Te apuesto lo que quieras

[Tristan Jenkins]

Ok. Juguemos con los dados y los caballos.

Asintió, -Que no pasa nada- se repitió, y aunque ella había usado un tono que parecía más tranquilo, no le transmitió lo mismo a él. ¿Quizá estaba sobre pensando mucho todo? Sí, claro, e incluso ya le empezaba a dar algo de culpa no poder comer con ella (en parte para seguir con su mentira del dinero), porque esa le parecía una parte importante de las citas... Suspiró, regresando la vista al frente "Está bien" dijo, como dando por sentado el tema. Se tomó unos instantes para observar el paisaje del lugar, muy verde, amplio, bien cuidado y si respiraba muy profundamente se daba cuenta que el aire era un poco más limpio. Qué lástima que era un lugar de vicios.

Pensó que llevaba mucho tiempo en silencio y preguntó lo primero que le paso por la mente: "¿Y cómo ha estado tu día?". ¿Era trivial? Sí, pero de verdad quería saber como estaba.

[Frankie Gibbs]

Se empezó a arrepentir de haber dicho de ir a ver a los caballos. No usaba reloj pero al ritmo que iban igual no les iba a dar tiempo de ir y volver. O quizá llegarían y no podrían verlos porque los jinetes tenían que prepararse. Giró la cabeza y abrió la boca para decirle a Tristan que igual mejor debían regresarse, pero la cerró cuando hizo su pregunta, cortando su línea de pensamiento.

"¿El mío?" Dijo, como si hubiese alguien alrededor. "Normal. Estuve ayudando a mi papá por la mañana con la cosecha" respondió, sin querer detallar la experiencia porque le parecía muy trivial. Empezó a aminorar el paso sin llegar a detenerse. No sabía cómo se tomaría Tristan el no ver a los caballos y se sintió responsable por no tomar en cuenta las distancias.

[Tristan Jenkins]

Epa... ¿Y no podía... Ya sabes... Aparecerse?

Asintió, escuchándola con atención, pero se sintió insatisfecho al recibir una respuesta tan corta. "¿Es muy difícil?" preguntó, haciendo referencia a la cosecha e intentando conseguir más información. Al darse cuenta que ella caminaba más despacio, buscó igualar su paso, pero no se preguntó porqué lo hacía. Ella era quien sabía como funcionaba ese lugar y él iba a seguirla sin objetar porque era un turista.

[Frankie Gibbs]

Lo pensé después de escribir que estaban caminando, por todo ese asunto de la libertad para aparecerse en lugares mágicos. Por la coherencia del thread podríamos decir que no está permitido por razones que tienen poco sentido, como dejar que un animal elija a un líder.

Al final se terminó deteniendo. "En realidad no. Oye" dijo, mirando hacia un lado. "No calculé bien las distancias, creo que no nos dará tiempo de ver los caballos y volver a tiempo para la primera carrera" alzó la mirada para buscar la de Tristan, que estaba en su derecho de preguntar porqué no se aparecían en el lugar, porque tenía todo el sentido del mundo y yo espero encontrar una mejor razón más tarde.

[Tristan Jenkins]

Se me ocurre que no estaba permitido para que nadie pudiese escapar sin pagar sus deudas y hubiese seguridad en un lugar donde se manejaban altas sumas de dinero. Tristan pensaba de esa manera también, por eso no le había cuestionado el no aparecerse desde el inicio (y porque quería pasar más tiempo con ella sin estar rodeados de gente).

Se detuvo junto a ella con ganas de preguntarle más sobre la cosecha y la granja, pero solo llegó a abrir su boca y luego cerrarla apretando la mandíbula, mirando con un gesto serio en dirección al hipódromo. Aunque le hacía más ilusión ver los caballos fuera de la carrera, creía que Frankie preferiría verlos en la carrera y no podía imponerle sus deseos egoístas cuando en realidad solo quería irse de ahí. "Está bien, entiendo" dijo, sacó una mano de su abrigo y señaló en dirección a los edificios "Entonces ¿Volvemos?" y había sido mala idea sacar su mano porque ahora tenía ganas de volver a tomar la de ella, pero batallaría contra sus impulsos.

[Frankie Gibbs]

Tiene mucho sentido. Te la compro.

Analizó la cara de Tristan por un segundo, otra vez sin tener idea de si estaba muy desilusionado o le daba igual toda esta operación. Mejor no entrar ahí. "Si, lo siento" dijo, juntando las cejas, con genuina lástima. "Podemos intentar verlos después de la carrera aunque no sé si se pueda" admitió, aparte que iba a estar muriéndose de hambre en poco tiempo. Después de las carreras iba querer asaltar el restaurante.
Se dio media vuelta y empezó a caminar. Tenía la sensación que todo estaba saliendo muy mal y no sabía cómo arreglarlo sin huir directamente de la escena.

[Tristan Jenkins]

Vendido al mejor postor.

Se encogió de hombros "No hace falta" dijo, en realidad, no estaba seguro de querer permanecer más tiempo ahí una vez terminara la carrera, mucho menos para ver a los caballos maltratados y agotados. "Ya tendré otra oportunidad de ver caballos alados de cerca" agregó, caminando al paso de Frankie, ahora en dirección a los edificios.

