Beyond Hogwarts RPG - Foro de rol Play-By-Post ambientado en el mundo de Harry Potter
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Basta de palidas
- Gretchen Crowley
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Oh, malo, Mason... ¡Muy malo! Ahora Gretchen también lleva los colores de la fiesta en las mejillas.
"Oh pero es mi color no me lo cambié", le respondió sin respirar. Hizo entrar aire a sus pulmones a la fuerza y lo soltó con un: "Mi familia es pelirroja" que sonaba a disculpa.
Por suerte para ella, quizás Mason no había escuchado gran cosa, porque parecía haber descubierto lo que (seamos sinceros) ella quería encontrar.
"Oh pero es mi color no me lo cambié", le respondió sin respirar. Hizo entrar aire a sus pulmones a la fuerza y lo soltó con un: "Mi familia es pelirroja" que sonaba a disculpa.
Por suerte para ella, quizás Mason no había escuchado gran cosa, porque parecía haber descubierto lo que (seamos sinceros) ella quería encontrar.

- Mason Storstrand
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Le sonrió, acordándose de que Gretchen le había dicho que su familia siempre iba a comer a un restaurant, o algo así. Y que eso la hacía feliz. Asumió que era cierto, pero desde que se había enterado que ella había estado bajo los efectos de una poción se había preguntado si todo había sido un efecto secundario.
"¿Todos todos?" preguntó, dejando de mirarla para enfocarse otra vez en los que estaba sobre las mesas. Se le hacía agua la boca, pero por suerte estaba bien entrenado en el arte de comer y escuchar.
"¿Todos todos?" preguntó, dejando de mirarla para enfocarse otra vez en los que estaba sobre las mesas. Se le hacía agua la boca, pero por suerte estaba bien entrenado en el arte de comer y escuchar.

- Gretchen Crowley
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Asintió con la cabeza. "Casi todos los que yo conozco, al menos. En la familia de mi papá tengo tíos y primos de cabello oscuro, pero mi papá es casi tan pelirrojo como mi mamá".
Ella miró hacia la mesa y dudó. ¿Debían comer ahora, después? No tenía idea de cómo era el itinerario correcto para una fiesta, así que mantuvo la idea de que en ese momento iban a beber algo nada más. El duende gordo que vivía en su estómago debería esperar un poco más.
Ella miró hacia la mesa y dudó. ¿Debían comer ahora, después? No tenía idea de cómo era el itinerario correcto para una fiesta, así que mantuvo la idea de que en ese momento iban a beber algo nada más. El duende gordo que vivía en su estómago debería esperar un poco más.
Última edición por Gretchen Crowley el 04 Jun 2014 13:14, editado 1 vez en total.

- Mason Storstrand
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Mason agarró una jarra con un líquido rosa oscuro con una mano, y dos vasos con la otra. Sí, obviamente lucía como un idiota si es que pensaba servirse, pero no: su plan era llevarse la jarra con los vasos e ir a una mesa con Gretchen a charlar. No iba a estar yendo y viniendo, o quedarse dándole vueltas a la mesa.
"¿Esto te parece bien?" preguntó, enseñándole la jarra. "Un color bien Crowley" agregó con una sonrisa, para demostrarle que sí la estaba escuchando.
"¿Esto te parece bien?" preguntó, enseñándole la jarra. "Un color bien Crowley" agregó con una sonrisa, para demostrarle que sí la estaba escuchando.

- Gretchen Crowley
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Asintió, sonriendo con más tranquilidad que momentos antes. Estaba impresionada de sí misma (por no haber colapsado con un ataque de nervios apenas entraron) y de lo fácil que era hablar con Mason hasta el momento. Si la velada seguía así, Gretchen sentiría como si hubiese aprobado otra materia más, tipo Relaciones Públicas.
"¿Se pueden llevar las jarras?" preguntó, con algo de temor a que los levanten en peso.
Porque si los sermoneaban en público para ella sería como volver diez casilleros y encerrarse dentro de sí misma nuevamente (y en su habitación, además).
"¿Se pueden llevar las jarras?" preguntó, con algo de temor a que los levanten en peso.
Porque si los sermoneaban en público para ella sería como volver diez casilleros y encerrarse dentro de sí misma nuevamente (y en su habitación, además).

