Vestite y andate

[Sophia Wright]

¿De qué se sonreía? Sophia no podía entender que después de todo ese rato de negativas y casi malos tratos, Jesse siguiera sin enojarse con ella y, sobre todo, sin juntar sus cosas e irse.

Inspiró, intentando juntar paciencia, pero encima el aire del baño estaba pesado y le faltaba el oxígeno "Ya te dije que acá no hay comida" le repitió para que se quitara la idea de hurgar en su cocina, ¿y si le rompía alguna de las cosas que usaba para practicar para sus clases?. No, claramente no podía dejarlo solo, tenía que irse ya, urgentemente, para que ella se pudiera bañar tranquila. "Te pido que salgas de la ducha, te vistas y te vayas" dijo marcando los pasos que tenía que hacer por si se había desorientado con el vapor de la ducha.

[Jesse Sacheverell]

Quizás hacpia falta que Sophia se involucrara personalmente en los pasos requeridos para que Jesse saliera vivo de su casa.

"Bueno, pero si querés salgo a comprar" ofreció mientras cerraba las canillas. "¿Toalla tenés, Soph?" aprovechó a preguntar, porque no se había tomado la molestia de mirar antes de entrar al baño de Sophia, y ya había pensado en que era totalmente posible secarse con la toalla de mano. Seguramente los magos tendrían algún sistema, pero yo lo imagino defectuoso, como secarse las manos con uno de esos cosos que tiran aire violentamente contra las manos de uno.

[Sophia Wright]

Totalmente de acuerdo, nada seca las manos como una toalla, ¿qué es ese invento de tirar aire caliente? Asqueroso.

Sophia alzó una ceja, pero esta vez no llegó a molestarse porque la idea de Jesse no estaba mal... si salía, que era lo primordial en ese momento, creyendo que podría volver y ella nunca más le abría, quizás tenía una chance de sacarlo de su casa de manera no violenta. Lo miró conteniendo la molestia porque le dijera Soph en lugar de su nombre completo, aunque a estas alturas pensaba que Jesse tenía algún problema, que era como esos perros que no se dan por enterados de que los estás retando y que no importaba qué cara pusiera ella ni qué barbaridad le dijera, él iba a seguir en su realidad paralela y rosa.

"Sí, acá está" le respondió tirándole una toalla que estaba colgada de un gancho en la puerta. "Te cambias y te vas" le repitió antes de cerrar la puerta.

[Jesse Sacheverell]

Agarró la toalla que ella le pasó con una sonrisa y salió de la ducha cuando ella cerró la puerta. Qué buena onda Sophia. Ojalá ella estuviera feliz con la idea de que Jesse saliera a comprar, porque cuando salió de la ducha estuvo un rato ahí adentro secándose, peinándose, y tratando de limpiar el espejo del botiquín para mirarse la cara de desvelo y resaca fatal que llevaba. No que pudiera hacer algo al respecto, claro.

Ah, qué problema eso de cambiarse, ¿no? Jesse no había llevado su ropa sucia al baño, así que cuando abrió la puerta, salió con la toalla atada alrededor de la cadera. Lo más tranquilo, obviamente.

[Sophia Wright]

Mientras él salía de la ducha, Sophia regresó a la cocina para terminar de un sorbo su café y comerse un dulce a escondidas para que Jesse no quisiera desayunar lo mismo. Era triste pero era su realidad en ese momento, hasta que no llegara al bar no iba a comer decente y, lo peor, era estar escondiéndose en la cocina de su propia casa porque tenía un tipo desnudo en el baño que no quería irse.

Lo vio salir del baño con la toalla en su cintura y tuvo que mirar hacia otro lado pero de las ganas de rodar los ojos que tenía. Simplemente frunció la nariz y observó, esperando que fuera a su habitación a cambiarse para irse de una buena vez.

[Jesse Sacheverell]

"¡Ya desocupé el baño!" anunció alegremente (porque por eso Sophia lo había apurado y le había puesto límite de tiempo, ¿no? Porque quería que él saliera para poder usar el baño ella, y él re buena onda le avisaba que terminó) mientras iba a la habitación para buscar su ropa. Iba a tener que limpiarla con magia así nomás, pero con haber podido ducharse consideraba que el día había sido un éxito y eso que recién empezaba.

Tomó su bola de ropa sucia, que apestaba a tabaco, alcohol y cosas que mejor no detallar, y se sentó al borde de la cama. Sacó la varita del bolsillo del pantalón para tratar de pasarles un par de encantamientos como para tratar de sacarles el olor y la mugre. No era bueno con la limpieza pero al menos para aguantar un par de horas.

[Sophia Wright]

Claro... sí, para eso. Lo mismo que era cierto que el día recién empezaba pero Jesse en cambio ya estaba terminando con lo que sea que estaba haciendo en la habitación de Sophia y estaba listo para irse. Su estadía en esa casa había terminado hace rato, nadie había hablado nada de un late check out la noche anterior.

