Al servicio de la comunidad mágica

[Philip Bagnold-Browne]

Ya debía estar acostumbrado a esas fiestas, a esas familias antiguas y grandes, pero con el correr de los años solamente le había tomado afecto a sus trajes. Se sentía cómodo vestido así, era su prenda favorita en el mundo, pero no terminaba de descontracturarse nunca, ni siquiera en una fiesta de algo como un compromiso de unos chicos que ni conocía. Estaban todos ahí por los apellidos que portaban, quizás Ryder fuera el único de su círculo que había ido por alguno de los novios. Él servía a la comunidad mágica de otras maneras, poner la cara en fiestas a las que los Bagnold-Browne tenían que asistir no era uno de sus ideales. Gritar detrás de un escritorio del Ministerio era igual de inútil pero para Philip no.

Ni siquiera estar allí con Teddy y Ryder lo había relajado para que aflojara la expresión. Tenía el ceño fruncido y miraba a todos como intentando averiguar quién había estado del lado de Quien-no-debe-ser-nombrado y quién no, quién era fiel al Ministerio y a su madre, y quién estaba deseando una limpieza de sangre que los sacara del gobierno. Golpistas, El Profeta miente!
Quizás cuando sirvieran la cena se dedicara a comer y a nada más, a permanecer callado como el grandote hermitaño que era, llenándose la boca de papas para dejar que Ryder salude en su lugar y él sólo asentir con su rostro duro y severo de prócer.

Iba en el medio de Ryder y Teddy, caminando a su par, escuchando a su amigo. Observó la decoración que él le señalaba, estando de acuerdo en que era un tanto ostentosa pero cuando estaba por dar su opinión, Ryder tuvo que soltar sus chistecitos para sacarlo de quicio y hacer reír a Teddy. "Creo que El Profeta ya tiene suficiente material para toda la semana con las fotos que nos obligaste a sacarnos en la entrada de la fiesta" contestó apretando la mandíbula, molesto "¿Quieres dejar de llamar la atención?" preguntó sabiendo que era imposible, su amigo era la reina del carnaval "¿Trajiste un pergamino para tomar nota de ideas para tu fiesta de compromiso?" deslizó esta vez él la broma para darle donde doliera y molestarlo un poco.

[Philip Bagnold-Browne]

Claro, él tenía a Marnie para que nadie dudara de su sexualidad, en cambio Philip tenía cachetes gigantes, cara de bebé y a nadie en su vida. Así fue que tuvo que recurrir a medidas desesperadas, como Mathilda Harvey de novia falsa, porque básicamente él no quería ser el centro de ese tipo de atención.

Philip ya había sentido vergüenza ajena por el look dorée de Ryder y en parte estaba de mal humor porque sabía que alguna de esas fotos que les habían tomado terminaría en la página de sociales de El Profeta el lunes, que Mathilda vendría con el recorte y una sonrisa de oreja a oreja a mostrarle que ya no ponían en duda que fueran gays porque la ropa de Ryder era una confirmación.
Saludó a una de las miles de amistades de su amigo y luego giró a verlo con su cara de fastidio habitual. Le tenía la paciencia que sólo los años al lado de Ryder podían forjar y aún así le aburrían los chistes gay que lo terminaran por dejar siempre en ridículo.

"No tengo con quién, sino ya me hubiera ido y te hubiera dejado con tu capa polémica aquí" respondió siempre serio. Otro en su lugar le hubiera contestado que no necesitaban comprometerse ni casarse, porque su amor era más puro y duradero que cualquier formalidad pero este era Philip, no podía sumarse a las bromas de Ryder y reírse, eso sería demasiado normal "¿Qué pasó con Penrose? ¿Ya no hay casamiento?" preguntó entonces, insistiendo en meter el dedo en la llaga.

[Philip Bagnold-Browne]

Él no podía verle nada beneficioso, aunque a algunos pudiera resultarles muy simpático que la Ministra tuviera un hijo gordito y gay, Philip estaba seguro que la mayoría de los magos no eran tan open mind... Ryder se codeaba demasiado con gente rara y con muggles y creía que todo el mundo pensaba como él y era libre, pero Phili pensaba lo contrario, no eran una sociedad tan abierta y prefería evitar esos comentarios, básicamente porque NO eran verdad. Lo stressás, por eso se queda pelado.

