The Dress Code

[Josephine Harrington]

Qué bronca que le daba que le hablara del contrato. Ella le había preguntado si podía confiar y él le había dicho que sí. Ahora resultaba que por ese contrato tenía que aceptar salir así vestida, aunque fuera en contra de su vergüenza y su dignidad. Apretó los labios, imaginando que le costaría dinero al club y quizás se lo quería cobrar a ella! O peor, como Maximilian dijo, la iban a echar o a dejar en la reserva para siempre.

Josephine se quedó callada unos segundos, apoyando la frente contra la puerta, pensando en qué hacer. Pensó en que iba a ser la única que no aceptaba, la única que no salía en las fotos... ¿por qué a las demás chicas no les molestaba? Era injusto pero, por un bien mayor, iba a tener que ceder.

Se echó hacia atrás y destrabó la puerta. La fue abriendo despacito porque iba a asomar su cabeza nada más.

[Maximilian Donovan]

Se movió hacia un lado cuando escuchó el ruido de la puerta destrabándose, nuevamente subiendo la mano derecha para pegar el dedo índice sobre sus cejas y cubrirse a medias los ojos. Estaba girado hacia la pared, de todos modos, con el brazo izquierdo junto a la puerta del vestidor.
Quizás ella estaba ahí adentro vestida con su ropa de entrenamiento, lista para avisarles que no iba a participar de las publicidades.

"¿Llamo a alguien en particular?" preguntó, por si ella quería hablar con alguien más de confianza, quizás algún otro miembro de la reserva.

[Josephine Harrington]

Asomó su cabeza y miró hacia ambos lados del vestuario antes de enfocar su atención en el abogado que, gracias a Merlín, se estaba tapando los ojos. Lo bien que hacía.

"No, está bien" dijo con voz más baja y algo molesta "Voy a hacerlo igual" apretó los labios "Pero la próxima vez no firmo ningún contrato si no dice que me van a dar ropa de mi tamaño" siguió quejándose porque claro, para él era muy fácil ir y decirle que tenía que hacer lo que el club quisiera porque sino todo el esfuerzo de esos meses se iba al tacho de basura. Jo tomó aire y de repente tuvo una idea. "¿Me presta su saco?" le preguntó ahora asomando también un brazo fuera de la puerta.

[Maximilian Donovan]

Sonrió, ya se imaginaba que iba a tener que negociar un montón con ella cuando le llegara la hora de renovar su contrato y tener agregar cláusulas sumamente específicas sobre el uniforme y vestuario para que ella no se sintiera traicionada.

Se giró hacia la puerta, espiando por entre los dedos aunque solamente estaba la cabeza y el brazo de Josephine asomándose.

"Sí, por supuesto" dijo sin entender, volviendo a girarse hacia la pared, bajando la mano y quitándose el saco. Se lo extendió a ciegas, sin saber si debería preguntar para qué o no.

[Josephine Harrington]

Tomó el saco gris que el hombre le pasaba y volvió a cerrar la puerta. Se lo puso, comprobando que las mangas le quedaban bastante largas, y que al menos de largo le tapaba más las piernas que la falda del uniforme que le habían dado.

Volvió a abrir la puerta despacio y salió, aclarándose la garganta y mirando hacia la salida del vestuario, desde donde se escuchaban las voces dando indicaciones y venía mucha más luz. "En un ratito se lo devuelvo" le dijo algo avergonzada "Voy a hacer las fotos y nada más, no quiero tener que andar con el uniforme este por todos lados" le explicó y apretó los labios antes de mirarlo "¿Me acompaña?"

[Maximilian Donovan]

Accidentalmente se vio en el espejo e hizo una mueca de incomodidad, como si recién ahora se diera cuenta de lo mal que se vestía hasta en el trabajo, aunque técnicamente solamente había ido para revisar unos documentos. Algo iba a tener que hacer con su mala costumbre de no prestarle atención a lo que se ponía.

"Sí, no hay problema" dijo, sin saber qué hacer con las manos ahora así que aprovechó una para hacer un gesto invitándola a salir del vestuario mientras las seguía. "El fotografo se va en menos de una hora, así que creo que no la vayan a tener mucho tiempo ahí parada" agregó, tratando de animarla.

[Josephine Harrington]

Movió los brazos, incómoda porque las mangas le fueran tan grandes, y finalmente giró hacia la puerta de salida. Caminó esperando a Maximilian y cuando llegó a la sala donde estaban sus compañeras siendo acomodadas para posar, lo miró ansiosa. "Eso espero" contestó y se volvió a aclarar la garganta "Bueno, acá estoy" exclamó más fuerte.

Una maquilladora se le acercó en seguida para ponerle un polvo en la cara para que la piel no le brille y una de las estilistas quiso peinarla pero Jo empezó a mover los hombros molestas. "Debes quitarte el saco" le dijeron. "Cuando esté allá" señaló a donde las demás chicas estaban en una especie de fila, algunas adelante y de costado y otras atrás, sonrientes. Qué bronca que tenía, ¿encima iba a tener que sonreír?

Cuando la soltaron, se acercó con toda intención de pararse detrás de todo pero como era una de las jugadoras más bajitas le dijeron que debía ir adelante. Lo miró mal a Maximilian, como si él tuviera algo que ver, y se quitó el saco para revoléarselo cuando ya no quedaba más opción porque iban a empezar a tomar las fotos.

