Lluvia

[Narcissa Black]

Contrario a lo que muchos supondrían, Narcissa Black disfrutaba ir a la lechucería. No que fuera fanática de los animales emplumados, pero... ¡vamos! Con los años que llevaba siendo estudiante en Hogwarts, ya sabía a lo que se atenía. Su drama por la suciedad del lugar había sido superado (con dificultades, pero a fin de cuentas superado) en su primer año, y no era como para que se pusiera paranóica por la posibilidad en un millón de que un ave hiciera alguna graciosada encima de ella. Además, la soledad del lugar le agradaba, casi tanto como el intercambio de correspondencia con su familia. En aquella ocasión, la carta que había llevado (y ya enviado), enrollada en un pergamino perfecto, estaba dirigida a su madre. Traía una fina capa morada de seda cuya capucha estaba puesta sobre su cabeza.

El detalle de esa visita radicaba en que, momentos antes de salir, su temor por que el color gris del cielo tuviera consecuencias se hizo realidad: comenzó a llover.

No muy fuerte, pero, digamos, lo suficiente como para que no le apeteciera salir tan pronto. Estaba consciente de los hechizos que existían para secarse en fa, pero si algo detestaba era la sensación de la ropa húmeda sobre sí. Y como era sábado y no tenía clases por delante, ni tarea alguna que resolver (toda la había terminado el viernes por la noche, tan nerd que era), optó por seguir topando suavemente con los dedos la frente de una lechuza ridículamente mansa. Murmuraba con la boca cerrada una canción sin ritmo alguno y que demostraba su pobre talento para lo musical... le preocupaba menos que nada que alguien la escuchara: estaba completamente sola y sólo a un loco se le ocurriría salir del castillo para ir a la torre de la lechucería bajo una lluvia como esa.


((Reservado para Rabastan. (: Disculpa la tardanza y el planteamiento del thread. Si te parece muy loco que él saliera con esa lluvia, puedo editar y poner que la lluvia viene después. *está encaprichada con un thread con ese clima*))

[Rabastan Lestrange]

((Está todo perfecto, muchas gracias por abrir el thread))

La locura era inherente de Rabastan, a pesar de la apariencia ligeramente más prolija y aseada que demostraba desde las vacaciones de invierno. Mientras más limpio por fuera, peor estaba poniéndose por dentro.

La lluvia lo encontró cuando pasaba frente a las escaleras que daban a la Lechucería, y como a lo lejos no veía rastros de Rebecca (a quien buscaba desesperadamente, sospechando que quizás estuviera revolcándose con alguien por ahí) decidió ir a revisar la lechucería mientras se empapaba lentamente. No le importaba, seguramente eso le daría un efecto más dramático a su entrada si sus sospechas eran verdaderas.

Terminó de subir los escalones y se pasó una mano por la cara, desde el mentón hasta pasársela por la cabeza acabando en la nuca, tratando de secarse, dando los pasos que faltaban para estar cobijado por el techo de la torre.

[Narcissa Black]

((:) ))

Quien primero se dio cuenta de la presencia de Rabastan fue la lechuza a la que Narcissa acariciaba, lo cual, naturalmente (con el aletero que de repente dio el animal), provocó que ella también se enterara de un cambio en el ambiente: ante el ruido, instintivamente volteó hacia su izquierda "...". Rabastan pudo haberle visto el perfil en ese momento, si se fijaba. Luego de unos segundos de inmovilidad (por aquella tensión que te da por no-sé-qué), golpeadamente giró el cuerpo hacia él para encararlo por completo.

