Basta de palidas

[Mason Storstrand]

La miro brevemente, sin saber que contestar. Porque Mason seguramente no le hacia asco a ningun tipo de comida, pero viendo y considerando que habia otras y mejores opciones que la ensalada en ese momento solamente alzo un hombro.
"Como quieras, por mi esta bien asi" le aviso, porque tampoco queria cortarle las alas a ella si se queria servir ensalada. Lo que Mason queria hacer era hundir la cara en el plato asi como ya, total ya daba por sentado que iban a volver a servirse en breve. Y ojala tuvieran buenos postres, porque nada, los postres eran la principal razon para comer platos principales. La tierra prometida, la raison d'être.

[Gretchen Crowley]

Gretchen asintió brevemente, como para dar por entendido que eso era un 'no' a las ensaladas, y se giró para examinar el lugar y buscar un lugar donde sentarse.
Al hacerlo y ver al resto del alumnado yendo y viniendo por todos lados, la volvieron a invadir los nervios que le habían dado al acercarse a la puerta del Gran Salón hacía unos momentos. ¿Qué estaba haciendo ella allí?
Se quedó paralizada, con un leve ataque de pánico que hacía que sostenga con mucha más fuerza el plato de comida, porque en su mente ya había visualizado el papelón que sería que se le cayera ahí mismo, cuando la música aún no sonaba del todo fuerte (o al menos eso le parecía) y todos podían escuchar el plato cayendo.
¿Que estaba en una cita? ¿Qué? ¿Con quién? ¿Dónde está su mamá?

[Mason Storstrand]

Miró alrededor, sin enterarse del mini ataque de pánico de la pelirroja que estaba a su lado mientras buscaba con la vista una mesa desocupada que no tuviera restos de comida ajena.
Le apoyó el codo en el hombro a Gretchen brevemente, porque luego usó el codo para señalar. "¿Vamos a esa?" preguntó, señalando una de las mesas mejor iluminadas, quizás demasiado cerca del centro de la pista donde la gente estaría bailando. Ni enterado que ella quizás prefería ir a una mesa más disimulada, para tratar de desaparecer entre tanto rosa y rojo de la decoración.

[Gretchen Crowley]

¿Así que haciendo abuso de altura? ¿Por qué no le apoyaste el codo en la cabeza para hacerla sentir más petisa? ((¡Me dio mucha risa que señale con el codo! *le hace fuckyou con la rodilla* :P))

Gretchen no quería quedar como una mala acompañante, así que dejó que Mason decidiera a qué mesa irían. No le gustaba la ubicación, porque estaba muy expuesta, pero se aguantó los nervios y asintió con la cabeza. "Yo te sigo" le dijo en voz no muy alta.
Las manos le estaban empezando a transpirar, por lo que aflojó un poco el agarre del plato. No demasiado, de todas formas, porque seguía con miedo de que se le resbalara y cayera al piso. Si él comenzó a caminar hacia la mesa, ella lo siguió luego de una inspiración y exhalación muy lentas para calmarse.

[Mason Storstrand]

Ni sé cómo defenderme de esa, me re merezco gestos raros con la rodilla, Gretchen. O directamente podrías cortarle las rodillas, así ambos se ahorraban dolor de cuello por interactuar parados.
Ya que ella lo iba a seguir, Mason caminó hacia la mesa que había visto, una bien iluminada que estaba cerca de la pista. Alta visibilidad (porque había que ver lo que uno comía, eso era importante) y también les ahorraba el momento incómodo de las parejitas que estaban en la zona más oscura haciéndose ojitos, tomándose las manos o intercambiando fluídos. Fluídos bucales, esperemos, qué miedo sino. Dejó las cosas sobre la mesa, haciéndole lugar a lo que Gretchen cargaba también. "¿Acá está bien?" preguntó, para confirmar.

[Gretchen Crowley]

No sé si me estás viendo por la distancia, pero desde acá abajo te estoy haciendo gestos obscenos por crear a Mason tan alto.

