape,quenoseaSnape- y ojala todas las brujas de Salem escucharan sus pensamientos y le concedieran su deseo.
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Se obligo a respirar cuando escucho la pregunta, también se tomo su tiempo en responder. Apoyo una mano contra el marco de la puerta y fue escondiendo lo más rápido que podía su intento de llave. Habían varías cosas claras allí: aquella persona no era Snape (quien obviamente tenía una voz menos sensual que la de Sieg ((No, Alan Rickman, nunca leas esto)) ) y ella era una pésima ladrona.
Tomo aire, de nuevo, con todo el disimulo que podía y se giro lentamente para encarar a... A la persona que la había atrapado con las manos en la masa "Y ahora ¿Qué cosa?" pregunto de vuelta, pretendió fingir no estar haciendo nada ilegal pero nada más al ver que tenía enfrente al alto, guapo incomprendido y fuerte alemán con el que veía clases en ropas demasiado deportivas para el clima, se le fue olvidando de nuevo como respirar.
Entiendanla, en Salem no se veían muchachos así. Bueno, si, pero Val se la pasaba en la biblioteca con los que usaban el uniforme normal.
Tomo aire, de nuevo, con todo el disimulo que podía y se giro lentamente para encarar a... A la persona que la había atrapado con las manos en la masa "Y ahora ¿Qué cosa?" pregunto de vuelta, pretendió fingir no estar haciendo nada ilegal pero nada más al ver que tenía enfrente al alto, guapo incomprendido y fuerte alemán con el que veía clases en ropas demasiado deportivas para el clima, se le fue olvidando de nuevo como respirar.
Entiendanla, en Salem no se veían muchachos así. Bueno, si, pero Val se la pasaba en la biblioteca con los que usaban el uniforme normal.
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Una variedad interesante...
-Inhalar, exhalar. Inhalar, exhalar. Inhalar, exhalar...- aparto la mirada del cuerpo del muchacho y miro de nuevo la puerta. Sí, era muy evidente que quería colarse allí, ¿Acaso no había algo que pudiera hacer para disimular? "¿Es un aula?" preguntó de repente con la boca entreabierta sin poder creérselo... ¿Tanto esfuerzo en una simple aula? Si ese era el caso, bien podía haber usado la varita sin preocuparse por dejar evidencias mágicas por allí. "¡Creí que era el despacho del profesor!" dijo volviendo a mirar al joven con un gesto incrédulo. Es que estaba atónita, todo un verano de entrenamiento en abrir puertas había estado a punto de ser desperdiciado en una simple aula, sin nada de valor académico.
Oh, esperen. No podía haber dicho eso en voz alta.
-Inhalar, exhalar. Inhalar, exhalar. Inhalar, exhalar...- aparto la mirada del cuerpo del muchacho y miro de nuevo la puerta. Sí, era muy evidente que quería colarse allí, ¿Acaso no había algo que pudiera hacer para disimular? "¿Es un aula?" preguntó de repente con la boca entreabierta sin poder creérselo... ¿Tanto esfuerzo en una simple aula? Si ese era el caso, bien podía haber usado la varita sin preocuparse por dejar evidencias mágicas por allí. "¡Creí que era el despacho del profesor!" dijo volviendo a mirar al joven con un gesto incrédulo. Es que estaba atónita, todo un verano de entrenamiento en abrir puertas había estado a punto de ser desperdiciado en una simple aula, sin nada de valor académico.
Oh, esperen. No podía haber dicho eso en voz alta.
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Ahora que había delatado sus intensiones tan estúpidamente, pensó en golpear su cabeza contra la puerta en un intento burdo de quedar inconsciente y hacerse la desentendida en todo el asunto, pero concluyo, tras un rotundo 'No' de la parte sensata de su cerebro, que esa definitivamente no era una buena salida.
