El bello y la bestia

[Lina Ackerman]

A Lina le había costado un poco decidir un disfraz para ponerse en Halloween. Sabía que muchas chicas aprovecharían el festejo para usar ropa algo más atrevida de lo normal, y una parte suya totalmente quería subirse a ese tren. Mia ya tenía el boleto comprado, en todo caso, ¡y Lina quería ir en el asiento de al lado! Sobre todo porque ese tren la llevaría a uno de sus destinos favoritos: los chicos.
Pero por otro lado, Lina sabía que esa era la ocasión ideal para disfrutar el recorrido del otro tren, el que la llevaba a pasear por lugares como la clase de CCM y la sección de la 'B' de la Biblioteca. Es decir, su fanatismo más antiguo: las bestias y los animales.
Luego de mucho debate interno, decidió descartar su opción sexy (que no lo era tanto, porque su cuerpo todavía era bastante recto) y aferrarse a la opción que la iba a hacer más feliz: el disfraz de Swooping Evil.

El disfraz lo había imaginado gracias a una salida a Hogsmeade, en la cual había pasado por el frente de una tienda de telas encantadas. En la vidriera había visto una tela de color azul aterciopelado que brillaba ligeramente y que le había hecho pensar en un Swooping Evil. Había pasado la siguiente media hora dentro de la tienda, buscando una tela de color verde que tuviese la textura ideal para usar en el otro lado de la capa que ya estaba diseñando en su mente.
((Algo como un poncho hasta casi el suelo, con capucha, pero no de lana sino con la tela verde atrás y la azul adelante.))

En el fondo Lina sabía que esa había sido su elección desde el inicio, por más ganas que había tenido de ir con una minifalda o algo un poco transparente. Y por eso se sintió genial cuando se puso los zapatos negros del colegio, unas medias negras hasta arriba de la rodilla, un pantalón corto negro (que supuestamente no se iba a ver con la capa) y su genial capa-poncho. Para agregarle efectos al asunto, le había pedido a Mia que le pintase la cara de blanco y negro, tratando de imitar la cara de calavera de la bestia. El resultado no era perfecto (sobre todo porque no habían tenido mucho tiempo después de la cena), pero las dos se habían divertido mucho tratando de que su cara se alejase del estado de 'tuve un accidente con un paquete de harina' y se acercase más al de '¡Booh! ¡Asústate de mi cara de calavera con colmillos!'.

Cuando llegó a la fiesta, Lina se colocó la máscara que le dieron y entró al Gran Salón. No sabía si la decoración había cambiado o era solamente la iluminación y la falta de las mesas largas, pero el lugar parecía un mundo aparte. Se había detenido a unos diez pasos de la puerta para admirar todo a su alrededor, sin darse cuenta de que Mia había seguido caminando. Cuando quiso encontrar a su amiga, no la vio por ningún lado. Sin traumarse al respecto, se dirigió a una mesa pequeña a un lado del Gran Salón y se sirvió un vaso de jugo de manzana. ¿O era de arándano? Por un momento le había parecido que el color del líquido era amarillo claro, pero ahora lo veía rojo.

[Finn McDermott]

'Mi cielo: ¡Qué bueno que hagan una fiesta de disfraces en Hogwarts! Yo me acuerdo cuando en la escuela hacían fiestas... ¡pero eso era hace como sesenta años! Y bueno, cielo, tu abuela es una vieja ya. Para que no tengas que andar preocupándote por el disfraz, te mando uno que siempre quise que te pusieras... creo que de chico alguna que otra vez te enredamos en una sábana pero no era lo mismo. Si con ese pelo hermoso que tenés parecés un ángel de Botticelli, vas a estar precioso. Que la pases bien y no hagan mucha magia, ¿eh? No sé cómo serán las cosas en la escuela esa. Un beso, la abuela."