[Frankie Gibbs]

Hizo de sus manos puños dentro del abrigo, sintiendo como sus uñas se clavaban en sus palmas. Por lo general, cuando asistía al hipódromo era un día alegre, sin más preocupaciones que las que su caballo ganara la carrera, que le daba un sensación de adrenalina y de triunfo cuando sucedía, porque sí que le había pasado alguna vez. Ahora se sentía presionada, incómoda y un poco enfadada.

Levantó la mirada para verlo. "¿Cuándo?" Preguntó, con sorpresa. No veía a Tristan respirando el mismo aire que un caballo en otras circunstancias.

[Tristan Jenkins]

Contuvo las ganas de poner los ojos en blanco, quien lo mandaba a abrir su bocota. Había dicho aquello solo por decirlo y ahora se encontraba en un aprieto al tener que explicarse. No mentía al decir que podría verlos en otro momento, a los caballos alados en general no precisamente los que estaban en ese hipódromo, pero sentía que se comprometía con algo que no estaba convencido de hacer.

Se tomó unos segundos para pensar su respuesta, apretando los labios hacia un lado "Hay un club de equitación al que va mi tío abuelo... Puedo ir en algún momento" dijo, no muy entusiasta pero sin desagrado, decidiéndose por no dar una fecha exacta. La miró de reojo, sintiéndose un tanto nervioso al hacer la siguiente pregunta "¿Quieres ir?". A ella le gustaban los caballos, a él no le molestaba verlos en mejores condiciones y el siguiente fin de semana era Pascuas, ese sonaba como un buen plan en su cabeza.

[Frankie Gibbs]

Le era familiar los clubes de equitación de cuando quiso ser amazona, un sueño que le duró el tiempo entre que le dijeron que tenía talento y que debía practicar mucho si quería competir.

Miró a Tristan y se mordió medio labio inferior. "¿Se pueden montar?" Preguntó, con cautela, sin estar segura de aceptar otra cita viendo lo mal que les estaba yendo en la primera. Tampoco le apetecía ver caballos por el simple hecho de verlos, se aburriría como una ostra.

[Tristan Jenkins]

Agachó la cabeza y esbozó una sonrisa, sintiendo que su plan funcionaba poco a poco. "Mirar, tocar y montar" confirmó, recordando la única vez que había visitado el club y las actividades que realizaban allí. "Puedes aprender y practicar equitación" comentó intentando sonar un poco emocionado por la idea de ver los animales. La verdad era que le daba igual, pero definitivamente le parecía más agradable un club que un hipódromo.

[Frankie Gibbs]

Miró hacia el frente, a veces bajando la mirada a sus pies para ver por dónde iba, meditando la propuesta de Tristan que, si era honesta, tampoco sonaba tan mal.

"Sé montar" le dijo, en plan niña pequeña que dice que se sabe atar los zapatos ella sola. "Digo, no soy ninguna experta pero no se me da mal" se corrigió, al escucharse. Se contuvo de decirle que le parecía bien el plan porque aún no estaba segura de si iban a salir bien parados de esa cita, y no quería hacer promesas anticipadas.

[Tristan Jenkins]

No podía negarse que le parecía un poco raro contar los pollos antes de nacer hacer planes a futuro cuando esa cita que apenas iniciaba, no lo hacía con el mejor pie. Pero se veía capaz de hacerla funcionar si de entrada ya tenía otra asegurada. "La primera vez que vi uno fue en las clases del colegio y no he visitado más de una vez el club" comentó, como para que se sobreentendiera que él no sabía montar y que no iba a juzgarla porque sus habilidades eran inexistentes en comparación.

[Frankie Gibbs]

Empezó a aflojar el puño, relajándose un poco ahora que tenían un tema de conversación que no rondaba lo que estaban haciendo. Sacó una mano del bolsillo para ponerse el pelo detrás de las orejas.
"Los aethonan son animales increíbles. Yo prefiero montar a caballo que en escoba, pero no puedes ir por ahí yendo a comprar pan en un caballo alado" dijo a modo de chiste. Tampoco tenía el tiempo de darle los cuidados que requería. "¿Se hacen más cosas en ese club?" Preguntó con curiosidad. Nunca había contemplado unirse a un club. Siempre le pareció aburrido y elitista, pero podría considerarlo si hay, al menos, un bar decente.

[Tristan Jenkins]

Murmuró un 'uhm' e hizo un poco más notable su sonrisa apretada en respuesta al chiste que no entendía para que no pareciera que lo ignoraba. Primero, no recordaba cuantas razas de caballos alados existían porque no era un tema de su interés, recordaba los Thestrals, aunque no podía verlos, precisamente por la condición que se debía cumplir para observarlos y los dibujos que había visto de ellos bastante impactantes. Segundo, como ex jugador de Quidditch, las escobas eran lo mejor.

"Sí. Bueno... Hay espacios para montar y otros para socializar" dijo, pensando de nuevo en lo que había visto en su única visita, él no era un visitante regular de ese tipo de lugares, porque sentía que no encajaban con su estilo de vida. "Como un club de caballeros con caballos" se le ocurrió decir al no encontrar nada mejor con lo que comparar, tampoco había visitado uno de esos, pero sabía de que iban.