Crisis Nerviosa

[Gerald Cowershof]

((Alguna vez has sufrido una, claro que si...))

Cuando se dio cuenta que estaba apretando con más fuerza de la recomendada, aquel tallo de planta con bocas, lo primero que hizo fue abandonar a una velocidad vertiginosa, casi estrepitosa, el invernadero número 3, donde Gryffindors y Hufflepuffs de 7mo estaban recibiendo su Clase Avanzada de Herbología. Bien había sentido la mirada de sus compañeros, y la acusadora mirada de Madame Sprout, a la que con un simple 'Enfermería' había dejado con la palabra en la boca. Estaba seguro que horas más tarde recibiría una notificación y su correspondiente castigo.

Respiro con fuerza consiguiendo así llenar sus pulmones de aire, apoyo su espalda contra la pared de piedra. Había vuelto a tener una de esas 'Crisis nerviosas' que solían tener los alumnos de 5to y 7mo ante sus exámenes. -¡Faltan meses para los exámenes!- se reprendió mentalmente, su mochila a un costado, con lentitud se dejo caer hacia el piso (aflojando su corbata); su cabeza entre sus rodillas y sus manos sosteniéndola. En sus siete años de estudio, nunca se había saltado una clase tan poco originalmente, soltó una carcajada carente de diversión, el nunca se había saltado una clase.

Más lejos de la enfermería, y de las aulas de clases no podía estar. Rogaba a Merlín con todas sus fuerzas que a nadie más se hubiese saltado una clase, ¡Demonios! De seguir con su molesta crisis, comenzaría a llorar como un niño pequeño. No sería agradable que alguien lo viera así. Nada agradable.

[Gerald Cowershof]

De las pocas opciones que hay, (¡ah un indefenso trozo de papel!), definitivamente preferiría darme de porrazos contra la pared. Que sabemos que es culpa de esos detestables profesores, pero es lo más cerca que estaremos de golpear a uno.

Alzo su cabeza sin llegar a voltearla completamente, aun no estaba llorando, ¡Gracias a Merlín no! Pero su respiración era tan irregular que llegaba a parecer que estuviese sollozando. Esbozo una media sonrisa (que más parecia una mueca) y miro por completo a la dueña de la voz que le llamaba, "Ah... Hey" una de sus compañeras de casa, si no se equivocaba. Un 'Hey' era lo único capaz de decir, sin perder el control de si mismo. Sin ponerse a llorar sin explicación, dejando que su orgullo se fuese por una cañería, porque tenía un poco de eso por supuesto.

((Adelante... Y disculpa mi poca inspiración))

[Gerald Cowershof]

((No te preocupes. Yo también he estado algo ausente, y lo estaré un poco más seguido D: ))

Uff... Te aseguro, que con un buen drama, y un poco de exageración prolongada, ellos llegan a sentirse algo culpables. ¡Que terrible no poder tomar apuntes por un esguince en la muñeca indebida! (?) Imagínate algún tipo de carga moral han de tener.

Para responder la primera pregunta, meneo de lado a lado la cabeza, mirando a su interlocutora y apretando mucho los labios, claro que pasaba algo, pero no sabía como decirlo, eso de tener 'Crisis nerviosas' no era para él. Para responder la segunda, relajo un poco su cara y soltó una risa seca casi sin gracia, ¿Qué si podía ayudarle?
"Si pudieras volver a Slughorn y a Mcgonagall, el gusano baboso y la gata malhumorada que son, podrías ayudarme bastante" comentó con simpleza, nada de grosero. Porque nunca, nunca, nunca, Gerald trataría a una chica de mala manera; solo en situaciones extremas, tan solo así.

[Gerald Cowershof]

Sonrió medianamente, era agradable saber que no era el único Gryffindor que odiaba (en algún aspecto) a su Jefa de Casa. Durante seis largos años tuvo que soportar la admiración que sentía su hermana hacia esa mujer y -'¡Lo grandiosa que es dictando clases!'- horrible, el casi nunca lograba entender las clases de Minerva McGonagall.

