Alguien en la puerta

[Tristan Jenkins]

Se sintió un poco confundido (y preocupado) al no poder identificar a que se debía el cambio de ritmo, ¿Había sido por algo que él había hecho o porque ella estaba cansándose? Y honestamente, le parecía totalmente inapropiado preguntar. Lo siento ¿Estás cansada? Puedo terminar yo... Sonaba inadecuado pero quizá ¿No? Porque la imagen que generó su cerebro, ella observándolo mientras culminaba con ese asunto, solo hizo que su excitación aumentara.

Eso también le dio más ánimos para continuar el recorrido con su mano, la que aventuró debajo de la camisa con más cuidado que la vez anterior, en dirección a sus pechos.

[Frankie Gibbs]

Sí que era verdad que era difícil mantener ese ritmo con una sola mano cuando en otras circunstancias podía usar las dos y cansarse mucho menos, pero iba a llegar lo más lejos que pudiera y en el peor de los casos él tendría que relevarla unos momentos, ¿Qué tan malo sería eso?

Apretó los labios al sentir que la mano de Tristan pasaba por un golpe y detuvo los movimientos de la mano súbitamente. Cuando llegó a sus pechos retomó el ritmo aunque un poco más lento porque se distraía.

[Tristan Jenkins]

La reacción que tuvo ella ante su roce, lo hizo considerar con más seriedad sus opciones: primero, quizá debía abortar la misión de exploración que pretendía realizar debajo de la camisa y segundo, quizá era hora de relevarla con una de sus manos. Bueno, al menos así no tenía que preguntar.

Se humedeció los labios, bajó su mano hasta la cadera de ella, que él creía era una zona libre de moretones, y luego colocó su otra mano sobre la de Frankie moviéndola al ritmo que ella llevaba. Si lo prefería así, ella podía retirarse y él se encargaría de lo demás.

[Frankie Gibbs]

Aunque hubiesen pensado lo mismo, ahora que lo veía poner su mano sobre la de ella, solo podía pensar que era porque no lo estaba haciendo bien. Lo miró a los ojos sin dejar de mover la mano, ahora debajo de la de él.

"¿Prefieres hacerlo tú?" Preguntó, procurando no sonar molesta, preocupada u ofendida, porque no sentía ninguna de esas cosas. Decepción de sí misma, quizá.

[Tristan Jenkins]

-Mierda- ¿Se había equivocado? Intentó encontrar algo en su expresión o su tono de voz que le diera una pista de lo que ocurría, pero sentir la mano de Frankie bajo la suya, mientras hacía lo que hacía, no lo estaba ayudando a formar pensamientos coherentes en su cabeza.

Negó y quiso darle más fuerza a su decisión diciendo algo, sin embargo, al abrir su boca solo consiguió jadear ¿Eran demasiados estímulos? Usualmente le tomaba un poco más de tiempo, considerando todo lo que había pasado esa noche no creía ser capaz de alargarlo por más tiempo.

[Frankie Gibbs]

No sabía muy bien lo que estaba pasando pero decidió dejarse llevar y seguir moviendo la mano pese a tener la mano de Tristan sobre la suya. De alguna forma la estaba ayudando a mantener el ritmo, como un apoyo moral de su brazo cansado.

Intentó recordar la cara de Tristan cuando llegaba a ese momento cumbre pero era todo muy borroso por el alcohol. Le hubiese gustado saber si estaba cerca para acelerar, si ese jadeo era la primera bandera para avisarle. Se mordió el labio inferior, deseando no pensar tanto y solo verlo disfrutar.

[Tristan Jenkins]

((Para que quede de constancia que si pase por la holy church (chicken), pero que no fue mi culpa que estuviese cerrada))

En efecto, había llegado al llegadero. Y como ya he descrito mucho mal en este thread, me limitare a decir que fue bueno, como suele ser para la mayoría de los hombres. Mucho mejor que hacerlo por su cuenta porque Frankie le gustaba y eso le daba un gran plus.

Como ya estaba hecho, se quedó mirando el techo mientras su mente pensaba en cosas muy agradables como Frankie, o lo bien que estaba quedando la poción que dejó dejando preparando en el laboratorio esa tarde. Iba a necesitar unos minutos para recuperar el aliento.

[Frankie Gibbs]

Me alegro que llegara al llegadero, una lastima que no se habla del reguero del llegadero pero no vamos a entrar en detalles para que no hayas perdido el viaje a la holy church.

Apartó la mano con suavidad y la posó en su pecho, cansada de moverla y viendo cómo subía y bajaba con la respiración de Tristan. Le alegraba haber terminado el trabajo y se descubrió satisfecha de hacerlo. Nunca le había causado tanto placer el hacer sentir bien al otro, porque era una egoísta en estas cosas.

Giró el cuerpo hasta volverse a acomodar boca arriba, apartando la mano de Tristan y dejando que reposara a un costado, de esa forma no seguía apoyando el cuerpo en el brazo lastimado.