"Sí" dijo más bajito aún, tratando de sonreír. Dejó el plato en la mesa y no dudó un momento en sentarse en la silla que consideró más alejada de la pista. Prefería estar toda la noche mirando hacia los bailarines y no quedar enfrentada a las miradas de todos los que estaban sentados mirando también hacia los bailarines. Como cuando te toca el asiento del colectivo que apunta hacia atrás.
Se moría de sed, pero no comería ni bebería hasta que Mason no empezara, así que sonrió y miró alrededor, buscando nuevamente a alguna de sus amigas. ¿Cómo podía ser que aún no las hubiera visto? ¿Y si se habían arrepentido ambas y la dejaban allí sola en la fiesta? -No, no pasará, no pasará- pensó.

Aunque la idea de ese festejo era ir en pareja, ella confiaba en que en algún momento podría juntarse con alguien de su grupo de amigas. Básicamente eso era lo que la había impulsado a ir.

[Mason Storstrand]

Tomó asiento frente a Gretchen, y luego corrió la silla más hacia el lado de ella (sin pegársele, porque había que dejar lugar para que los codos estuvieran cómodos a la hora de comer) para que ambos estuvieran casi que enfrentando a la pista, como si estuvieran por ver un show de tango en esos lugares carísimos en la costanera.
Acomodó las cosas sobre la mesa, como para que ambos tuvieran a mano lo que habrían de comer y beber. "¿Vuelves a tu casa para Pascuas, no?" preguntó, mientras pinchaba con el tenedor que asumo que tiene lo más cercano a su mano y se lo llevaba a la boca. Cero modales, perdón. Te debe el bon apetit para el próximo baile.

[Gretchen Crowley]

Cuando él acercó la silla, Gretchen se sintió agradecida y traumada a la vez: agradecida porque así él no le vería todo el tiempo el rostro que, como en ese momento, iba a tener casi toda la velada colorado; traumada porque... simplemente porque era demasiado cerca. ¿Tendría que hacer algo eventualmente con él? ¿Algo como tomarse de la mano o BESARSE? Esperaba que no, aunque soñaba que sí.
Soñaba que ella era otra persona y que pasaba una velada de novela con él.

"Sí, siempre voy. ¿Tú irás?" le devolvió la pregunta tratando de sonar normal y fijando la vista en el plato mientras se le pasaba el rubor. O no. Al parecer tendría que acostumbrarse a tener las mejillas ardiendo toda la noche. Pero siempre culpará a la iluminación, ya lo sabemos.
Cuando él comenzó a comer, Gretchen lo imitó lo más delicadamente que pudo. En realidad tenía sed, así que mientras comía se estaba armando de valor para animarse a levantar la jarra, y decidiendo si debería servirle primero a él o sería invasivo de su parte.

[Mason Storstrand]

Asintió masticando, mientras volvía a bajar la vista al plato para ver qué iba a comer a continuación. No tenía la sutileza como para pretender que no le interesaba la comida, pero estaba escuchándola e igual quería hablar con ella mientras comía. ¿No era esa la enseñanza de Hannah Montana con obtener lo mejor de ambos mundos? Tener un show para niños y usas bombachas de plástico en público.
"Siempre que puedo, sí. Igual el año que viene voy a tratar de quedarme todo el año en el castillo, para no sentir que desperdicié mi última chance" le dijo dramáticamente, alzando una papa en el aire con la ayuda del tenedor.

[Gretchen Crowley]

Mientras menos atención Mason le prestara a ella, más tranquila se sentiría. Todos sabemos que las adolescentes buscan la atención masculina, pero esa no era una necesidad que Gretchen tuviese aún. Por el contrario, sentía gratitud hacia los dioses de San Valentin en cada momento en el que él miraba cualquier otra cosa y le daba tiempo para regular su respiración y sus nervios.

"Ya casi terminas..." dijo, sin querer decirlo en voz alta en realidad. La frase sonó algo triste, pero podía pasar totalmente por empática. Aprovechando que él estaba gesticulando con la comida (lo había visto por el rabillo del ojo), Gretchen se detuvo un momento a observarlo, como para asegurarse de que recordaba bien su rostro. No lo miraba hacía tantos minutos a la cara que le daba la impresión de que podría habérsela cambiado sin que ella se diese cuenta.
Su tenedor con un trozo de pavo relleno quedó suspendido sobre el plato mientras ella estaba concentrada en él.