Así que, sin levantarse del suelo, prefirió seguir charlando con el sexy y alto alemán, quien no tenía pinta de chismoso. "Igual que las demás" confirmo, dándole otra ojeada a la puerta, solo madera lisa, no había una placa que confirmara a quien pertenecía. "¿Dices hacer un hechizo?" pregunto tontamente, sintiéndose un poco nerviosa por culpa de haber sido pillada por un semejante hombre en actos vandálicos, que mala imagen la que daba, "Pero dejaría rastros aquí" señalo la puerta "Y aquí" saco su varita y la movió, "Alguien podría darse cuenta" le explicó, intentando sonar lo más tranquila posible. Obviamente, no había usado la varita porque no se le había ocurrido, pero ya que había hablado tenía bastante sentido no usarla. Osea, ellos eran mago no tenían un CSI mágico rastreaban huellas dactilares ni cabellos, rastreaban varitas.
Así que, sin levantarse del suelo, prefirió seguir charlando con el sexy y alto alemán, quien no tenía pinta de chismoso. "Igual que las demás" confirmo, dándole otra ojeada a la puerta, solo madera lisa, no había una placa que confirmara a quien pertenecía. "¿Dices hacer un hechizo?" pregunto tontamente, sintiéndose un poco nerviosa por culpa de haber sido pillada por un semejante hombre en actos vandálicos, que mala imagen la que daba, "Pero dejaría rastros aquí" señalo la puerta "Y aquí" saco su varita y la movió, "Alguien podría darse cuenta" le explicó, intentando sonar lo más tranquila posible. Obviamente, no había usado la varita porque no se le había ocurrido, pero ya que había hablado tenía bastante sentido no usarla. Osea, ellos eran mago no tenían un CSI mágico rastreaban huellas dactilares ni cabellos, rastreaban varitas.
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((Regreso tras largos días de estudio y comer libros, y me encuentro con que ¡Habemus Snape! Y yo queriendo colar a Val en su despacho... :( ))
Se paso una mano por el cabello, empezando a sentirse confundida por lo que el muchacho, cuyo apellido le sonaba a -¿Drachenshrek?-, decía. No sabía muy bien si eran impresiones suyas o él le estaba dando una razón para asaltar el aula/despacho de pociones. Como fuera, movió la cabeza negativamente, regresando su mirada al pomo porque si miraba mucho a Siegfried de Dubhe Alfa, estaba segura, se pondría nerviosa. "Pero..." tomo aire "¿Ya viste a este profesor, no?" miro de nuevo los extremos del pasillo, esperando no invocarlo con solo mencionarlo "Parece de esas personas que siempre se fijan en todo. Pienso que es capaz de oler cuando las cosas no están como las dejo" concluyo con un gesto de estar hablando algo muy serio.
Porque, obviamente, así era Severus Snape, no exageraba, ese tipo de cosas se notaban en la gente a leguas.
Se paso una mano por el cabello, empezando a sentirse confundida por lo que el muchacho, cuyo apellido le sonaba a -¿Drachenshrek?-, decía. No sabía muy bien si eran impresiones suyas o él le estaba dando una razón para asaltar el aula/despacho de pociones. Como fuera, movió la cabeza negativamente, regresando su mirada al pomo porque si miraba mucho a Siegfried de Dubhe Alfa, estaba segura, se pondría nerviosa. "Pero..." tomo aire "¿Ya viste a este profesor, no?" miro de nuevo los extremos del pasillo, esperando no invocarlo con solo mencionarlo "Parece de esas personas que siempre se fijan en todo. Pienso que es capaz de oler cuando las cosas no están como las dejo" concluyo con un gesto de estar hablando algo muy serio.
Porque, obviamente, así era Severus Snape, no exageraba, ese tipo de cosas se notaban en la gente a leguas.
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Valentine se quedo helada en su sitió por unos instantes, '¿Y crees que si lo haces sin magia no se va a dar cuenta?'... Cuenta, cuenta, cuenta... ¡Pero claro que se iba a dar cuenta! Había sido bastante tonta al creer que no lo haría, porque lo había hecho, muy inocentemente pensando que por ser mago el profesor no se daría cuenta de un acto de vandalismo muggle.