[Rabastan Lestrange]

Olvidó momentáneamente por qué estaba allí: no estaba seguro si era porque buscaba cobijo de la lluvia o porque había estado procurando a alguien en particular.
Alzó la cabeza lentamente, perdiéndose el perfil de Narcissa en esa primera reacción y esperó en silencio los segundos que le tomó a ella girarse por completo para enfrentarlo. Una agradable casualidad "Narcissa Black" la llamó, como saludo, asintiendo suavemente con la cabeza para volver a mirarla. Era raro ahora que la situación había cambiado tan drásticamente: por un lado había aceptado que ella le pertenecía a otro (a Lucius, en este caso, según le había asegurado Bellatrix) y ahora él tenía su propia pertenencia. ¿Por qué, sin embargo, aún mantenía un ligero interés?

[Narcissa Black]

Que no se tomara mal, por favor, si Narcissa tuvo el reflejo de dar un paso en reversa luego de verlo. Su expresión de alarmada, desde luego, se relajó al identificarlo como -Lestrange-, pero luego la retomó, resaltando los ojos. ¡Qué mojado estaba! No se fijó en que al quedarse viéndolo de pies a cabeza había dejado de parpadear, y cuando nuevamente lo hizo, se sintió muy avergonzada por su atrevimiento. Bajó rápidamente la mirada pero no pudo evitar el mirarlo de nuevo, quizá se habría sonrojado un poco, "Por las barbas de Merlín, Lestrange," dijo como si algo le molestara, "¿acaso te...?. ¿Te urgía tanto enviar algo que decidiste ignorar aquella enorme... azulidad llamada cielo?".

[Rabastan Lestrange]

-¿La asusté?- se preguntó al ver que ella daba un paso hacia atrás, asumiendo que quizás debió haber hecho una entrada más cautelosa. Pero estaba lloviendo allá afuera, y realmente no se esperaba verla a ella, de entre todas las criaturas del Señor, en la Lechucería. Desvió la mirada unos segundos a la lechuza que se había alarmado con su entrada y volvió la vista a Narcissa.
"Soy un desprecavido, no tengo excusa" dejó escapar mientras daba unos pasos hacia donde ella estaba, pisando con cuidado y volviéndose a acomodar el cabello mojado hacia atrás para que no le goteara sobre la cara.

[Narcissa Black]

Difícilmente dejaría de verlo. "¿Qué quieres decir con que no tienes excusa?" repitió de manera incrédula, ahora lucía indignada (qué formas tan peculiares tiene de expresar preocupación, ¿eh? Porque sí lo estaba, sólo que no estaba totalmente consciente de ello). "¡Por las...!" exhaló rápidamente "Lestrange". Se distrajo viéndole las manos: no tenía carta como para enviar y eso la desconcertó más. "Y no traes... nada". Regresó la mirada hacia él, esperando alguna explicación. Pero ya no lucía indignada sino verdaderamente confundida.

[Rabastan Lestrange]

Rabastan difícilmente percibiría la preocupación en Narcissa, más le sonaba a que le estaba llamando la atención por comportamiento inadecuado. Ahora intentaba preocuparse por esas cosas, con la futura fusión del apellido de ambos y el hecho de que, ya saben, se suponía que finalmente tenía alguien con quien contraer matrimonio.
"No" respondió positivamente a Narcissa, no traía ninguna carta para enviar. "Sólo subí para" ¿qué le iba a decir, para revisar que no hubiera gente teniendo relaciones entre estiércol de pájaro? "no mojarme" frunció el entrecejo, era poco creíble.

[Narcissa Black]

...También le estaba reprochando el inadecuado comportamiento. Y, en efecto, era poco creíble su justificación. Llámenla loca, pero por un momento se le ocurrió pensar que quizá Rabastan estaría buscándola específicamente a ella. Ese pensamiento la halagó de tal forma que una esquina de sus labios tembló por su impulso de sonreír que decidió omitir. "Si pescas un resfriado aquí y te desmayas por una calentura repentina, no voy a poder cargarte de regreso," comentó con suavidad. Era posible hacerlo levitar y así transportarlo en base a magia, pero... er.

((¡BRB!))