Tampoco pensaba que Marnie fuera una novia trucha (al menos no tanto como Mathilda), por eso le preguntaba, porque genuinamente quería saber qué había pasado ahora con la rubia. Philip rodó los ojos "¿Impasse?" repitió, aprendía esas palabras extrañas de tanto escucharlo presumir "¿Ahora qué le hiciste?... ¿o qué no te hizo?" corrigió porque seguro algo tenían que ver sus delirios y exigencias y la indiferencia de Marnie en todo eso.
Se rió por primera vez en la noche, volteando a ver a Teddy que se alejaba de ellos "Si yo fuera él, también iría detrás de tu prima" soltó antes de volver a mirar al frente luego de scannear de arriba a abajo a Adeline, pero al igual que él estaba acostumbrado a las palabras francesas o españolas de Ryder, su amigo debía estar acostumbrado a sus comentarios descarados.

[Philip Bagnold-Browne]

((Resucitando a Flippy en 3, 2...))

"¿Si sabes que Rihannon tiene novio y que Pippa sigue en Hogwarts?" -además de llamarse como yo- imitó la pregunta de Ryder, para explicarle por qué no se fijaba en ninguna de las dos. ¿En serio su amigo quería que se convirtiera en un asalta cunas? ¿o en el tercero en discordia en la pareja de su otra hermana? Además de que Rihannon para él era excesivamente parecida a Laurentia, y eso lo perturbaba tanto como a Ryder le ocurría con Adeline.
Philip suspiró, resignado, dirigiéndose hacia la barra porque él también la había fichado mientras venían caminando, y porque estaba ahí para beber y comer. Y figurar, cierto. "Un whiskey de fuego, por favor" le pidió al encargado de los tragos y se apoyó en la barra para mirar a Ryder "No, no tienes la culpa" contestó acerca de ignorar a Marnie durante siete años "Pero le heriste el orgullo, debiste al menos haber averiguado con quién te estaban comprometiendo ¿no?" alzó las cejas e inclinó levemente la cabeza "¿Entonces? ¿Por ahora está suspendida pero no cancelada esa locura de casarte con una extraña?" preguntó porque Philip era práctico, para los detalles de color estaba Ryder que, si quería, seguro que se iba a explayar más sobre cómo había decidido suspender todo y darse un tiempo, seguramente para la joda.

[Philip Bagnold-Browne]

¿Encima pretendía que sus hijos tuvieran el apellido Fletwock y no Bagnold? De ninguna manera... asaltacunas o sometido, una de dos. Además él no estaba en ese momento para pensar en su propia situación sentimental, por eso prefería distraerse escuchando lo cretino que podía ser Ryder con Marnie. Quizás lo ayudara a sentirse mejor sobre sus propios errores con Mathilda, o no... Mejor se acordaba que ella no era su novia en serio, que todo ese delirio estaba en su cabecita pero que no era real y por lo tanto no debería sentirse tan vacío porque ella lo ignoraba desde que se habían besado en Esfinge. Seguro que lo que extrañaba era tener a quién hacerle escenas, con quien descargar frustraciones en la oficina, no la extrañaba específicamente a ELLA, sino tener con quién ser un loco de mierda.

Philip acostumbraba a tomar whiskey Blishen pero aunque miró con mala cara la corrección de su amigo, le daba igual mientras fuera whiskey de fuego y estuviera bien fuerte. Necesitaba un trago urgente, y más para soportar lo que Ryder decía. Rodó los ojos, ya sin ánimo de aclararle ni al barman ni a nadie que ellos no eran gay ni pareja.
Siguió escuchándolo mientras les preparaban los tragos y asentía con la cabeza ocasionalmente. Arrugó los ojos "Morías porque te hiciera una escena de celos, sino no hubieras mencionado a la perra sin aclararle nada" en su opinión Ryder era igual de histérico que Marnie "¿Para qué quieres tenerla detrás tuyo si no te interesa realmente?" y apenas lo preguntó su cerebro y los años al lado de su amigo le dieron la respuesta. Porque quería tenerlo todo, aún cuando no lo necesitara, porque Ryder era la reina del carnaval. Cierto.