[Tristan Jenkins]

Gracias por ser tan considerada, mañana paso por la otra holy church a ver si esa sí está abierta.

Su mente estuvo perdida unos minutos más, pero para cuando Frankie se acomodó, él ya respiraba con normalidad. Giró su cabeza para mirarla, era demasiado bonita, atractiva y lo hacía sentir muy bien cuando estaban juntos. Acercó su mano al rostro de ella, que diremos estaba limpia, y le tocó el mentón y el cuello en una suave caricia, "Me gustas" dijo, porque su cerebro creía que el momento adecuado para repetir como se sentía.

O quizá su cerebro no creía nada, solo estaba dejándose llevar y había olvidado lo que habían hablado en el baño.

[Frankie Gibbs]

Giró la cabeza para mirarlo y sonreírle. Ese 'me gustas' causó el mismo efecto en ella que el primero, sintiendo punzadas de calor en la parte baja del cuerpo. Frankie decidía interpretarlo como le daba la gana, en ese caso le sonó como un 'me gusta como lo haces' y se sintió satisfecha, aparte de excitada. No le respondió nada con palabras, solo tomó la mano de Tristan que estaba en su mentón y la bajó a la abertura de su camisa, ubicándola estratégicamente en uno de sus pechos.
Tristan llegó al llegadero, Frankie estaba un poco lejos de ahí.

[Tristan Jenkins]

Gracias Merlín por no permitir que los personajes se enteren de nada más allá de lo que se expresa entre comillas o con gestos, así el dolor solo permanece para el jugador. Gracias, siempre pensando en el bien común.

Lo bueno de que el órgano más importante de su cuerpo estuviese más o menos fuera de servicio en ese momento, es que podía interpretar las reacciones de los demás sin darles muchas vueltas. ¿Le podía tocar un pecho? Ok. Entonces también podía tocar otras partes y quedar a mano.

Se apoyó en un brazo para quedar un poco sobre Frankie sin llegar a aplastarla, le besó los labios y luego continuó en dirección sur. Donde cumplió su deber de esa noche, sí saben a lo que me refiero porque no quiero tener que ir a la Catedral de mi ciudad, por favor.

[Frankie Gibbs]

Con lo bonita que es la iglesia.

Él no tener que mover ningún músculo excepto cuando su espalda se curvo al final, hizo que pudiese disfrutar plenamente la experiencia, sin pensar en las heridas, moretones y golpes que tenia en todas partes. Sintió su cuerpo pesado, más cansado de lo que nunca lo había sentido jamás, que si cerraba los ojos se dormiría al instante, pero se forzó a quedarse despierta hasta que Tristan volviese a ponerse junto a ella. Quería besarlo de buenas noches antes de que se fuese a cepillar los dientes porque lo veo como esa clase de tipo.

[Tristan Jenkins]

Sin importar la actividad que hubiese realizado, él era la clase de persona que se cepillaba los dientes sí o sí antes de dormir y después de cada comida. Y eso claramente, cuenta como comida.

Aunque no se encontraba tan cansado, y en cualquier otra circunstancia hubiese estado preparado para seguir con el espectáculo, al regresar junto a ella, ver los moretones de su cuerpo le hizo recordar que lo mejor era que descansara.

Cuando volvió a observar su cara, no pudo evitar pensar, otra vez, en lo bonita que era y lo mucho que le gustaba. Suspiró, le acarició el cuello, besó su frente y luego sus labios, deseando poder hacer eso todo el tiempo y no solo con el pretexto de tener sexo. Aunque también podían hacerlo, para que engañarse.

[Frankie Gibbs]

Creo que tienes que darte un paseíto por la holy church, pero como tú veas.

Me alegro saber que Tristan empezaba a pensar como ella, ¿para qué más que eso si con solo sexo eran felices? ¿Ah, que no quisiste decir eso? Bueno. Como yo no tengo ninguna church cerca, no diré nada sobre sabor al besarlo, ni que era satisfactorio y esas cosas. Solo se dejó acariciar y besar, y ella correspondió como pudo, con el cansancio presionandole el cuerpo como una masa pesada sobre ella.

Pestañeaba lentamente y se esforzaba por mirar a Tristan. Esperaba que entendiera que ahora solo quería que apagara la luz y durmieran juntos. Juntos pero no revueltos.

[Tristan Jenkins]

((Ya dije que más tarde voy, les pido agua bendita también.))

La besó un par de veces más y al notar que estaba adormecida se alejó para ayudarla a meter bajo las sábanas y apagar la luz de la habitación. Ya no tenía sentido que durmiera en otro lugar que no fuera su cama y después de buscar el suéter que pensaba usar para dormir e ir al baño a resolver sus asuntos, regresó a la cama. Sin importar si para ese entonces, ella estaba dormida o no, él la iba a observar hasta quedarse dormido y solo evitaría abrazarla porque, con la mente mucho más clara, era consciente que podía lastimarla.