[Maximilian Donovan]

Se quedó cerca de los asistentes, al borde de donde estaban posando a las jugadoras y parcialmente oscurecido por los enormes reflectores de luz que las iluminaban.

Mientras veía la situación, sabiendo que Josephine estaba enojada, estaba prestándole especial atención a su situación. Cuando ella lo miró enojada al tener que moverse a la fila de adelante, se preguntó si, aparte de enojada, estaba particularmente enojada con él.

No, ¿verdad? Es decir, ¿por qué habría de enojarse con é-...? Atajó su propio saco, aceptando la realidad de que la chica estaba particularmente enojada con él.

El fotógrafo empezó a pedirles que hagan una pose, la sostengan hasta ver el flash, y hagan otra.

[Josephine Harrington]

Fingió una sonrisa y se acomodó de costado lo más que pudo para que el cuerpo de su compañera de adelante la tapara. Luego volvió a girar para el lado que le indicaron y, finalmente, para la foto de frente puso los brazos cruzados sobre su pecho para intentar taparse luego de tironear para abajo la falda verde en un intento desesperado porque la cubriera más.

Para su suerte, la siguiente foto era agachadas levemente por lo que pudo taparse bastante y, para la final donde tenían que abrir los brazos manoteó una escoba de las que las chicas de atrás estaban promocionando para taparse con eso todo lo que podía. De más está decir que entre cada foto si podía le lanzaba una mirada molesta al abogado que estaba observando todo desde las sombras. Seguro que estaba re divertido, engañando chicas para que después tuvieran que salir mostrando todo en fotos y él mirarlas feliz. Se sentía traicionada, había confiado en lo que le había dicho el día de la firma del contrato y ahí estaba haciendo algo que no quería y renunciando a su dignidad.

[Maximilian Donovan]

Una de las asistentes de fotografía le estaba hablando sobre la importancia de la luz mientras él miraba, y espero que Josephine no lo haya visto sonreír cuando notó que ella agarraba una escoba para taparse. El ingenio de la chica.

Por más que entendía que ella odiaba el mínimo vestuario, esperaba que ella se diera cuenta de la importancia de promocionarla más allá de lo atlético, porque tenía mucho potencial para representar a las Harpies. Igual él no era el que estaba ahí, con las luces y en poca ropa.

[Josephine Harrington]

Cuando el fotógrafo les indicó que habían terminado POR HOY, Jo se hizo la que aplaudía también con las demás chicas pero su aplauso era claramente irónico.
Tapándose con los brazos, se acercó nuevamente hasta el abogado y levantando un dedito pero en seguida volviéndose a cubrir le dijo "¿Qué quiso decir este señor con que terminamos POR HOY?" y lo miró alzando las cejas, esperando explicaciones.

[Maximilian Donovan]

Cuando Josephine caminó hacia él se enserió y dobló un brazo como para sostener el codo del otro, acercando la mano hasta su rostro otra vez por si tenía que taparse los ojos nuevamente. Es que ella era bajita, y él que no era muy alto tampoco, quedaba a un ángulo incómodo de enfrentar.

"Que ya pueden cambiarse y seguir con las actividades del día" dijo tratando de apaciguarla con un tono calmado, pero obviamente evitando mencionar que sí, no era el fin de las sesiones de fotografía de la temporada. "A menos que no tengan otra cosa para hoy, y puedan retirarse..." agregó, evitando el tema y enfocándose en lo positivo.

[Josephine Harrington]

Lo escuchó mirándolo desde abajo y luego negó con la cabeza.

"No no, dijo por hoy como que otro día íbamos a seguir" insistió "Qué feo, la verdad... qué feo" murmuró mirándolo desilusionada "Yo le pregunté si estaba todo bien en el contrato y usted me dijo que sí..." le explicó el motivo de su enojo, moviendo de nueva una pierna de manera ansiosa.
"Y ahora tengo que hacer estas cosas pero total es fácil porque usted se queda acá tranquilito en las sombras" movió las manos señalando el espacio y después volvió a taparse "Y no le ponen un traje todo chiquitito donde se le ve todo..." apretó los labios y apartó la mirada "Necesito el saco de nuevo" pidió o exigió a estas alturas.

[Maximilian Donovan]

Alzó las cejas y separó los labios cuando ella insinuó que él le había mentido a la hora de firmar el contrato. ¡Pero si era un contrato estándar! Las acusaciones de Josephine, que no estaban totalmente equivocadas en realidad, lo hacían sentir pésimo.

"Lo que pasa es que" dijo mientras daba un paso atrás para quitarse el saco "es normal que al principio tengan que promocionarlas así, Miss Harrington" quiso defender la situación. "Los socios del club reciben estas revistas con publicidad, que también es publicidad para ustedes las jugadoras" extendió el saco hacia ella recuperando el paso que había retrocedido.

[Josephine Harrington]

Tomó el saco y se lo puso con algo de vergüenza esta vez porque él la viera y porque hasta recién estaba hecha una furia y ahora le pedía favores.
"Si, seguro... me imagino que los socios necesitan que mostremos todo" Jo seguía sintiendo que había sido un exceso de poder y un poquito machista lo que acababa de pasar, sólo que no sabía cómo expresarlo correctamente para que él la entienda.

Se fue toda envuelta en el saco de nuevo hacia los vestuarios y a último momento, cuando ya había masticado bastante bronca, se dio vuelta y le gritó "Ya se lo devuelvo". ¿Así que le gustaba engañar chicas? Bueno ahora iba a tener que esperar a que ella terminara de cambiarse y volviera.