Una tonada para animar el ambiente

[Ronald Jacobs]

((Domingo 17:53, Lluvioso))

Los domingos eran esos días entre calma y ansiedad en Ravenclaw donde Ronald releía, repasaba sus tareas o estudiaba hasta que se le quemaban las pestañas memorizando cada dato de vital importancia para las clases del día siguiente. Se le había pasado el día mayormente en ello, siendo el sonido de la lluvia impactando en el cristal la única ambientación que había en la amplia sala común.

Nada de alguna tonada que lo mantuviera motivado en su incesante jornada de estudio, era esa falta de ambientación lo que hacia fricción en él ya que no había en aquella sala común un gramófono o vitrola que pudiera reproducir sus vinilos y al menos dar otro ambiente. Ya frustrado por aquello y viendo como poco a poco la luz del día se iba apagando, vino a el fugazmente la idea de dar él ese ambiente que le faltaba a la sala.

Se levantó rápidamente abandonando aquella mesa llena de libros y corrió como un rayo hasta las habitaciones y tan rápido como fue, volvió con su violín en mano.

Se acercó a uno de los ventanales de aquella sala que tenía vistas tan espectaculares del colegio aunque en esta oportunidad debido a la lluvia no se podía ver mucho , poso el instrumento en su hombro y delicadamente con el arco empezó a recitar la tonada elaborada por Ennio Morricone de una película americana que vio con su madre Annette, una película que a ella le parecía una maravilla del séptimo arte: "The Godfather"

((Libre))

[Penn Glyndwr]

Penn llevaba quince minutos en la sala común, habiendo pasado gran parte de la tarde haciendo un trabajo para Pociones con gente que le caía súper mal de otra casa que no vamos a mencionar, cuando escuchó la música. Frunció el entrecejo. Estaba de pésimo humor, ¡pésimo! El trabajo se había hecho interminable, se había peleado por detalles, y para colmo le había dado un calambre mientras subía las escaleras. Ya estaba mejor del calambre, pero su malhumor no había hecho más que empeorar.

El sillón donde estaba sentado estaba de espaldas a donde Ronald se encontraba, por lo que giró para asomarse lentamente para ver qué o quién era el origen del sonido tan poco usual en la Sala Común. Su mirada se enfocó en su compañero y entrecerró los ojos, muy serio.

((Permisoooo))

[Ronald Jacobs]

((Adelante))

Su propia tonada lo tenía sumido como en una especie de trance ya sea por la melodía o por el ambiente que daba aquel día gris y lluvioso que lo hacía sentir menos estresado, tocaba el violín desde sus 8 años al cuál le invirtió muchas horas y empeño de los que ahora se veía beneficiado con tonadas reproducidas con excelsa precisión. Disfrutaba sin percatarse de su alrededor, solo tenía ojos para su instrumento y la vista a través de la ventana, poco más podría colarse en su vista en aquel momento, solo disfrutaba como niño pequeño en silencio dejando que sea el instrumento el que emitiera el sonido.

[Penn Glyndwr]

-...Merlín- pensó con toda la amargura en su interior. Paseó la mirada por la sala común: había dos chicas de tercero mirando a Ronald también, con expresiones llenas de admiración y quizás hasta enamoramiento. Penn puso los ojos en blanco.
Se aclaró la garganta ruidosamente. Muy ruidosamente, mirando a su compañero. Penn era el peor.

[Ronald Jacobs]

Un estruendoso carraspeo saco a Ronald de su trance frenando la tonada en seco de aquella bella melodía, rápidamente se dio la vuelta en busca del origen de aquel carraspeo encontrándose con la mirada punzante de Penn -¿Por qué me mira así?- se cuestionó inocentemente.

Levanto las cejas en esa expresión de niño inocente que muchas veces le había servido para evitar problemas y se dirigió a Glyndwr "¿No te gusta Morricone? Puedo tocar otra pieza si quieres"

[Penn Glyndwr]

Se pasó una mano por el cabello para tirárselo innecesariamente hacia atrás cuando Ronald lo miró con esa expresión inocente, convenciéndose a sí mismo de que tenía que enojarse más.

"Soy parcial a The Sounds of Silence" dijo, sarcásticamente. Una de las niñas que había estado observando a Ronald con ojitos apasionados le estaba susurrando algo a su amiga en el oído.

[Ronald Jacobs]

-Ahh la canción de Simon y Garfunkel...oh espera ¿En serio sárcasmo?- se cuestionó claramente algo decepcionado, intento no mostrarse afectado esbozando una sonrisita irónica a la vez que desvió la mirada de Penn.

¿Por qué era así de grosero? El de Hammersmith no lo entendía si era una ambientación bonita el darle música a la sala pero no iba a dejarse pisotear, relajo sus expresiones cambiando aquella sonrisa irónica por una más amplia y confiada volviendo a conectar su mirada en Glyndwr.

"Simon y Garfunkel gran elección, una tonada maravillosa dejame decir" contestó con elegancia procediendo a deslizar el arco del violín delicadamente por las cuerdas del mismo reproduciendo la tonada, claramente presumiendo un poco de sus habilidades con el instrumento para no darle el gusto de la incomodidad a su compañero de casa.

[Penn Glyndwr]

Penn rodó los ojos, aunque por un lado (que no pensaba exteriorizar) no se esperaba algo distinto de su compañero. Hasta le parecía bien que se la complicara al ponerse a tocar ese tema, como un desafío. Al menos hacía la situación un poco más interesante.

"¿No pensaste que quizás al resto de la sala no le interesa escucharte destripar gatos, Jacobs?" preguntó, subiendo un poquito la voz. No sé, creo que literalmente el único que se está quejando es Penn. Pero le gustaba llevar la contraria.