La ciencia de la paz...

[Alastair Cunha]

Alastair miró el reloj que colgaba en la pared detrás de la figura de Minerva McGonagall (Minnie para Alastair cuando la quería, hoy no era uno de esos días) y corroboró lo que sospechaba: veinte minutos. Veinte largos e interminables minutos sentado escuchándola gritarle que no era posible, exigirle atención, preguntarle mil veces si la estaba escuchando, hacerle prometer que iba a comportarse en su clase, etcétera. No es que Alastair no la respetara, ¡al contrario! La tipa se convertía en gato, ¿qué tan cool es eso?
Y finalmente escuchó las palabras santas de 'Puede retirarse ahora, Cunha, pero espero que no vuelva a repetirse' y sonrió, mostrando todos sus dientes para asentir, chasquear la lengua mientras la señalaba con ambos dedos índices como si fueran pistolas y salir de la Oficina.

[Alastair Cunha]

((...¿Jane?))

Paseó la mirada hasta la fuente de la voz que lo llamaba y alzó una mano en saludo, trotando hacia ella. ¿La había hecho esperar? -¿Por qué?- seguro que había una razón completamente lógica para este encuentro post-clases tan bien planeado pero no lo recordaba. Tal vez la mochila con los ingredientes que había dejado tirada en la Sala Común (ni siquiera en su cuarto) fuera una de esas elusivas pistas.
"Ya sabes, Janey, lo mismo de siempre" puso los brazos en jarra y miró hacia el techo para hablar con una voz nasal "Blah blah blah, pórtese bien, blah blah blah, me gusta la comida para gatos..." -Cinco puntos menos para Hufflepuff...- pero eso no se lo iba a decir.

[Alastair Cunha]

((¡Qué bien! *tackles*))

Sonrió feliz cuando ella se rió, hubiera estado bueno que McGonagall saliera de su oficina para sacarles puntos y darle otro sermón a Alastair pero realmente necesitamos hacer esa poción para no llevarnos Pociones a, er, Julio.
"Sí, ya sabes" creo que esa será su muletilla de ahora en más "las cosas buenas no duran más que veinte minutos" y... ¿captas, Janey? ¿Captas?

[Alastair Cunha]

A Alastair no le preocupaba aprobar las materias, se conformaba con que no lo hicieran recursar, total para ser guardia de la sección de locos peligrosos del San Mungo no hace falta tener muchos créditos escolares. Me parece.
"¿Trajiste las cosas?" preguntó, porque él obviamente no. Le pasó un brazo por encima al hombro de Jane y comenzó a caminar rumbo a las escaleras, para bajar y alejarse de la oficina de McGonagall.

[Alastair Cunha]

Chasqueó la lengua "No importa, vamos a las mazmorras a hacerlo, entonces" sugirió, sin haberle dado mucha atención a la mochila ni a su contenido. Seguro que en las mazmorras podían sustraer en forma de préstamo un caldero y devolverlo antes de que Slughorn se diera cuenta. O tener la suerte de ver a alguien en los pasillos con uno y distraerlo mientras Jane se lo quita y corre, corre como cabello que lleva el murtlap.

[Alastair Cunha]

"Buenísimo" cerró el trato con eso, mientras llegaban a las escaleras que los sacarían del piso peligroso en el que se encontraban. "¿Y qué hacías para evitar dormirte mientras esperabas que terminara mis trámites?" esta vez era obvio a lo que se refería con trámites, pero muchos se alejaban con sospecha cuando lo decía al volver a la Sala Común. Bola de malpensados.

[Alastair Cunha]

"¿Cantabas?" preguntó, ignorando completamente el resto de la información que Jane le dio, básicamente porque es más importante enfocarse en esas nimiedades más que en las tareas que deja Slughorn. "¿Qué cantabas?" y ojalá que sea una polka, porque sería verdaderamente divertido escucharla cantar una.