[Mason Storstrand]

Miró a Gretchen y luego pasó la vista al frente, porque cada vez que pensaba en que egresaría en junio del año siguiente lo ponía algo nervioso. Una mezcla de nostalgia y por sentirse poco preparado para ser adulto.
"Sí, se van volando los siete años" comentó tratando de no dejar que lo bajoneara la idea, por lo que se metió el tenedor en la boca. "¿Se te van pasando rápido a ti también o...?" preguntó, con la boca llena. Perdón, es que se le ocurrió así mientras masticaba, y no tenía la paciencia para dejar la conversación en pausa.

[Gretchen Crowley]

Se quedó paralizada cuando él la miró y la encontró mirándolo. Se supone que eso era algo normal en gente que conversa, pero para ella había sido como darse cuenta de estar a cien metros sobre el suelo sin recordar cómo se había subido a una escoba. Tragó saliva y mantuvo la mirada lo que pudo, para luego bajarla a su plato nuevamente cuando él miró hacia otro lado.
"No del todo. Quizás cuando me acerque a séptimo..." comentó.

Y que alguien le explique por qué tenía ganas de quedarse en Hogwarts en Pascuas, cuando siempre había deseado tanto ir a su casa para esa época.

[Mason Storstrand]

Tragó, escuchándola. Claro, estando en cuarto seguro que parecía que faltaba un montón para egresar, tenía mucho sentido eso. Asintió con la cabeza y agarró la jarra para servirle la bebida a Gretchen, y luego a sí mismo.
Mientras servía comentó "¿Estás nerviosa por los OWLs del año que viene, o tienes todo bajo control?" preguntó, porque ese era el tópico principal de todos los que pasaban a quinto año, el drama de los exámenes y la horrible realidad de la adultez asomando la cabeza. Igual Gretchen era Ravenclaw, lo de inteligente él lo daba por sentado.

[Gretchen Crowley]

¡Al fin podría beber! Mason había resuelto el asunto del peso de la jarra vs. los nervios de Gretchen sin que ella tuviese que pedírselo. ¡Le evitó mantener conversaciones internas por otros veinte minutos mientras moría de sed! ¡Mason corazón de león! O Mason coreizon de leion, que rima mejor. ((Déjenme ser feliz con mis cigarros recreativos y mis honguitos de la suerte... ¿?))

"Estoy muy nerviosa" comentó con sinceridad, frenando para tomar un buen trago de jugo. "Es que soy la primera en mi casa en entrar a Hogwarts y no sé qué tan difícil será el año que viene. ¿Te costaron mucho a ti?" le consultó. Ella jamás pensaría que un Hufflepuff era más tonto que el resto, como había escuchado decir en los pasillos a mucha gente prejuiciosa. Una de sus mejores amigas era de esa casa y era inteligentísima a su entender. Lo bueno de criarse en una casa de squibs era que llegabas a Hogwarts sin prejuicios ridículos sobre las casas: la felicidad de estar en Hogwarts tapaba todas esas cosas y las dejaba en otro plano.

[Mason Storstrand]

((JAJAJA ESA RIMA))

Cuando terminó de servir dejó la jarra a un lado, como para que no estorbara la vista desde el medio de la mesa. Todavía no había nada para ver, pero mejor prevenir que curar, como con el ébola. Ocultó algo de su sorpresa con el comentario de Gretchen, porque no recordaba si ella le había comentado antes que era hija de muggles (porque eso fue lo que asumió, pasándose por encima la posibilidad de los squibs). Mason es malo prestando atención.
"Eh, me costaron los que piden que escribas ensayos" admitió poniendo cara de dolor, lo que supongo que es mala idea cuando la intención es no asustar a alguien que está aún en cuarto. "Si fuera todo multiple choice o true or false sería más sencillo" agregó.