[Rabastan Lestrange]

((No problemo))

Bajó la cabeza para ocultar la sincera sonrisa de simpatía que le causó el comentario de Narcissa, toda tranquila y amable, pura delicadeza y femeneidad. Todavía la admiraba y mantenía en los más altos pedestales de respeto, probablemente ella nunca perdería ese status para él. Ahora, lo que suceda en reversa es algo que escapa mi conocimiento.
"¿Así de susceptible al agua parezco ahora?" preguntó alzando la vista, todavía no había logrado borrar la sonrisa de los labios y por ello no alzó la cabeza por completo nuevamente. No quería parecer burlón ni atrevido en la presencia de Narcissa. Tampoco es que Rabastan se quisiera dar de water resistant.

[Narcissa Black]

Apenas estaba conociéndolo, pero había un motivo por el cual incitaba ella conversación entre ambos y no sólamente contestaba educadamente a lo que le preguntaba y nada más (cosa que hacía con quien fuera cualquiera para ella: Rabastan no lo era). Fingió meditar la pregunta, hasta acomodando su boca en puchero de indecisión, luego alzando ligeramente las cejas. "Parece que te estás encogiendo un poco," señaló como supuesta consecuencia, estaba apenas cayendo en cuenta del cambio en aspecto del muchacho y, por mirarlo, tardó un poco en formular su siguiente natural pregunta, "¿Cómo has estado?".

A su parecer y gran sorpresa, Rabastan lucía bien. Muy bien.

[Rabastan Lestrange]

Apretó los labios ante el primer comentario de Narcissa a la vez que alzaba la cabeza para enfrentarla adecuadamente, tratando de suprimir (de forma retrasada pero exitosa) la sonrisa que insistía en aparecer. Ya no sonreía como entretenido por el diálogo simpático, sino más bien era una sonrisa más amable y considerada.
"Bien. Mejor, debería decir" aclaró con algo de humildad, siempre se iba a sentir menos que ella y los que llevaban su apellido. "¿Cómo estás tú, Narcissa?" lento y deliberado.

[Narcissa Black]

En efecto, Rabastan lucía mucho mejor. Pensó si no sería atrevido comentárselo. "Seca," señaló con simpleza. Porque era verdad, ¿que no le molestaba al muchacho tener el cabello goteando? "...desocupada. Esta fue una semana en la que..." suspiró, y volvió momentáneamente su atención a la lechuza para acariciarle su emplumado cuello "extrañamente, los planetas y las estrellas se alinearon para que no tuviera mi habitual tarea el fin de semana. Ayer la terminé". Era buena noticia pero no lucía muy entusiasta, más bien serenamente satisfecha.

[Rabastan Lestrange]

Para alguien que pasaba días sin tomar un baño, tener el cabello goteanod y la ropa húmeda era poca cosa. Había soportado mucho peor (¡esas terribles comezones en lugares inmencionables!) y la verdad es que hasta era una sensación a la que quería acostumbrarse. Ya haría algo al respecto, pero olvidaba su estado en estos momentos.
"Te daría la mía si te hace feliz" le dijo llevando la mirada la lechuza que ella estaba mimando. No se la imaginaba así, la verdad. Nunca se la había encontrado en la Lechucería (él no era muy adepto a mandar correspondencia) y no sabía cómo trataba con otras criaturas. La veía delicada y algo arisca con las personas, y pensó que eso se acentuaría aún más con los otros seres.

[Narcissa Black]

Antes de que Rabastan contestara, aprovechó para bajar la capucha que le cubría la cabeza. Luego de escucharlo, lo miró con ceño, pero dejando asomar una sutil sonrisa. Como siempre, se tomaba el pequeño tiempo antes de contestar. La lechuza, malacostumbrada a las caricias, alzó el pico en torno a ella en vista de que Narcissa mantuvo sus manos sobre la ropa y luego sobre el cabello, para peinárselo como fuera posible. "¿Tu tarea?".