Volvió a mover su cabeza negativamente "¿Y después soportar la detención más larga y exhaustiva que alguna vez halla impuesto Dumbledore en Hogwarts?" bufó decepcionado (aun así sonreía), Gerald Cowershof no era un chico de meterse en problemas, le aterrorizaba la simple idea.

[Gerald Cowershof]

De a poquito y formamos todo un ejercito, sigamos el ejemplo de Harry y su Dumbledore Army.

Mejor no imaginemos la magnitud de la detención, conociendo a Dumbledore y el mal genio de McGonagall, puede que sea peor que una condena en Azkaban. Sonrió un poco más, escondiendo la pequeña risa que amenazaba por escapar de su boca "Siempre podemos idear algo" dio unas palmadas sobre la cabeza de Ciara, como si realmente fuera una niña pequeña e intentara consolarla. "McGonagall no se saldrá con las suyas" aseguró, sin siquiera estar muy seguro de sus palabras, las detenciones le daban alergía.

[Gerald Cowershof]

Uhg, a Gerald va a comenzar a darle urticaria, eso de haber escapado de clases era meterse en problemas. Estoy segura que Madame Sprout no se va a quedar de brazos cruzados, uhg... No. Olvidemos la urticaria mejor.

¿Afortunado? Después de graduarse tendría que buscar la manera de no morir en manos de un Mortifago, afortunado si pudiera quedarse en Hogwarts, sin McGonagall claro, hasta que todo fuera seguro. Creo.
"No es necesario que llores, con eso sera suficiente" porque si Ciara lloraba, fuera en broma o no, Gerald también lo haría; donde llora uno, lloran dos; y el orgullo a la cañería, junto a Myrtle. Igual rió suavemente, y palmeo la cabeza de Ciara otra vez, ella era una compañera muy agradable.

[Gerald Cowershof]

((No te preocupes, ya pasare yo por esos exámenes))

Siguió riendo, porque todos sabemos que la risa es tan contagiosa como una gripe de temporada. Pensó un poco, la mejor manera de calmar sus nervios era distraerse, y la mejor manera de hacer eso era divertirse, muy buena idea. "¿Qué tal jugar Snap Explosivo?" el llevaba su maso a todas partes, una partida en el receso era bastante agradable. Bueno, Gerald no era el mejor ideando planes divertidos ni nada por el estilo. Ojala y Ciara si tuviera una buena y más divertida idea.

[Gerald Cowershof]

Con solo mencionar a Filch, una especie de comezón tormentosa se apodero de su brazo izquierdo. Aparte de feo y malo (más feo que malo), Filch no era más que un chismoso que causaba problemas. "Esta bien" asintió y medio sonrió, porque Filch había borrado su felicidad.
Menos mal que Ciara lo tomo del brazo, porque seguro que sin ayuda no abría podido levantarse, había dejado que su bolso colgara descuidadamente de su hombro, y caminaba mirando a ambos lados del pasillo, intentando adivinar que aula estaba abierta y cual no.
"La segunda de la derecha" recomendó, sin tan si quiera recordar que aula era, ni que había dentro de ella.

[Gerald Cowershof]

Por causa de un descuido ardió Troya, si en la puerta de mi casa se aparece un caballo de madera, ni porque me digan que me lo envía Zeus lo dejo entrar.

Al ver que su compañera no avanzaba, recordó que era un hombre y que cuando la puerta esta cerrada, y lo que hay adentro se desconoce, las damas nunca van primero. Acomodo su mochila y saco su varita, detrás de aquel trozo de madera podían estar muchas cosas. Camino hacia la puerta y agarro el pomo con seguridad, girándolo despacio. "Si algo pasa, no dejes que el Prefecto se acerque a mis medias" miro a Ciara y sonrió, porque no todo tenía que ser trágico. Empujo con su hombro la puerta del aula, entrando con pasos cortos y mirando a ambos lados atento, sin bajar la varita.