Respiro profundamente para mirar al muchacho de nuevo, "No creo eso" dijo, sintiéndose un tanto nerviosa "Pero... Yo, uhm, creo que no me descubrirían tan rápido de esta manera" movió la horquilla entre sus manos y apretó los labios, buscando sentirse más confiada "Tampoco es que este haciendo algo malo, solo quiero ver un pergamino" entonces volvió a mirar el pomo de la puerta.
No decía nada de eso para justificarse, solo quería convencerse que lo que estaba haciendo era correcto.
Sumamente correcto, ¿leyeron? un ejemplo para sus nietos.
Respiro profundamente para mirar al muchacho de nuevo, "No creo eso" dijo, sintiéndose un tanto nerviosa "Pero... Yo, uhm, creo que no me descubrirían tan rápido de esta manera" movió la horquilla entre sus manos y apretó los labios, buscando sentirse más confiada "Tampoco es que este haciendo algo malo, solo quiero ver un pergamino" entonces volvió a mirar el pomo de la puerta.
No decía nada de eso para justificarse, solo quería convencerse que lo que estaba haciendo era correcto.
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Abrió los ojos con sorpresa cuando Siegfried hizo su pregunta, se paso una mano por el cabello y miro al muchacho, ¿Qué por qué no quería...? "..." separo los labios para decir algo y luego los cerro. No se le ocurría nada que decir en su defensa, así que se mantuvo en silenció por lo que creyó un largo minuto.
"En realidad... Primero toque la puerta" dijo, apoyando una mano en el pomo para ayudarse a levantarse del suelo, no valía la pena seguir agachada, eso no hacía más que aumentar sus nervios. "Pero nadie respondió" se paso una mano por la falda, queriendo limpiar el polvo de ella, ¡Ay! es que Siegfried la ponía estaba tan nerviosa. "Entonces pensé... Que estaba bien si él no se enteraba" completo con los labios apretados. Oh, se sentía tan culpable y eso que no había hecho nada malo... Nada completamente malo.
"En realidad... Primero toque la puerta" dijo, apoyando una mano en el pomo para ayudarse a levantarse del suelo, no valía la pena seguir agachada, eso no hacía más que aumentar sus nervios. "Pero nadie respondió" se paso una mano por la falda, queriendo limpiar el polvo de ella, ¡Ay! es que Siegfried la ponía estaba tan nerviosa. "Entonces pensé... Que estaba bien si él no se enteraba" completo con los labios apretados. Oh, se sentía tan culpable y eso que no había hecho nada malo... Nada completamente malo.

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Vergüenza, Valentine sentía mucha vergüenza y nervios, y por eso no se atrevía mirar a Sieg a la cara y porque ¿Cómo que pensando las cosas que podría hacerle si estuviesen en otra situación? Osea, ¿Qué otra situación?. Había actuado tan impulsiva e infantilmente al intentar colarse en el despacho/aula, que no encontraba palabras para responder a Siegfried sin que sonara como... como una persona muy estúpida.
Tomo aire, cruzando los brazos sobre el pecho y dio una mirada corta al muchacho, "Es... Esa tarea que mando en la última clase" y no dijo más, porque empezaba a sentir que cavaba su propia tumba con cada cosa que salia de su boca. Ya ni siquiera podía recordar cuando era esa última clase en la que Snape había mandado a hacer la dichosa redacción sobre la Tercera Ley de Golpalott.
Tomo aire, cruzando los brazos sobre el pecho y dio una mirada corta al muchacho, "Es... Esa tarea que mando en la última clase" y no dijo más, porque empezaba a sentir que cavaba su propia tumba con cada cosa que salia de su boca. Ya ni siquiera podía recordar cuando era esa última clase en la que Snape había mandado a hacer la dichosa redacción sobre la Tercera Ley de Golpalott.