[Alastair Cunha]

Alastair ya estaba interesado en la canción de Jane, no importaba lo mucho que ella se esforzara en hacerla quedar como algo carente de importancia. Giró la cabeza para verla, soltándola y dejándole los hombros libres mientras apoyaba ambas manos hacia atrás en una de las barandas de la escalera de piedra, enfrentándola "No, no sé, ¡canta!" pidió con una sonrisa animada, haciendo un movimiento con la cabeza como si hubiera comenzado un ciclo de centrifugado. "¡Vamos!" la animó.

[Alastair Cunha]

Apoyó por completo la espalda (bueno, la parte de la espalda que podía) contra la baranda y se cruzó de brazos, todavía sin parar de sonreír. "¿Por qué no se puede?" preguntó, sin captar que la verguenza existía y que probablmente Jane tenía de eso "Yo te hago los coros, dale" alzó las cejas rápidamente, como si ella tuviera que asombrarse por el ofrecimiento.

[Alastair Cunha]

La miró, enseriándose lentamente, fijando la vista en Jane y haciendo silencio, todo con una tranquilidad tan ajena a Alastair que a él le hubiera dado miedo de soñar con algo así. Pero era una transición por la que tenía que pasar para tratar de aceptar que no oiría la canción de Jane. O algo así "¿Por favor?" pidió, y le hizo ojos de hurón enceguecido por las fuertes luces de un camión que se acerca a 120km/h en el medio de la ruta.

[Alastair Cunha]

Sonrió triunfante y se acercó a Jane inclinándose hacia ella, colocando las manos tras la espalda como si estuviera a punto de escuchar un secreto. Es que, bueno, casi. Mantenía la cabeza gacha, mirando hacia el piso mientras se concentraba en escuchar la canción de Jane y entender la letra. No era bueno para esas cosas, primero captaba la melodía y último, después de seguramente haberla memorizado, caía en cuenta de que tenía letra. Pero le puso ganas.

[Alastair Cunha]

¡Tan buena y cooperadora que parecía Jane! Ahora Alastair no iba a saber qué pasó con la oveja perdida e iba a tener que vivir con la duda hasta que vea algo brillante, se distraiga y se olvide. Podrían pasar minutos enteros hasta que eso ocurriera.
"¿Y vamos a hablar de la poción todo el trayecto?" preguntó, obviamente decepcionado de que el concierto de Jane hubiera terminado tan abruptamente y siguiéndola.

[Alastair Cunha]

Jane canta lindo, si quiere descubrir el verdadero significado del desafinado debería haber prestado más atención aquella vez que a Alastair se le dio por probar entretener al grupo con un muy inventado canto tirolés sobre las dimensiones del estómago de Slughorn y las posiciones sexuales de Flitwick.
"¿Mientras cantas y haces la banda sonora de mi historia?" preguntó, no estaba de más insistir un poquito.

[Alastair Cunha]

Pero Alastair no era de los que se enternecían y aceptaban. Era de los que pensaban que se veía adorable y mientras dejaba escapar una risa demostrando sus sentimientos de Hufflepuff volvía a pasarle el brazo por los hombros a Jane y la atraía hacia sí unos segundos y la alejaba un poco para dejarla respirar. "¿Quieres que te la enseñe y me la cantas después?" ofreció.

[Alastair Cunha]

Pues, ¡malas noticias! No es así como funciona la dañada cabeza de Alastair. De hecho, la cercanía difícilmente estaba relacionada con algo. Ahora sí: la lejanía estaba fuertemente ligada con una mala cara prometiendo un rodillazo en la ingle. "Perfecto, va algo así" miró a Jane, sonrió y dejando la boca entrecerrada dejó escapar el aire haciendo que sus labios vibraran golpeteándose, haciendo un ruido de trompeta humana. Por suerte para Jane, no por mucho, porque ya solito empezaba a reírse de su taradez.