Truco de seis

[Audrey Campbell]

((Disculpen, disculpen, disculpen, disculpen, disculpen! Cinco veces para que me perdonen todos. El título es en referencia al Truco. Se aceptan propuestas de títulos más interesantes XD - Este es el orden que me pasaron))

Audrey estaba muy nerviosa por el baile. A medida que Bertie iba subiendo en popularidad en el colegio, Addy iba ganando inseguridades. En la velada que les esperaba, ella estaba segura de que la iban a mirar de arriba a abajo en más de una ocasión. Mujeres, seguramente, pensando en lo desproporcionada que se veía la pareja. En lo petisa, gordita y poco sociable que era ella en comparación de su novio. Sabía que iba a tener que controlar sus celos de forma total si no quería que tengan peores opiniones de ella, y también sabía el esfuerzo que eso le llevaría.
La esperaba una velada genial, en pocas palabras. ¡Y ella era la que lo había invitado! Debería haber sacado su carta de 'me duele la pancita' y obligarlo a quedarse con ella tranquilos en la Sala Común.
Pero no, allí estaban, en el Gran Salón y dirigiéndose hacia una de las mesas libres más grandes, porque Bertie había propuesto ir con sus amigos y sus parejas y ella había aceptado de buena gana. Al menos los chicos le caían la mayoría del tiempo bien.

((No roleé desde la Sala Común porque quizás era alargar mucho algo en lo que ya estamos tarde xD Bah... ¿siguen con ganas de rolear esto? Puedo eliminar el thread si consideran que está muy viejo xP))

[Audrey Campbell]

Bertie podría tener todo heredado, pero eso era mucho mejor que andar comprando vestidos de segunda mano, como había hecho ella. Ella no tenía familiares que le heredasen nada. Era difícil encontrar primas más grandes que te dieran su ropa vieja si no sabías ni siquiera si tenías primas.
Y por eso guardó bien asegurado en su pecho cada uno de los cumplidos de su novio. Ojo, Bertie, quizás ella necesita que sigas así toda la noche. Vé preparándote unos tragos para no quedarte sin voz, que su autoestima está frágil hoy.

Cuando Audrey vio llegar a las novias-citas de los amigos de Bertie, se sintió terriblemente mal por el vestido que llevaba. Ellas se veían elegantes (y delgadas) y ella parecía un tapón rojo de patas blancas y anchas (...y gordas). Pero a su novio le gustaba su vestido, ¿no? ¿O sería una exageración lo que él le decía?
Le sonrió a Bertie por sus comentarios, aunque ella jamás entendería cómo había gente con amistades en las que se decían cosas feas y era gracioso. Claro, ella aún no tenía ese tipo de amigas confianzudas. Un detallito.
Cuando su novio se paró para saludar a sus amigos, ella buscó la mirada de Aida y Mila, para saludarlas desde su asiento. Tenía miedo. Iguales cantidades de miedo de pasarla bien como de miedo de pasarla mal. A ella le eran cómodos los términos medios de las cosas, y además prefería lidiar con situaciones conocidas, pero le iba a dedicar toda su energía a pasarlo genial y hacer que su novio también se divierta.
Hasta sabe que eventualmente tendrá que bailar, y que lo hará.