Primero de noviembre

[Joss Brackenbury]

Ver lo que hizo con los labios la dejó muy poco convencida de que no eliminar todo tipo de contacto físico fuera el mejor plan de acción, pero tampoco era como si ella tuviera lo que se necesitaba para impedir que tomara su mano. Lo que sí hizo fue bajar el otro brazo y dar un paso en reversa. “¿No crees que sería mejor idea que tú te quedes en un extremo del aula y yo en el otro?” preguntó. Sonaba a broma, pero había un porcentaje importante de una propuesta real ahí.

[Dion Thornhill]

Qué lástima que ninguno de los dos era Prefecto, porque la idea de sumergirse en un baño de agua helada sonaba bastante bien. Se sentía un poco culpable de ser el responsable de que tuvieran que tomar un break, quizás por no tener el control suficiente o por estar arruinando ese primer encuentro con esas reacciones que realmente no podía controlar.
"¿De ahora en más, dices?" bromeó, como si fueran a levantarse a la madrugada solamente para mirarse a la distancia. Ya bastante de eso hacía Dion durante el día, en horarios más normales. Acercó la mano de Joss a su boca para besarle los nudillos y luego la soltó suavemente.

[Joss Brackenbury]

¿Juntos?
“Me gusta mucho cuando haces eso” comentó. Ya sabes, sin pensar que tal vez debería guardarse ese dato. Porque hoy también me siento generosa y te voy a contar lo que no te respondí el otro día, dado que me lo recordaste: Joss sabía que para ella todo había cambiado ese día en la biblioteca cuando Dion le había apenas rozado los nudillos con la nariz y le había dicho algo en voz baja. Había sido un gesto tan simple, ni siquiera un beso, pero su corazón había reaccionado de tal forma que no era posible pensar que él y todo lo que él podía hacer le era indiferente.
Repondiendo a la pregunta: “Los próximos cinco minutos, yo diría”.

[Dion Thornhill]

Bañarse juntos no solucionaría el problema, pero no sé si Dion o yo tendríamos la entereza para negarnos.
Estaba más que bien que Joss le comunicara lo que le gustaba. A Dion le interesaba saber, porque hacía las cosas con esa intención y nunca estaba de más recibir confirmación verbal de que estaba haciendo algo bien. "Cinco minutos es un montón de tiempo" se quejó con media sonrisa, caminando hacia el pupitre más cercano y sentándose.

[Joss Brackenbury]

Tsk.
"¿Dos minutos?" sugirió, demasiado débil para sugerir tres y suficientemente fuerte para no decir uno. Al mismo tiempo ella se fue al pupitre más alejado, en la misma fila. No le encantaba esta situación, porque también pensaba que no se habían metido en esta aula en desuso a esa hora para hacer lo mismo que podían hacer el resto del día, pero tenía que aceptar que era un poquito necesario tomar un tiempo fuera.

[Dion Thornhill]

"Dos minutos" aceptó, aunque sabía perfectamente que en dos minutos no solucionaría nada a largo plazo. A menos que hiciera un esfuerzo fenomenal en esos dos minutos para llenar su mente de imágenes poco atractivas, pero era difícil cuando todavía podía sentir la presencia de Joss en su piel.
Dion apoyó los codos sobre el pupitre y se sostuvo la cabeza con las manos. "Lo siento" soltó.

[Joss Brackenbury]

Con toda sinceridad, no sé si hay una solución real a largo plazo para su problema. La única forma real de que Joss no levantara nada si se dedicaban a esta actividad recreativa sería que nada de Dion respondiera a los estímulos, y eso significaría que ya no había problema y estaban perdiendo el tiempo, harían mejor yéndose a dormir.
Había comenzado a enfocarse en su respiración, pero perdió el ritmo cuando lo escuchó disculparse. "¿Por qué?" preguntó, con un dejo de temor. 'Lo siento' no era la frase que uno más quería escuchar después de una breve sesión de faje.

[Dion Thornhill]

Inhaló profundamente por la nariz y exhaló lentamente por la boca. "Perdón porque esto no es muy romántico" por eso se disculpaba, porque no era muy romántico que tuvieran que detenerse tan pronto, con todas las ganas que le tenía a Joss. Sentía mucha responsabilidad por su falta de control, no podía evitarlo, al igual que lo que pasaba en el sur.