Desde que le había llegado esa carta con un paquete había estado reacio a abrirlo, pensando en que lo más sano sería esconderlo en el baúl y decirle a su abuela que muchas gracias, pero que no le gustaba ir a fiestas. Sabía que su abuela se iba a ofender, pero ¿tenía que hacer todo lo que ella quisiera para no ofenderla? ¿No había entendido en todos estos años que andar comparándolo con un ángel de Botticelli era vergonzoso? Pero le daba pena su abuela, y también sabía que estaría haciéndole pasar un mal momento al resto que vivía con ella (su abuelo y sus padres). Era demasiada gente, no convenía rebelarse.

Se probó el disfraz en su habitación, queriendo morir. Era una túnica blanca, con una túnica más corta color amarillo con cuello cerrado arriba, unas alas hechas de cartón y papel maché, sandalias y un aro de alambre cubierto de una guirnalda dorada para que parezca una aureola. No, ni de broma. No sobreviviría la vergüenza y morir antes de egresar le parecía un poco prematuro.

Se quitó la túnica amarilla, dejó las alas y la aureola a un costado. Se miró al espejo, decidiendo que era un... romano. Un romano cualquiera. Usó como cinturón el hilo con el que vino atado el paquete y decidió ir a la fiesta para no tener que mentir cuando respondiera la carta. Pensaba ir, comer un par de golosinas, y regresar a su habitación para dormir temprano. Recibir esa máscara obligatoria en la entrada cambió sus planes, porque sentía que todo se veía extraño, que la gente se veía extraña. ¿Tan buenos eran los disfraces que todos parecían gente desconocida?

[Lina Ackerman]

Lina terminó de tomar su jugo (que había resultado ser de manzana, como había pensado al servirlo) y se giró para mirar hacia el centro del salón, que estaba empezando a llenarse de los alumnos menos tímidos y con más ganas de bailar. Quería encontrarse con algún conocido, no porque le molestase estar sola o hacer sociales con otras personas, sino porque quería ver de qué se habían disfrazado todos. Pero ¿por qué no reconocía a nadie?
-Quizás la gente de mi año está del otro lado del salón- pensó. Mientras decidía si moverse de sector o quedarse allí (no era tan valiente como para bailar sola), se alisó la parte de adelante del disfraz y se acomodó un poco más hacia atrás la capucha. No quería que le tapase del todo el maquillaje, porque ya se lo tapaba lo suficiente la máscara.
Levantó la vista de nuevo y le pareció ver a alguien conocido. "¡Mark!" lo llamó. Levantó los dos brazos y 'aleteó' despacio un par de veces, para mostrarle su disfraz.

[Finn McDermott]

Miró a su alrededor, frunciendo el entrecejo y cuidando de no acercársele demasiado a nadie, porque no los reconocía. O no los conocía, quizás, Finn era un chico un poco antisocial y retraído que quizás ahora estaba dándose cuenta que no se había tomado un minuto para mirar a sus compañeros de colegio antes como para que un simple disfraz lo confundiera tanto, porque directamente nunca los había registrado.

Una ¿chica? estaba moviendo los brazos y mirando en su dirección. La miró, confundido, y luego miró sobre su hombro para ver a quién llamaba. No había escuchado que lo llamó de Mark, pero tampoco estaba muy seguro de que lo estaba llamando a él con esos movimientos. Volvió a mirar sobre su hombro, y luego a la persona que estaba aleteando en su dirección. -¿Huh?- dió un paso dudoso hacia ella.

[Lina Ackerman]

Ella también miró hacia el lado que miraba el supuesto Mark, porque quizás había más conocidos detrás suyo y Lina no quería perderse ni un disfraz. Cuando vio que no había nadie más, decidió acercarse a él y proponerle dar unas vueltas para encontrarse con más compañeros.
Se acercó imitando el vuelo del Swooping Evil, que bien podría ser de una paloma, porque jamás había visto uno volando. Así que aleteó un par de veces y, justo antes de llegar frente al chico, se agachó y dio un salto.
¿Su idea? Atraparlo como si le fuese a comer el cerebro. ¿El resultado? Una Lina bajita logrando tan solo encajar un 'ala' en el hombro de no-Mark.
"¡Ahora eres un fantasma sin cerebro!" le dijo, emocionada.