[Philip Bagnold-Browne]

Philip era crítico por naturaleza, no iba a adularlo ni darle la razón porque sí, y ya habían superado hacía rato la barrera de la amistad en la que podía decirle cualquier verdad, por más horrible que fuera, con absoluta franqueza. Así como él no se ofendía de verdad por las jodas de Ryder sobre la sexualidad de ambos, sabía que Ryder no iba a enojarse tampoco con él, no podría...

Lo escuchó con expresión un tanto aburrida, porque ya conocía la historia de los cafés y los monólogos de Ryder. Esa parte la sabía de memoria porque era su favorita, Marnie había logrado tenerlo a Ryder hablando horas solo, intentando llamar su atención. No podía menos que causarle algo de gracia, pero ya no. Sin agradecer, tomó el vaso bajo con whiskey Ogden, sintiendo que ya el aroma era diferente. Más profundo, seguramente el sabor sería más fuerte. Mejor, así acabaría ebrio cuanto antes.

Le dio un trago a la bebida y maldijo que justo Ryder lo hiciera reír cuando estaba tragando. Bajó rápido el vaso y contuvo la risa. "¿En serio? ¿Castidad?" porque no le creía una palabra. Le agradaba que Marnie hubiera sido mala con su amigo, que un poquito lo merecía, pero a medida que avanzaba el relato iba comprendiendo más.

"O sea que le estás haciendo pagar que no te dejara ser el primero en casarte a una edad ridículamente joven" genial elección de palabras para estar en medio de una fiesta de compromiso de dos adolescentes "Como siempre, no se trata sobre la rubia, se trata sobre ti" dijo sosteniendo el vaso con la mano mientras hablaba "Sigues queriendo llamarle la atención, pero mostrándote indiferente" y de repente se sintió iluminado. ¿Y si Mathilda sólo se estaba haciendo la difícil? ¿Si no quería hablarle ni verlo para llamar su atención? Malísima su asociación mental, pero llevaba días sin poder dejar de pensar en eso.

[Philip Bagnold-Browne]

A veces, Phillip se preguntaba como podía ser amigo de alguien tan egocéntrico y descarado como Ryder, era un misterio muy grande en su vida, porque para eso ya tenia a su hermano Angus que llenaba su cuota de personas dañinas de por vida... Cualquier pensaría que luego de toda una infancia bajo la compañía del 'favorito de todo el mundo', no elegiría un mejor amigo igual.

Suspiró, porque claro, todo tenia sentido y razón de ser cuando Ryder le conseguía mujeres con las cuales tener sexo. Se apoyó de espaldas sobre la barra, mirando hacia el salón y a los demás invitados yendo y viniendo, mientras le daba otro trago a su whiskey.

"Claro que te afecta en forma personal, por algo estás tan desesperado porque ella te preste atención" negó con la cabeza porque sabía que era imposible demostrarle su punto a Ryder, quizás que hubiera pospuesto el compromiso fuera bueno para Marnie también, ese matrimonio no tenía sentido para ninguno de los dos.
"No sé que te hizo pensar que si Teddy tenía novia te prestaría más atención" otra cosa carente de lógica "Igual agradezco tu intención, con motivos tan nobles" sarcasmo, bello sarcasmo, ahora se daba cuenta que necesitaría mucho de esos whiskeys para sobrevivir a esa noche "Ya tuve una novia de mentira y no funcionó, ¿cierto?" Philip estaba sufriendo de verdad, tenía un problema real, pero Ryder estaba ciego porque su ombligo gigante no lo dejaba ver más allá.

[Philip Bagnold-Browne]

Asco! Innecesaria tanta descripción del ombligo de Ryder.

Philip lo miró desconfiado, no porque no le creyera sino porque empezaba a sospechar algo. Si su amigo ya no estaba desesperado porque Penrose le prestara atención era porque había conseguido a alguien más para que estuviera detrás suyo. "Si tu lo dices" le concedió el beneficio de la duda y le dio el último sorbo al whiskey antes de apoyar el vaso vacío en la barra. Así, como agua, había pasado en su garganta acostumbrada a emborracharse casi todos los fines de semana. "Otro, y que sea Blishen esta vez, por favor" pidió girando levemente la cabeza para hablarle al tal Dermont que Ryder trataba con tanto cariño pero que Phil nunca se había molestado en conocer.