- Mason Storstrand
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"Um..." miró alrededor, para fijarse qué estaban haciendo los demás. Pero hagamos memoria, ¿qué nos decían nuestros padres? 'Si Juancito se tira de un puente, ¿vos también te vas a tirar?'. Había que ser jóvenes rebeldes e independientes, Gretchen.
"Yo creo que sí, ¿por qué no? Tampoco es que no la vamos a devolver" le dijo alzando las cejas, tratando de convencerla. Buscó con la mirada otras jarras, como para asegurarse de que no estaban quitándole la única bebida al alumnado.
"Yo creo que sí, ¿por qué no? Tampoco es que no la vamos a devolver" le dijo alzando las cejas, tratando de convencerla. Buscó con la mirada otras jarras, como para asegurarse de que no estaban quitándole la única bebida al alumnado.

- Gretchen Crowley
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"Tienes razón" respondió, sintiéndose ridícula. Ella no sabía nada de fiestas, pero Mason era más grande que ella y seguramente había ido a muchas. ¿Por qué opinaba de cosas que no sabía? Iba a tener que hacer un esfuerzo por mantener la boca cerrada y dejar de hacer preguntas de niñita.
Miró hacia las mesas, buscando a sus amigas. Si llegaba a ver la mano de una de ellas saludándola, no dudes que pondrá alguna excusa para ir corriendo a abrazarla. De los nervios, no porque la esté pasando mal.
Notó un par de mesas como para dos y varias más para cuatro libres, pero momentos atrás había decidido dejarse llevar por el experto (literalmente, en este caso), así que volvió la mirada hacia él sin opinar sobre su futura ubicación.
Miró hacia las mesas, buscando a sus amigas. Si llegaba a ver la mano de una de ellas saludándola, no dudes que pondrá alguna excusa para ir corriendo a abrazarla. De los nervios, no porque la esté pasando mal.
Notó un par de mesas como para dos y varias más para cuatro libres, pero momentos atrás había decidido dejarse llevar por el experto (literalmente, en este caso), así que volvió la mirada hacia él sin opinar sobre su futura ubicación.

- Mason Storstrand
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Le sonrió animadamente cuando ella le dió la razón, sin saber que en el proceso la había hecho sentir mal. De haberlo sabido ya se estaría disculpando y dejando la jarra donde estaba.
"¿Quieres agarrar algo para comer?" preguntó, todavía paseando la mirada sobre la mesa sin saber qué más agarrar. Y pobre Gretchen, pensando que Mason era un experto solamente porque estaba en sexto... creo que iban a aprender mucho en este baile.
"¿Quieres agarrar algo para comer?" preguntó, todavía paseando la mirada sobre la mesa sin saber qué más agarrar. Y pobre Gretchen, pensando que Mason era un experto solamente porque estaba en sexto... creo que iban a aprender mucho en este baile.

- Gretchen Crowley
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Ella se moría si él le pedía disculpas, sobre todo si era porque ella estaba hablando antes de pensar.
Le devolvió una sonrisa breve y luego se puso algo seria, casi como cuando buscaba libros en la Biblioteca. "Y... ¿qué llevo? ¿Algo de esto te gusta?" preguntó, señalando algo que parecían alas de pollo con algo encima y luego un pollo gigante con relleno. Si él llevaba la bebida, ella tendría que llevar comida para ambos, pero no quería elegirle la cena sin conocer cuáles eran sus gustos.
Un poco más lejos en la mesa había algunas ensaladas y algo que parecía carne de vaca. La idea era probar toda la comida típica de los Salem, ¿no?
Le devolvió una sonrisa breve y luego se puso algo seria, casi como cuando buscaba libros en la Biblioteca. "Y... ¿qué llevo? ¿Algo de esto te gusta?" preguntó, señalando algo que parecían alas de pollo con algo encima y luego un pollo gigante con relleno. Si él llevaba la bebida, ella tendría que llevar comida para ambos, pero no quería elegirle la cena sin conocer cuáles eran sus gustos.
Un poco más lejos en la mesa había algunas ensaladas y algo que parecía carne de vaca. La idea era probar toda la comida típica de los Salem, ¿no?