[Joss Brackenbury]

Colocó su codo izquierdo en la mesa y luego posó su barbilla ahí, mirando en la dirección general de Dion. "Yo creo que tener que sentarme a varios metros de ti para que no nos expulsen del colegio es sumamente romántico" discutió. Y otra vez lo hizo sonar como broma aunque hablaba muy en serio.
Era verdad que ella sabía a qué habían ido esa madrugada a ese lugar, pero todo lo que ocurriera tendrían que irlo procesando y resolviendo conforme sucediera, porque no tenían experiencia uno con el otro y, al menos ella, tampoco tenía puntos de referencia.

[Dion Thornhill]

Dion eligió tomárselo como una amable broma de Joss, pensando que ella estaba diciendo eso para no herir sus sentimientos. ¿No podía siquiera tener una sesión de besuqueo sin tener que andar convirtiendo sus pantalones en una tienda de campaña de medio tiempo? Se sentía culpable y un poco patético. Pero que Joss no lo estuviera haciendo sentir mal, que fuera tan comprensiva, era muy agradable. No solamente le gustaba porque era hermosa, le gustaba la persona que era y cómo lo hacía sentir con sus palabras y acciones. Nunca antes se había sentido así, nunca había sentido algo así por alguien. Era recomfortante incluso en esa situación donde no estaba particularmente encantado con sí mismo.
"Gracias" dijo, porque no se le ocurría otra cosa, un poquito abrumado por lo que sentía.

[Joss Brackenbury]

No supo qué responder a ese 'gracias' porque ella no consideraba que hubiera hecho algo para ganárselo.
"¡Ah!" exclamó de repente; acababa de recordar algo. "Hablando de cosas románticas, sigo teniendo ese cupón de descuento en Madam Puddifoot's" que era el lugar favorito de Dion en Hogsmeade, ¿no? Aunque Joss desconociera o no comprendiera sus motivos, tampoco le causaba problema. "¿Está mal si te invito yo en lugar de esperar a que me invites tú?" preguntó. Y la duda era 100% real. No sabía cómo se suponía que funcionara... esto.

[Dion Thornhill]

Dion soltó una breve risa, porque la pregunta de Joss le causó gracia y un poco de ternura. ¡Lo estaba invitando a salir! Su corazón dio un vuelco como si estuviera practicando para un torneo de trucos en patineta.
"Claro que no está mal, está súper bien" respondió, entusiasmado. Giró la cabeza hacia donde estaba Joss, sonriente. "Me encantaría ir contigo a Madam Puddifoot's" respondió, y honestamente sí sumaba bastante que tuvieran un cupón de descuento. No tenía mucho dinero y lo que tenía estaba destinado a otro proyecto que tenía con Joss.

[Joss Brackenbury]

Sonrió también, sonrojándose porque era su primera vez invitando a alguien a salir y lo había hecho sin pensarlo mucho; quizá pudo haber realizado un mejor trabajo, pero ya era un poco tarde. "Genial" contestó, bajando el volumen de su voz. Y gracias, Hogwarts, por el 40% de descuento.
¿Ya habían pasado dos minutos? Seguramente sí.

[Dion Thornhill]

Cualquier forma en la que terminaran haciendo planes a futuro era un excelente trabajo, Joss lo había hecho muy bien y había superado las expectativas.
Dion intentó dejar de sonreír, apretando un poco los labios. Dejó de sostener su cabeza con las manos y se enderezó en el pupitre, dejando que su espalda chocara contra el respaldo de la silla. Se pasó una mano por la frente y se aplastó un poco el cabello (que seguía sintiéndose raro por el producto para mantener sus ondas controladas como anoche). Pensó que seguramente lucía como un desquiciado, pero si Joss estaba interesada igual no iba a quejarse.

[Joss Brackenbury]

Joss estaba interesada. Mucho.
Se levantó de su pupitre y comenzó a acercarse despacio, manos en la espalda, como si esperara que Dion le avisara que en realidad iba a necesitar otro minuto, o que quizá lo mejor era que sí mantuvieran cierta distancia de ahora en más. Su plan era ubicarse frente a él, con la mesa (más sólida que cualquier pergamino enrollado) entre ambos.