Lo observó con su habitual cara de pocos amigos mientras el chico le tocaba el hombro de forma molesta y sólo exhaló para contener la paciencia. Obvio que no había sido tacaño! Hasta le había llenado la heladera de la comida más cara que Harvey había comido alguna vez en su vida.
"Nos estamos ignorando" respondió, dudando si darle más detalles y contarle la verdad "En la inauguración de tu bar, nos pusimos un poco... ebrios" igual creía que ni faltaba explicarle eso a Ryder, debía imaginar que Philip había ido a tomarse hasta el agua de los floreros "Y ahora todo se puso raro y estúpido" el estúpido en realidad era él que huía como un adolescente, avergonzado por un beso, pero Mathilda tampoco se lo hacía fácil. Ella era igual o peor que él.

[Philip Bagnold-Browne]

¿No podía catar las dos marcas de whiskey? Eran como Pepsi y Coca Cola, Philip debería poder reconocerlas con los ojos cerrados, y no iba a tomar otra marca que no fuera su favorita por un capricho de Ryder. El vaso anterior fue Ogden porque su amigo se le había adelantado, no por gusto.

Una vez que Ryder lo soltó, Philip giró para poder verlo mientras esperaban sus tragos nuevos. Podía imaginar que estaba disfrutando verlo incómodo, con lo mucho que le costaba hablar del tema, y lo peor es que no había pasado ni un cuarto de lo que su amigo se imaginaba que había ocurrido cuando se emborracharon en Esfinge. Bufó, buscando la manera de explicarle y llevándose una mano al rostro, para rascarse la frente levemente mientras hablaba.
"No sé, creo que por un momento nos tomamos muy en serio la actuación" le dio a entender que todo estaba un poco mezclado, que él mismo estaba confundido porque ahora que no se hablaban y no podía mandonearla ni molestarla para que lo mire con cara de odio se daba cuenta que Harvey ocupaba un lugar importante en su vida y que sin quererlo había terminado creyéndose la mentira.

[Philip Bagnold-Browne]

Más triste que cuando pretenden servirte un fernet con Pepsi.

Debería animarlo saber que podría haber sido peor, si se la hubiera follado en el baño ahora tal vez todo sería el doble de confuso y quizás valdría la pena. Gracias, Ryder, pero Philip sólo lo miró serio, queriendo matarlo.

"No, no llegamos a eso" le aclaró y bajó su mano hasta el vaso nuevamente lleno de whiskey que le ofrecía el barman "Gracias" interrumpió y luego volvió a mirar a Ryder. Odiaba que lo hiciera hablar de su privacidad delante de desconocidos pero iba a responderle porque sino su amigo se pondría insoportable.
"Sólo fue un beso, creí que al lunes siguiente todo sería normal" Claro que el problema no era el beso, ni tampoco tener sexo en el baño si eso hubiera ocurrido, el problema era que la chica en cuestión era Mathilda Harvey. "Prefiere ignorarme" agregó.
A Philip no le hubiera molestado no mencionar jamás lo que habían hecho ni dicho en medio de la borrachera, siempre que hubieran seguido como siempre, peleando, él mandándola a buscar café y ella deseando envenenarlo. Que lo ignorara y ni siquiera lo mirara con ganas de matarlo era lo que lo sacaba de eje, Mathilda estaba rompiendo el status quo.

[Philip Bagnold-Browne]

Ryder no podía medir el problema de Philip con Mathilda con la misma vara que usaba para él y Elsa. Mathilda no era Elsa. No era una chica para tener sexo casual, ni siquiera era su amiga o se caían bien como para que eso pasara. Obvio que no iban a tener sexo sólo por una noche de borrachera! Y menos después de que Phil vomitara. Él no estaba mal por el beso, estaba mal porque la vida no había seguido como si nada, ella lo ignoraba por esa estupidez. Nunca debió haber ido al antro de Ryder a tomar con ella.

Alzó una ceja y lo miró serio "¿Y tú que tienes? ¿Te vino?" le preguntó molesto porque su amigo lo tratara como a un niño "Tú fuiste el que pediste detalles estúpidos, ¿no quieres que sigamos esta conversación por allá, junto a las viejas chismosas?" siguió, irónico.
Le dio un trago al whiskey, despegándose de la barra con toda intención de irse de allí, no quería que el tal Dermont siguiera escuchando todo.

