He ahí el dilema

[Andromeda Black]

Ahhhh.. Hogwarts, su segundo hogar. Bueno, más bien primero porque la casa de los Black no era algo que pudieramos catalogar como un hogar. Las estáticas armaduras que de vez en cuando adquirían movimiento humanos, y por lo contrario, las excitadas flamas que muy rara vez se quedaban estáticas, ahhh... ¡qué recuerdos! Los retratos parlantes que muy cortésmente saludaban a cuanto alumno pasara por enfrente de ellos, "¡Buenas tardes Sir Rodham! ¿Trabajando duro o durando en el trabajo?" saludó con un par de risas a uno que representaba la figura de un obrero que con esfuerzo araba la tierra "¡He ahí el dilema, señorita Black!" contestó el obrero no pudiendo evitar una sonrisa. Al menos había hecho sentir mejor a alguien, eso pensaba Andromeda. Se sentía un ambiente tan familiar... definitivamente extrañaba todo esto.

Era el receso de clases. Andromeda caminaba por los pasillos del cuarto piso, con su puffkein, Xenophilus, en mano; era la primera semana de septiembre, y GRACIAS A MERLIN, no se había encontrado con ningún pariente que se apellidara Black o que fuera conocido de la familia. Aunque, ciertamente, extrañaba a uno de sus primos en es especial, el único que consideraba como primo de hecho, y que tenía tiempo que no lo veía, todas las vacaciones para ser precisos (?!). -¿Qué pasaría si le pusiera una pluma en la cabeza?- se refería a su puffkein, mientras pasaba el dedo índice por la cabeza del animal, como si aquello fuera una especie de caricia; últimamente pensaba en un cambio de look para su mascota.

((primouuuuuuuuuu <3))

[Andromeda Black]

((Perdón por la tardanza pero no había podido entrar a internet *hugs*))

¡Noooooo! ¡Su cabello nouuuu! Inmediatamente después de que Sirius se atreviera a poner un sólo dedo sobre su cabello, su mano agarró con 'fuerza' la muñeca de él, forzando así a que todo su brazo bajara hasta donde tenía su puffkein "No.me.toques.el.cabello" ¡si ya lo sabía! "Mejor toca el de Xeno, mira, ¡muere porque lo acaricies!" já, y el pobre animal ni en cuenta...

Y sí, efectivamente, ¡gracias a Helga!, no tenía que estar soportando a las brujas de sus hermanas (ahora sí que... tomando el sentido que quieran de la palabra).

[Andromeda Black]

¿Què, perdoooònnn? ¡Por favor! "Que te guste estar manoseando a tus novias, no quiere decir que todos lo hagan" ignorò olìmpicamente la mueca de dolor de Sirius y bajò la mirada a su puffkein con una sonrisa de lado (obvio, le habìa causado risa aquello). "Aunque no dudo que muchos te imiten hmm.... Ademàs, ¡imagina las bacterias que me pegas! Vaya uno a saber dònde habràs metido esos dedos..." ew, la verdad es que no querìa ni imaginàrselo. Su puffkein comenzò a retorcerse, y con un ràpido movimiento, girò la muñeca de Sirius (de manera que no le hiciera manita de puerco, obvio) para colocarle en la palma al puffkein. -¡Estate Xenoo!- pensò algo desesperada porque el animal no dejaba de moverse.

[Andromeda Black]

Inocencia y candor.. JAAAAA. ¡Ya parece! Rió, obviamente, y con un tono socarrón que luego se convirtió en un "Mhja-ja" muy forzado. "¡El día que pase eso juro que me corto una boobie!" comentó con hilaridad en defensa. No es que le haya dolido u ofendido la comparación, pero, vaya, era inverosímil... Es que pffffff, el día que Andromeda se parezca a cualquiera de sus hermanas, la Tierra se va a comer su propio núcleo, o en su defecto se alineará con los otros planetas... Estiró su mano para ayudar a acariciar a Xeno y entonces bajó la mirada hasta éste que ahora yacía quieto en la mano de Sirius -¡Maldito animal! Nada más falta que quiera más a Sirius que a mi- y volvió a sonreír, aliviada, al menos, ya que el animal había parado de moverse.