Fin de la visita

[Lorenz Van Buren]

Un compañero de clases se había metido en la boca un pedazo de planta que sacaron del Invernadero 1 por error (Lorenz no sabía cómo era posible que algo así sucediera por error, pero ahí estaba su compañero de clases, todavía vomitando un líquido azulado cada vez que decía una palabra que rimara con 'ena') y lo mínimo que podía hacer era visitarlo, dejarle unos calderos de chocolate, y esperar que si alguna vez era él el que estaba en esa situación, fueran a devolverle la cortesía.
Acababa de salir de la Enfermería, y se dirigía hacia el extremo del pasillo que daba a un cruce con una escalera que subía. Le convenía subir y luego bajar directamente hasta el primer piso antes que bajar inmediatamente y caminarse tantos pasillos.

[Lorenz Van Buren]

No se le había ocurrido mirar hacia atrás, porque la verdad es que en su visita de vocabulario controlado (era difícil pensar en decir palabras que no acabaran en 'ena', siempre estaba la oportunidad de que se le escapara alguna por error) se había dado cuenta que quería decirle a su compañero que era una pena que se perdiera la cena. Porque tenía hambre, y vomitar azul seguro que también le dio hambre al pobre... uh, Gerry.
La escalera todavía estaba lejos, y ni quería pensar en el trayecto que tendría que hacer. Más que escaleras móviles, tendrían que haber sido mecánicas.

[Lorenz Van Buren]

Los Slytherin de primer año metían más miedo que Lorenz, la verdad, pero supongo que ser cauta no estaba de más. Escuchó que lo llamaban y miró por encima del hombro, dándose vuelta. Bajó la vista para encontrar los ojos de Josephine.
"Joss, hola" saludó con una sonrisa de lado, tomándose la confianza de usar un diminutivo del nombre. Es que ella era tan petit que a veces no podía evitar hallar 'Josephine' un nombre demasiado grande para ella. Frunció un poco el entrecejo, sin saber por qué lo había llamado ni qué hacía ella ahí (aunque él era el que nunca andaba por esa zona, no sabía si ella era una regular).

[Lorenz Van Buren]

Miró a Josephine unos segundos antes de responder: se quedó pensando que, realmente, más les valía a todos actuar así de amables si alguna vez él hacia una estupidez como la que hizo Gerry. Porque mira que recibir visitas de esas...
"No, lo vi hace unos momentos" trató de despreocuparla, negando ligeramente con la cabeza "Está bien" respondió breve, por ahí no le interesaban los detalles de que el líquido azul cada vez estaba saliendo más limpio y sin rastros de lo que Gerry había comido en el almuerzo.

[Lorenz Van Buren]

"..." miró a Josephine y asumió que no lo decía con mala intención. Desconfió un poco, porque no era raro que lo tomaran de estúpido (podía ser muy confiado), pero ladeó la cabeza "No, está bien. Supongo que de todos modos tienes razón" agregó, alzando los hombros para quitarle importancia. "Podemos ser bastante idiotas cuando nos lo proponemos" accedió, para relajarla.

[Lorenz Van Buren]

Rió negando con la cabeza "No, en serio, está bien" le aseguró, porque si ella no le creía que no se había ofendido por el comentario generalizador, el que iba a terminar sintiéndose mal iba a ser él.
"Y... ¿lo visitabas por alguna razón en particular o sólo... como apoyo moral?" preguntó, metiendo las manos en los bolsillos del pantalón como haciéndose el desinteresado en el tema. Porque si Gerry andaba con Josephine, estaba seguro de que iba a tener que preguntarle con qué la había hechizado.

[Lorenz Van Buren]

Esperemos que no, sería una lástima que Bellatrix se enzañara con Josephine, que tan buena e inofensiva parecía ser (uno nunca sabe, en realidad).
Se sorprendió de la buena intención de ella, como si no se lo hubiera estado esperando. Le hubiera sorprendido menos si ella hubiera estado luciendo la túnica de Hufflepuff. "Compañero de cuarto" respondió simplemente, dejando escapar una risa breve "No sea cosa que vuelva y nos llene las camas de vómito azul, ¿no?" preguntó en broma.