[Philip Bagnold-Browne]

Al menos Ryder había dejado de beber esa cosa verde que parecía algún trago asqueroso llamado Increíble Hulk y que seguro mezclaba alcoholes de la peor calaña con jugo. Y había descubierto algo nuevo, a lo que Philip estaba acostumbrado gracias a él: sentirse insultado en su masculinidad.

"Aah, ya entiendo" murmuró echando levemente la cabeza hacia atrás "Estás celoso" quería molestarlo un poco, porque claramente él no estaba llorando! Y para Philip no había sido sólo un chape, por un rato había jugado a tener una relación de verdad, a que otra persona le importara, y se lo había creído. Entender que nada de eso era real, le estaba costando más de lo que podía admitir o de lo que hubiera imaginado. "Ok, no lloraré más" contestó determinado a finalizar el tema ahí y darle un trago a su whiskey parecido a un fondo blanco.

[Philip Bagnold-Browne]

Le dio el gusto de chocar su vaso contra el de Ryder, en un brindis sin mucho ánimo de su parte porque sentía que no tenía nada por lo que brindar. Luego lo escuchó, mirándolo con su cara de 'quiero asesinarte' cuando Ryder insinuó que Mathilda era también un chico.

"No lo pensé tanto... ¿de verdad crees que inventé todo eso con Harvey porque quise?" resopló molesto "Ya sé que todo fue una pésima idea desde el principio" Y a medida que lo pensaba y que lo seguía escuchando, más enojado se ponía. Si no fuera por todo ese teatro que Ryder montaba y cómo le gustaba llamarlo y tratarlo delante de la gente, los idiotas de El Profeta nunca hubieran comenzado con esos rumores bobos y él no hubiera recurrido a medidas desesperadas e irracionales. Como prefería gritar y quejarse, nunca se detenía cinco minutos a pensar una solución coherente y esa mentira estúpida había sido lo primero que se le había venido a la cabeza mientras armaba un escándalo en la sección del Ministerio encargada de las relaciones con la prensa.

"Díselo a Harvey" respondió también con pocas pulgas, porque lo que le faltaba era que Ryder lo retara por ser infantil "Ya no quiero hablar de eso" murmuró moviendo la mano, dejando el segundo vaso vacío sobre la barra y enderezándose para caminar unos pasos y quedar frente a su amigo "¿Vamos a quedarnos aquí lamentándonos toda la noche?" preguntó envalentonado por el alcohol y queriendo cambiar de tema.

[Philip Bagnold-Browne]

Agradeció el repentino silencio de Ryder y que cambiara el tema. Lo esperó mientras terminaba su trago también y él también miraba al rededor, al resto de los invitados aunque personalmente sintiera aburrimiento y no tuviera ganas de hacer sociales con nadie. Él prefería quedarse junto a su amigo y que Ryder fuera el que saludara y dijera alguna tontería para caer simpático. El papel de Philip era el del borracho huraño, siempre y esa noche en particular.

Observó el símbolo de la familia Knightley y, aunque el comentario le causó algo de gracia, fue incapaz de sonreír. Sólo negó con la cabeza antes de mirarlo con el mismo aburrimiento cuando escuchó la última idea de su amigo. "¿Crees que estoy de humor para eso?" preguntó sinceramente, porque pocas cosas podían ponerlo de peor humor que intentar ligar con una chica y, menos, una conocida "Encima Bennet, que trabaja para El Profeta" era meterse en la boca del lobo, más allá de que las pelirrojas no eran su tipo "Quieres ir allí sólo para ver si están las gemelas Birkin ¿cierto?" intentó adivinar los motivos por los cuales Ryder quería relacionarlo con esa chica.

[Philip Bagnold-Browne]

Lo que para Ryder era una solución, para Philip era una complicación más, además de que esa noche no estaba de humor para seguirle los juegos y más que conseguir una cita terminaría arruinando todo. También estaba el pequeño detalle de que se suponía que tenía una novia oficial y que la mitad de las mujeres del salón conocían su reputación de borracho.

Alzó una ceja, mirándolo cuando le comentó sobre sus actividades sexuales con la Birkin rubia. No le extrañaba que eso pasara, es más, era un alivio después de haberlos visto histeriquearse en varias fiestas, porque Philip y su poca paciencia ya estaban aburridos de eso.
"¿Anne?" preguntó retóricamente y negó con la cabeza "Vomité en su casa y me odia, no va a poder ser" comentó por si su amigo aún no lo sabía.