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Miró la mesa y paseó la vista por los platos, sin saber qué elegir. ¿Sería muy descortés decir que le daba igual? Todo lucía bien, pero nada le parecía particularmente interesante, más que nada porque no reconocía ninguno de esos platos y a veces la apariencia engañaba.
"¿Tú qué vas a querer?" preguntó, quizás Gretchen tenía una idea más clara de qué era cada cosa y le podía recomendar algo. Si no siempre sería más fácil llevar dos porciones de lo mismo... aunque si llevaban dos cosas distintas podrían probar el doble de cosas. ¡Tomar decisiones era horrible!
"¿Tú qué vas a querer?" preguntó, quizás Gretchen tenía una idea más clara de qué era cada cosa y le podía recomendar algo. Si no siempre sería más fácil llevar dos porciones de lo mismo... aunque si llevaban dos cosas distintas podrían probar el doble de cosas. ¡Tomar decisiones era horrible!

- Gretchen Crowley
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La decisión que tomó ella no fue tan difícil: descartó las alas de pollo y la carne de vaca por ser dificultosas para comer (no quería salpicarlo con salsas que quizás le dejaban la ropa manchada), y descartó las ensaladas porque no tenía forma de chequear si le había quedado algo verde entre los dientes sin un espejo y en el medio de una reunión social. Y se moriría de vergüenza si pasaba cualquiera de esas cosas.
Así que señaló el pavo relleno, que parecía seco, sabroso y lo suficientemente blanco como para no correr tanto peligro de decoraciones en la dentadura. Obvio que tendría que comer con cuidado, porque en el relleno había más cosas de colores, pero ante la duda podía dejar eso a un lado con alguna excusa.
"El pollo parece rico" comentó, mirando a Mason en busca de su aprobación. Nunca comió pavo, así que ni se imagina que es eso lo que acaba de señalar.
Así que señaló el pavo relleno, que parecía seco, sabroso y lo suficientemente blanco como para no correr tanto peligro de decoraciones en la dentadura. Obvio que tendría que comer con cuidado, porque en el relleno había más cosas de colores, pero ante la duda podía dejar eso a un lado con alguna excusa.
"El pollo parece rico" comentó, mirando a Mason en busca de su aprobación. Nunca comió pavo, así que ni se imagina que es eso lo que acaba de señalar.

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Asintió, aprobando el comentario de Gretchen. Sonrió, casi tentado de reírse, porque se acababa de dar cuenta de algo. Igual no te preocupes, porque no es que se va a guardar el comentario para sí.
"Quiero comer todo" le dijo con una breve risa, como si de verdad fuera gracioso. "Me traería una silla acá y me sentaría a probar todo" confesó, sin dejar de mirar la comida, todo risueño como si estuviera contando algo graciosísimo. Es que cuando uno se enamora de la comida, es difícl dejar de sonreír.
"Quiero comer todo" le dijo con una breve risa, como si de verdad fuera gracioso. "Me traería una silla acá y me sentaría a probar todo" confesó, sin dejar de mirar la comida, todo risueño como si estuviera contando algo graciosísimo. Es que cuando uno se enamora de la comida, es difícl dejar de sonreír.

