No leyó la carta hasta regresar del trabajo y tuvo que escuchar historias de sus vecinos sobre una lechuza merodeando de día el edificio que le hicieron sudar las manos y aterrorizarse, lo que menos quería era recibir inspecciones sorpresa de parte del Ministerio. Decidió que al día siguiente llegaría más temprano al trabajo y enviaría la carta desde allí, por eso colocó la fecha del día siguiente en su pergamino.
En vista que Frankie había escrito mucho en respuesta a sus tristes tres líneas decidió hacer un esfuerzo:
21 de enero de 1992
Frankie:
Me alegra saber que estás mejorando. Te envió algo para las cicatrices, aún no está patentado así que es una muestra secreta.
Ese día solo había salido a correr, lamento haber tardado y que te tuvieras que ir, supongo que tenías tus razones. Yo también espero verte pronto. Ya sabes cuales son mis intenciones y me gustaría que pudiéramos-------
Arrugó el pergamino, prefiriendo no ser tan insistente con sus sentimientos, ya le había dicho que podía esperar. Sin embargo, no quería solo repetir lo que había sucedido la otra noche, quería mucho más que eso y al no saber como expresarlo optó por no mencionarlo en la carta.
21 de enero de 1992.
Frankie:
Me alegra saber que estás mejorando. Te envió algo para las cicatrices, aún no está patentado así que es una muestra secreta.
Ese día solo había salido a correr, lamento haber tardado y que te tuvieras que ir, supongo que tenías tus razones.
No puedo dejar nada por escrito respecto a la poción, es una investigación en desarrollo, espero sepas entender. Si quieres hablar sobre eso podemos hacerlo en persona.
Espero con ansias reunirnos pronto,
Tristan.
En la mañana transformó la lechuza en un peluche y así pudo llevarla de vuelta a su lugar original. Encantó el sobre antes de enviarlo para poder enviar un frasquito con crema cicatrizante junto al papel.