Visita a un familiar

[Sir Ulrich Lamport]

Lamport, que había estado observando por la ventana con las manos tras la espalda. Se giró al oír que alguien entró a la habitación conversando.
En la cama se encontraba un hombre de la edad de Lamport, con el rostro desfigurado: su frente estaba hinchada y sus ojos parecían diminutos. No podía mover la cabeza, así que miró de reojo en dirección a la entrada y se quedó en silencio, pues estaban hablando.
"Buenos días" saludó, haciendo una breve reverencia. Sus ojos se posaron en choffer de la muchacha. Pensó que eran parientes de su conocido.

[Sir Ulrich Lamport]

Miró a la muchacha alzando el mentón y sin disimular su expresión algo divertida ante tanta actitud en ese envase angelical.
"¿Sucede algo, Miss Vanover?" preguntó dando un paso hacia el frente. No la conocía, pero después de escuchar el apellido más de dos veces en un solo minuto se sintió libre de utilizarlo para referirse a ella. El hombre que se encontraba en la cama no pareció moverse, seguía la escena con la vista.

[Sir Ulrich Lamport]

"La información es un muy preciado recurso" dijo bajando la cabeza en forma de un saludo cordial que él sintió debido de hacer, demostrando su educación. -Mark Vanover, Miss Vanover... ¿algún mayordomo?- ausmió por lo que acababa de ver y oír.
"Soy Sir Ulrich Lamport, y mi desafortunado amigo aquí es Mr. Frederick Ashe" el hombre en la cama levantó una mano en saludo. Las tenía llena de ampollas cubiertas de un unguento amarillo.

[Sir Ulrich Lamport]

Para ser completamente honesto, Lamport nunca usaba su título para sacar ventaja, pero en este caos parecía necesario, sino esencial, para obtener el respeto de alguien de aires superiores. Reverenció con la cabeza al ser presentado a los dos hombres.
"¡Ah!" exclamó, su tono pareciendo más animado que la expresión en su rostro "Mr. Ludwig Vanover es su padre..." dijo en tono comprensivo "nos hemos cruzado alguna que otra vez" informó, complacido. Si quería saber más de él, esperaba que ella fuera a preguntarle a su padre. Tal vez hablaría de algo que Mr. Vanover no quisiera que fuera de conocimiento de su hija.

[Sir Ulrich Lamport]

Exactitudes, no. No sabía si el padre compartía con ella sus historias diarias, y sin embargo los incidentes que los cruzaron en el pasado no merecían una especial mención. Aparte, Ingrit mostraba eso, cara de niña, buena o mala, poco influía; si él quisiera una niña dejaría embarazada a su mujer y ya.
"Me temo que la profesión de su padre y mi trabajo nos han cruzado anteriormente, aquí mismo, en Inglaterra" le dijo, ladeando un poco la cabeza para mirarla a los ojos. Afortunadamente, Lamport nunca había oportunado a Vanover.

[Sir Ulrich Lamport]

Escuchó la pregunta y dejó escapar una risa breve, sonora. -¿Quiere guerra?- pensó mirándola con otros ojos. Miró al hermano de Miss Vanover y al hombre que los acompañaba. Finalmente, todavía con la sonrisa a boca cerrada, miró a su compañero convaleciente. Éste le alzó las cejas invisibles bajo la frente de tamaño desmedido, en gesto de diversión.
"Miss Vanover, ¡me insulta!" exclamó divertido con su voz profunda "Mi único hijo todavía está en pañales" ¿le vio cara de anciano o qué? Al menos le causó gracia.

[Sir Ulrich Lamport]

"Comprendo" le dijo dirigiendo la vista al hermano de Ingrit durante un segundo, ofreciéndole una misericordiosa mirada. Básicamente él era el obstáculo para heredar, pero así era la vida. Aún peor, ella no solo no era la primera sino que era mujer, aún menos derechos.
"Lamento no tener a quien presentarle para enlazarse con usted en matrimonio" -porque si fuera por sexo...- se hubiera ofrecido enseguida "pero tengo certeza de que hará buenas conexiones en Londres. Hay muchas familias pureblood que quieren casar a sus hijos lo antes posible" comentó sin verdadero interés. A él no le convenía que las casaran tan jóvenes.