[Finn McDermott]

Observaba la extraña forma de acercarse de esta persona, y se quedó quieto mientras ella apoyaba un brazo sobre su hombro como esperando una revelación que explicara todo. Ahogó una risa cuando ella lo llamó 'sin cerebro', sin entender bien la referencia de su disfraz. ¡Ni siquiera sabía quién era! Cuando miraba a la chica parecía que sus facciones fueran irreconocibles, como pasadas por agua. Trataba de pensar quién sería, pero no lograba concentrarse en nadie en particular. Esta máscara terminaría dándole un dolor de cabeza.

"Quizás ya era sin cerebro desde antes" sugirió, entrecerrando los ojos para tratar de ver quién era. Le sonaba familiar la voz, pero no podía identificarla, lo ponía menos nervioso así en realidad. No se sentía tan incómodo hablando como si nada. "Si me echan de Ravenclaw quizás deba vivir en la lechucería" dijo mientras ladeaba la cabeza.

[Lina Ackerman]

Lina soltó una risita por lo del cerebro. "¡Pero si estás en Hufflepuff!" le dijo, soltándolo de su casi-(no)mortal agarre. "Qué tonto..." le dijo, soltando otra risita.
¿Era ella la que se había achicado o Mark había crecido? Le resultaba rara la diferencia de alturas, pero quizás tenía que ver con los disfraces o... ¿quizás el calzado? Por las dudas bajó la vista para chequear si él tenía plataformas o algo así.

[Finn McDermott]

-¿Huh?- miró fijamente a Lina tratando de entender, de identificarla. ¿Qué tenían estas máscaras que hacían que nadie le resultara familiar? Sentía que se estaba volviendo loco, y supuso que la gracia sería que eso le diera miedo. De eso trataba Halloween, ¿cierto? Pero solamente lo confundía no poder seguir el hilo de la conversación.

"¿De qué te disfrazaste?" preguntó, quizás debería haberlo sabido desde antes pero no estaba seguro de saber exactamente qué tenía puesto la chica. Parecía muy elaborado, especialmente comparado a su disfraz patético, pero no quería arriesgar que era un Dementor en modo fiesta.

[Lina Ackerman]

¿Un dementor en modo fiesta terminará vomitando felicidad si se pasa con la bebida? Ahora quiero ver un episodio del National Geographic dedicado a buscar la respuesta a esto.

El cerebro de Lina no había procesado todavía que las máscaras podían tener algo que ver en eso de que Mark se viese raro. Porque estaba segura de que aquél chico era Mark. ¿La altura, cabello, voz y al parecer la casa de Hogwarts no coincidían con los de Mark? Esos eran los detalles que se le estaban escapando de la mente gracias a la máscara. Pero, así como hay personas fáciles de hipnotizar, por lo visto hay personas que se adaptan mejor a los hechizos de percepción.
Y Lina parecería ser una de ellas, porque cuando vio que el calzado de 'Mark' era chato, lo único que atinó a pensardecir fue: "¡Estás más alto!"
Cuando subió la mirada de nuevo, se sonrió un poco (no que se fuera a notar demasiado entre el maquillaje y la máscara). Extendió sus alas y luego las cerró, tratando de taparse entera y formar un capullo.
"¿No se nota? Verde afuera, azul brillante adentro..."

[Finn McDermott]

Solamente sonrió cuando Lina dijo que estaba más alto, porque a esa altura (heh) sentía que estaba nadando contra la corriente. Como si mientras más cosas le preguntara, menos respuestas iba a obtener. Lo mejor era no luchar, dejarse llevar, nada podía salir mal en Hogwarts.

"Hay muchas cosas que son verdes por fuera y azul brillantes por dentro, pero ahora no recuerdo ni siquiera una" dijo, tratando de no frustrarse con la sopa mental que tenía en la cabeza. Por más que no quería pensar en ello, su cerebro le recordaba que no sabía con quién estaba hablando a cada rato. "Si me dices te debo una" le aseguró. Y que luego le fuera a cobrar al tal Mark.