[Lorenz Van Buren]

Pero Josephine siempre podía usar tacones y Lorenz podía doblar las rodillas y encorvar la espalda, no hacía falta que los dos acabaran con dolor de cuello después de estar conversando, ¿cierto?
"Ni ningún otro color, a decir verdad" agregó sonriendo de lado. "Pero supongo que Madame Pomfrey se encargará de que nos lo devuelvan en perfecto estado" habló de Gerry como si se tratara de una cosa, pero estaba todo bien. Gerry tenía a Josephine preocupándose por él, con algo había que tratar de equilibrar el karma en el universo.

[Lorenz Van Buren]

Pero seguramente esas cosas le pasaban para equilibrar el hecho de que era bonita, inteligente y buena persona. No podía salirle todo bien, o la gente empezaría a quejarse de la buena fortuna de la francesita, y todos sabemos cómo acabó la Revolución Francesa.
"Pues..." miró a Josephine y rió, dejando caer los brazos a los costados del cuerpo como si se rindiera "ni idea. Pensaba perder el tiempo en la sala común hasta que se hiciera la hora de cenar, ¿por qué?" preguntó, interesado. Si ella proponía ir a limpiar las canaletas, él se unía.

[Lorenz Van Buren]

¡Claro! Eran compañeros, seguro que no se vería raro que anduvieran por ahí conversando después de tantos años de al menos tener que verse la cara obligatoriamente en clases.
"No, no tengo, sería genial" comentó, comenzando a caminar en la misma dirección a la que se dirigía originalmente. "¿Cualquier lado está bien?" preguntó, quizás ella tenía pensado algo en particular.

[Lorenz Van Buren]

Le sonrió mirándola de lado, ¿hasta donde los lleve la vida? Sonaba extraño escuchar algo así de una Ravenclaw, él que se los imaginaba a todos tan controlados y controlando cada instante de sus vidas. Era refrescante el recordatorio de que no todos eran así.
"No, no realmente... es decir, alguna que otra vez que habré perdido doblando en el pasillo equivocado, pero nunca con la verdadera intención de ir a cualquier lado" confesó, aunque no tenía nada en contra de la idea.

[Lorenz Van Buren]

Y la francesa estaba bastante gata, también. Pero eso era algo que no le podía decir.
"¿Como por ejemplo?" curioseó, después de todo él solamente se sabía sus caminos usuales de memoria, pero no solía irse por otros lados llevado simplemente por la curiosidad o el ocio. Ojalá pudiera decir que alguna vez estuvo buscando un aula vacía para hacer cosas, pero no tuvo la suerte.

[Lorenz Van Buren]

Por alguna extraña razón, no vemos nada negativo en la necesidad comunicativa que tendrá que tener Josephine de acercarse mucho a Lorenz. Es más, votamos a favor. Igual Lorenz se inclinó hacia adelante un poco, para facilitarle la tarea.
"Por supuesto" accedió, y a menos que fuera algo que no podría ocultarle a sus amigos (como la locación de un pote gigantezco de chocolate y oro que jamás se acababa), seguro que podía. El problema con él siempre eran las ganas más que la capacidad.

[Lorenz Van Buren]

No, no era mucho pedir, la verdad. Pero es que Josephine no se había acercado a Lorenz las suficientes veces como para poder ponerla a ella en un lugar tan alto en el ranking de prioridades, cosa que podría ser arreglado fácilmente con unos acercamientos más como éstos. Lorenz no es terriblemente difícil de convencer, verás.
Las expresiones de Lorenz fueron cambiando a medida que Josephine iba haciendo su relato: primero abrió grandes los ojos, luego los dejó entrecerrados, entreabrió la boca, apretó los labios, y finalmente dejó un punto medio entre todo eso, su cara más normal que pudo. "¿De veras?" preguntó inútilmente "Creo que escuché hablar sobre eso, pero no creí que-" sonrió a Josephine "¿De veras?" por ahí estaba bromeando con él.

[Lorenz Van Buren]

"Te lo prometo" lo dijo rápidamente, antes de tomarse el tiempo de pensar si realmente era capaz de guardar el secreto. No es que no pudiera, pero ¡qué tentador, el poder entrar a un lugar que siempre tenía lo que uno deseaba! Se puso una mano en el pecho y tomó el hombro de Josephine con la otra mano, sonriendo ampliamente.
No podía ni pensar en qué decirle, ¿realmente ella conocía dónde estaba ubicado ese cuarto? Le creía, pero seguía siendo algo que lo sorprendía, de una forma positiva, claro. "Woah" dijo, porque estaba imaginando lo genial que podría llegar a ser eso.