[Sir Ulrich Lamport]

Miró a Mark Vanover "Creo que el objetivo no es disminuír la cantidad de muggles ni evitar su reproducción" dijo, llevándose una mano al bolsillo del chaleco que cubría a medias por el blazer.
"Según tengo comprendido, es evitar que continúen penetrando y formando parte de la comunidad mágica" finalizó sacando del bolsillo un viejo reloj de bolsillo mientras su cadena plateada tintineaba suavemente. No marcaba la hora exactamente. Volvió a guardarlo, miró a la muchacha.

[Sir Ulrich Lamport]

No sabría decir con exactitud qué efecto tendrían las sonrisas encantadoras de Ingrit en una isla ocupada únicamente por féminas, pero Lamport creyó comprender que el interés en un matrimonio apresurado tal vez se debía a eso: la falta de hombres en la isla donde se educó.
"En mi opinión personal" miró al chofer y a Mark antes de dirigirse a Ingrit bajando el tono de voz pero haciéndolo audible para todos los presentes en la pequeña habitación "las reacciones hormonales símil-amor están nublando el juicio de la juventud". ¿Quién podía culparlos? Lamport sabía que la diferencia entre bruja y muggle mujer estaba en que sólo una de ella estaba legalmente capacitada para ser engañada, y ambas perfectamente capacitadas para estar entre sus sábanas.

[Sir Ulrich Lamport]

-Hasta donde sé hay muggles importantes, adinerados y atractivos- pensó, dejándola hablar. No es que fuera igual la riqueza y el poder muggle al mágico, pero con el ritmo que estaba tomando la sociedad mágica, no faltaría mucho para que lo fuese.
Miró a Mark Vanover "Disculpe la intromisión, pero ¿cuántos años tiene usted?" no sabía si el muchacho estaba en condiciones hablar, así que miró de reojo a Ingrit, serio en expresión. No lo veía tardío en casamiento, después de todo los hombres solían mantenerse solteros durante décadas para casarse con muchachas más jóvenes.

[Sir Ulrich Lamport]

"Veintiocho" repitió en voz baja, algo pensativo. Qué sensación desagradable el percibir que él había estado en los zapatos del soltero Vanover hacía casi una década. No es que fuera algo negativo la soltería, era el hecho de no tener esa edad lo que le daba cierta molestia.
"Tal vez para cuando se vuelva amargado comprenda los beneficios de su apellido y su fortuna" le dijo algo animadamente al muchacho postrado en la cama.

[Sir Ulrich Lamport]

((Disculpa la tardanza))
Alzó las cejas en sorpresiva actitud cuando escuchó la pequeña discusión entre Ingrit y Harold. El comentario del mayordomo, aunque acertado, había sido bastante entrometido para alguien de su posición. Le resultó divertido, siempre y cuando los comentarios no fueran sobre él.
"Afortunadamente, hacen esos comentarios cuando me encuentro lejos de poder oírlos" bromeó seriamente, empatizando con la situación de la muchacha. Meh, Lamport sólo tenía una mucama y un empleado administrativo. El elfo era mudo, el dueño anterior le había arrancado la lengua y prohibido regenerársela.

[Sir Ulrich Lamport]

Lamport miró a su conocido de reojo "Unos bandidos lo atacaron en Knockturn Alley, probablemente confundiéndolo con alguien que les debía dinero" mintió, muy seguro de la falacia que pronunciaba como verdad. Ashe no era más que un viejo que no pasaba de novato en los círculos Death Eater, enviado a asustar a una familia de mestizos. Tuvo suerte de poder desaparecerse antes de que le hicieran algo peor. "Pero su hermano se ve realmente débil" comentó mirando a la muchacha a los ojos, tratando de sonar algo preocupado.

[Sir Ulrich Lamport]

No pudo evitar dejar escapar una risa breve y seca, tratando de arreglarlo dedicándole una reverencia con la cabeza a Mark por si había percibido que le había resultado gracioso el comentario de Ingrit.
"Sólo espero que no sea algo contagioso" le dijo a la muchacha, no notó que Ashe intentó cubrirse más con las cobijas "sería terrible tener que visitarla a usted y verla débil" comentó, mirando a Mark Vanover nuevamente, como analizando los invisibles síntomas.

[Sir Ulrich Lamport]

Miró a Ingrit y entrecerró los ojos. Rápida de acciones, seguramente, para llevar a cabo lo que había hecho a su propia sangre, plan bien ejecutado, demostrado en la simple presencia de Mark en una cama de hospital y sin embargo... "Me pregunto qué tipo de ingesta habrá hecho Mr. Vanover aquí para estar en este estado" comentó con la voz baja, acercándose a Ingrit.