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Gretchen se rió, sorprendida por su comentario. Si le faltaba algo más para que le gustara Mason (sin necesidad de pociones), era eso: que él amase la comida como ella.
Habría que ver si él era de los que comen lo que quieren pero a sus mujeres les dan ensaladita... Pero por ahora ella y yo ignoramos eso, así que somos felices.
De todas formas, por más tentadora que fuese la idea de él, Gretchen jamás se sentaría directamente en las mesas de la comida. Eso sería suicidio social, y hasta ella lo sabía.
"Podemos llevar un poco de cada cosa a una mesa" propuso, tratando de no sonreír en exceso.
Habría que ver si él era de los que comen lo que quieren pero a sus mujeres les dan ensaladita... Pero por ahora ella y yo ignoramos eso, así que somos felices.
De todas formas, por más tentadora que fuese la idea de él, Gretchen jamás se sentaría directamente en las mesas de la comida. Eso sería suicidio social, y hasta ella lo sabía.
"Podemos llevar un poco de cada cosa a una mesa" propuso, tratando de no sonreír en exceso.

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A Mason seguro que le encanta la ensaladita, así que probablemente vaya a comerla (heh) con Gretchen entre plato y plato, porque ya sabemos cómo va el milenario dicho. A veces me pregunto qué habrá pasado el día que creé este personaje, con gustos gastronómicos tan distintos a los míos que hasta me da impresión hacerlo comer verdura.
"Suena genial, porfa, sí" dijo un poco más entusiasmado de lo que debería, porque ni que no le dieran de comer en su casa Hogwarts. Y claro que captó que estaba siendo medio goma, porque agregó un "Perdón si te estoy obligando a pasar demasiado tiempo buscando comida" le dijo, con una sonrisa exagerada, de esas que buscan comprarse el perdón de la persona a la cuál uno las dirige.
"Suena genial, porfa, sí" dijo un poco más entusiasmado de lo que debería, porque ni que no le dieran de comer en su casa Hogwarts. Y claro que captó que estaba siendo medio goma, porque agregó un "Perdón si te estoy obligando a pasar demasiado tiempo buscando comida" le dijo, con una sonrisa exagerada, de esas que buscan comprarse el perdón de la persona a la cuál uno las dirige.

- Gretchen Crowley
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No, para nada nadie vive de ensalada. Bah, al menos en la casa de Gretchen. A ellos déjenlos con su consumo apenas elevado de lo normal de harinas y carnes, como para mantener a toda la familia redondita y feliz.
"No hay problema" le dijo con una sonrisa un poco más ancha que todas las que venía mostrando hasta ahora de los nervios. Tener a alguien sin prejuicios con la comida cerca la relajaba un poco. Hasta que se acordaba de la Amortentia, claro, y volvía a ponerse tensa.
Tomó un plato de los grandes (había visto dos tamaños, al menos. Los más pequeños quizás para los postres) y comenzó a servir: dos rodajas de pollo gigante pavo (ok, o de 'el pollo diablo'), dos alitas de pollo con salsa, dos pedazos de carne con salsa y, buscando, encontró además unos palitos que parecían sabrosos.
Lo miró un momento para saber si tenía que seguir sirviendo o si ya estaba bien: "¿Ensaladas pongo?" -Que diga que no, que diga que no-.
Sí, es la típica niña que no comió 'cosas verdes' durante toda la infancia. Recién ahora se está amigando con los vegetales.
"No hay problema" le dijo con una sonrisa un poco más ancha que todas las que venía mostrando hasta ahora de los nervios. Tener a alguien sin prejuicios con la comida cerca la relajaba un poco. Hasta que se acordaba de la Amortentia, claro, y volvía a ponerse tensa.
Tomó un plato de los grandes (había visto dos tamaños, al menos. Los más pequeños quizás para los postres) y comenzó a servir: dos rodajas de pollo gigante pavo (ok, o de 'el pollo diablo'), dos alitas de pollo con salsa, dos pedazos de carne con salsa y, buscando, encontró además unos palitos que parecían sabrosos.
Lo miró un momento para saber si tenía que seguir sirviendo o si ya estaba bien: "¿Ensaladas pongo?" -Que diga que no, que diga que no-.
Sí, es la típica niña que no comió 'cosas verdes' durante toda la infancia. Recién ahora se está amigando con los vegetales.