[Lina Ackerman]

Nada sale mal nunca en Hogwarts, obvio. El colegio tiene el staff más coherente del universo, todos y cada uno de ellos enfocados a evitar que los alumnos estiren la pata con los mil y un peligros del lugar antes del final de curso.

"¡Me disfracé de Swooping Evil!" le dijo, emocionada. Mark va a tener que pagarle un helado pronto, ya abrimos la cuenta a su nombre.
-¿Estoy gritando mucho?- pensó. Tendría que controlar un poco la emoción que sentía por esa festividad (y por su disfraz, que la llenaba de orgullo), porque la van a terminar atando en un rincón para que baje las revoluciones.

"¿No te alcanzaba la sábana para la cabeza o te quedaba incómodo?" preguntó. Para ella eso era un fantasma raro.

[Finn McDermott]

Creo que ni en zona oeste conozco de alguna escuela donde habrían de dejar que quede el fantasma de una piba muerta en los baños, no entiendo cómo es que no hay una materia en Hogwarts que sea onda Introducción a la Macumba. Pero supongo que eso es una especialidad de Castelo Bruxo...

"Swooping Evil" repitió impresionado por el disfraz de Lina, que ahora parecía tener todo el sentido del mundo. Se sentía tan cómodo hablando con ella ahora que tenía la máscara que parecía no importarle tanto no entender del todo lo que estaban hablando. "¿Por qué me pondría la sábana en la cabeza? ¿De qué piensas que estoy disfrazado?" estiró los brazos hacia los lados como había hecho ella momentos atrás. No funcionaba igual que con Lina para mostrar bien el disfraz, más adecuado hubiera sido hacer una pose de guerrero o sacrificarle algo a Egeria para poder entenderse mutuamente.

[Lina Ackerman]

Al menos deberían habilitar la carrera de 'Terapia para fantasmas', como para tener una rama más para estudiar cuando salgan de Hogwarts. Y que las pasantías sean en Hogwarts el primer año, así al menos Myrtle no se le mete en los baños a los chicos.

Asintió un par de veces, haciendo que se le tapara el rostro con la capucha. Mientras se la colocaba un poco hacia atrás de nuevo, lo miró de arriba a abajo de nuevo.
"¿No es de fantasma? Fantasma a la moda" bromeó, señalando el cinturón mientras sonreía.

¿Y por qué el sacrificio a Egeria? ¿Tiene descuento o da goodies después de los tratos? La re veo a Lina con un sticker de 'Yo hice tratos con Egeria' en el baúl.

[Finn McDermott]

Yo no sé cómo es que Ashley no se hizo millonario todavía con toda la cantidad de gente que necesita ayuda psiquiátrica en el mundo mágico. No le deben dar las horas, pobre, no sé si me animaría a meterle fantasmas también en la agenda. Tiene que salir a hacerle promoción a la carrera.

Se rió brevemente con el comentario de Lina, quizás era menos avergonzante decir que sí estaba de fantasma. Qué bueno que no estaba totalmente consciente de la situación en esa fiesta, o le daría más vergüenza todavía.

"¿Sabes qué? Sí, estoy de fantasma a la moda" le confirmó con una sonrisa. Total bien podría ser un romano muerto, hecho fantasma, todo encajaba. Qué pena usar el cerebro que Rowena Ravenclaw le dió para justificar sin mentir un disfraz. Egeria bien nos podría curar de esta neblina mental, o podría darnos una cachetada para que se los caigan las máscaras: cualquiera de los dos métodos sirve.

[Lina Ackerman]

Esperemos que Ashley esté trabajando con una pasante muy atenta llamada Agatha. Como para que ambos tengan alguien con quien compartir unos buenos vasos del whisky de fuego más potente del mercado al final de cada día.

"¡Qué buen disfraz!" comentó, estirando una mano para tocarle la tela del hombro y chequear que fuese tela normal y no algo más alucinante todavía que un fantasma con cinto. "Eres más original que los que vinieron solo de fantasma" agregó, sonriéndole.