[Gerald Cowershof]

El aula aparte de pupitres no tenía nada preocupante, ni siquiera la caja de cartón en el fondo. Pero por si acaso, Gerald se acerco a ella, para picarla con la varita un poco. Uno, dos, tres golpes con la vara y nada. Sin peligro aparente.
Regreso a la puerta, seguro de haber escuchado la voz de su amiga, asomo su cabeza con una sonrisa "No hay moros en la costa" realmente eso sonaba mejor en la televisión "Podemos estar acá sin que nos pillen" se hizo a un lado, dejando el espacio suficiente, para que Ciara entrara.

[Gerald Cowershof]

Con su mano libre hizo un florete, se inclino levemente y sonrió "Es un honor señorita" aunque usar un tono de voz galante, no era algo que le saliera bien, hizo su mayor esfuerzo, solo para seguir la broma; cerro la puerta (no sin antes revisar el pasillo) y camino hacia Ciara, procurando no chocar con los pupitres.
"Yo no me escapo de clases" respondió de manera sencilla, porque era un buen chico. Se sentó, hurgando en su mochila "Estudio. A veces doy clases, y otras veces camino" hinco los hombros, restando le importancia. Y si tenía horarios distintos, y probablemente más llenos; "¿Y tú? ¿Siempre te escapas?" saco el maso de cartas, y se ocupo en organizarlas.

[Gerald Cowershof]

¡Ah! Muchas gracias señorita, loa halagos son algo que Gerald recibe con frecuencia, yo no se porque, será que es medio sordo.
Dejo las cartas sobre la mesa y comenzó a revolverlas, cuidadoso de que no salieran volando por todas partes. Asintió con gravedad, aprobando las palabras de Ciara –Siempre hay una buena razón- y el también tenía una.
"Doy clases a todo aquel que necesite" contó con naturalidad, buen samaritano si que era "A chicos de los primeros años más que todo" alineo las cartas, procurando que no se doblaran "Pero si, la mayoría son chicas" créeme, no le daba la mayor importancia (a menos que fueran muy lindas), porque para Gerald solo había una chica de la cual preocuparse.
"No es mucho lo que gano, pero mis alumnos siempre entienden" termino por decir, con todo el orgullo del mundo.

[Gerald Cowershof]

¿Gery? ¿Cómo Gery Halliwel? ¿La Spice Girl? OHMYGOES... Y yo que pensaba que le dirían Jerry, como suelen hacer los Irlandeses con los Gerald, sobretodo por su parecido a un ratón D: ¡¿Gery?!
"¿Gery?" abrió mucho sus ojos, llanamente sorprendido "Ese nunca lo había escuchado" sonrió, a él (a contrario de la player) los apodos le parecían una manera agradable de llamar a las personas, por otro lado cuando eran ofensivos pues no. Rió divertido, ¿El corazón de sus alumnas? mejor la paga, en metálico es preferible; "De todo eso, lo que más me agradaría ganar es respeto" modesto si era, así que lo pueden extrañar todo lo que quieran, a duras penas se dara cuenta.

[Gerald Cowershof]

((Perdón, por tardar tanto))

Al player le preocupaba más el hecho de que Gery es una Spice Girl, no una mujer; de igual manera, me alegra saber que poner una 'r' de más vuelve el apodo más masculino. Gery, Gery, Gery... Gerry.

"No te preocupes" y dejo las muy ordenadas cartas sobre la mesa, no fuera hacer que explotaran de tanto ser tocadas. Alzo los hombros, para restarle importancia al asunto "Eso debe ser" se inclino hacía adelante "No soy un profesor tan terrible"; y tampoco es un hombre como los otros, Gerald no aprovecha, muy buen chico para hacer algo así; las mujeres golpean muy fuerte.

[Gerald Cowershof]

Las apariencias engañan todo lo que quieran, así de ingratas son; la cara de Gerald, ignorando sus eternas ojeras, no es engañosa. Tiene la ingenuidad a flor de piel, algunas veces más que otras, fíjate bien en eso.
Movió la cabeza negativamente y rió, con esa risa seca que le salía de a veces; no le tiene miedo a las mujeres, si les tuviera miedo, ni se les acercaría. Se enderezo, arreglando su corbata "Bueno" sintió sus mejillas arder "Y... ¿Qué no lo sabes?"; los chismes vuelan en Hogwarts, él creía que ya todos lo sabían.