Cuando terminó de masticar a escondidas, lavó su taza con magia y se dispuso a limpiar el baño para poder usarlo ella apenas el tipo denso se fuera. Sophia abrió la puerta del baño y comprobó con horror que el espejo estaba empañado, la cortina toda corrida y salida de los ganchitos, pelos en la bañadera, pelos en el jabón... y el shampoo destapado.
Inspiró profundo, sin poder creer que ahora Jesse le generara tanta bronca cuando suponía que la habían pasado aunque sea decente juntos. Por un segundo intentó recordar si al menos él la había hecho acabar y arrugó los ojos porque no podía acordarse bien de nada pero se sorprendería de sí misma si había logrado excitarse con el olor a alcohol y cigarrillo que tenían los dos.

[Jesse Sacheverell]

Desodorizó (y limpió a medias, supongo, aunque no debe haber nada mejor que el agua y el jabón aunque sean manipulados con magia) la ropa lo mejor que pudo para ponerse los calzoncillos y las medias. ¿Necesitaba ponerse algo más? No, ¿cierto? La toalla la dobló a lo largo y se la colgó del cuello para que el cabello húmedo no le mojara la espalda.

Caminó hacia la cocina por si Sophia estaba ahí ahora, y necesitaba ayuda preparando el desayuno. Pobre Soph, lo mínimo que podía hacer él era revisarle la heladera y las alacenas buscando algo para comer, para no mandarla a trabajar con el estómago vacío.

[Sophia Wright]

Las medias... te lo pido por favor! Nada podía secársela más que un tipo semidesnudo con las medias puestas. Cuando Sophia terminara de ordenar el baño y encontrar una toalla limpia para ducharse ella también, iba a llevarse la desagradable sorpresa al verlo así en SU cocina.

Al salir del baño, asomó la cabeza creyendo que lo encontraría ya vestido en su habitación, pero no... la ropa al menos estaba en la cama estirada pero eso significaba que él seguía en bolas por su casa. ¿Por qué todo tenía que llevarle tanto tiempo a Jesse? ¿También habría estado tres horas para terminar? Por Merlín, mejor dejaba de indagar en su poca memoria sobre eso.

Escuchó el golpeteo de las puertas de su alacena y a paso apurado se acercó a la cocina con un mal presentimiento. "¿Qué haces?" le preguntó horrorizada y ya visiblemente molesta "Te dije que te cambies, que me tengo que ir" le repitió por vez un millón "Y también te dije que acá no hay comida".

[Jesse Sacheverell]

Ah, no... a él su mamá siempre le había dicho que la clave para no resfriarse era ponerse siempre las medias. No te llevás a casa a un chabón que está sonándose los mocos, porque el que se pone las medias para andar en ropa interior en tu casa logró entrar primero.
Quizás queda banneado después, pero bueno.

"Pero vos te vas a trabajar ahora, ¿no?" preguntó mientras sacaba todo el brazo que había metido en una alacena donde solamente me parece que había un paquete de fideos, pero por ahí me equivoco. "No podés ir sin comer nada, Soph" declaró con preocupación.

[Sophia Wright]

Pero ya que se había puesto las medias, que se pusiera todo el resto de la ropa! ¿No veía lo ridículo que quedaba?

"Sí..." respondió primero sin entender a dónde quería llegar porque claramente sabía que ella tenía que irse y aún así seguía dando vueltas en calzón, con SU toalla en el cuello como si fuera un boxeador de barrio, y revolviendo la poca comida que le quedaba. Sophia se resignó a no corregirle más el que la llamara por ese apodo horrible porque todo era por un bien mayor: no escucharlo más, nunca más, directamente. "¿Y a vos te parece que yo puedo comer fideos a esta hora?" soltó porque eso la estaba enervando todavía más "Escuchame una cosa, Jerry... te lo digo por última vez" lo miró fijo y levantó una mano porque ponerse nerviosa la volvía efusiva "Vestite y andate!"

[Jesse Sacheverell]

¡La comodidad de entrecasa era importante! Ojalá que por alguna vuelta del destino lo tengas en tu casa durmiendo una noche de invierno y, como no hay estufa, tengas que presenciarlo metiéndose la parte de arriba del pijama y un sweater adentro del pantalón. Una obra de arte.

"Jesse" corrigió con una sonrisa, cerrando la alacena. "¿Un tecito, algo?" no sé si preguntó u ofreció, creo que está ofreciendo hacerle un té a ella. "Un tecito y me voy" agregó como para que todo quedara en paz entre ellos, como momentos atrás. Es que había tanta buena onda, ¿no?

[Sophia Wright]

No, gracias, creo que a estas alturas Sophia prefería morirse de frío, que las sábanas estuvieran heladas y abrazarse a una bolsa de agua caliente en lugar de tener que dormir de nuevo con Jerry/Jesse que no se iba más de la casa. Imaginate en invierno... iba a tener todavía más excusas para querer quedarse tapado hasta las orejas.

"No, ya tomé" terminó por decir la verdad "Dijiste que ibas a bañarte porque donde vivís no sé qué cosa..." siguió moviendo la mano como para graficar las pavadas que le había escuchado ya "Pero seguro podés desayunar allá" y como ella también había querido hasta ese instante, que todo terminara en paz, se corrió a un costado para que él pudiera pasar de nuevo a la habitación a buscar sus cosas y terminar de vestirse. Era su última oportunidad. Sophia estaba a cinco segundos de sacarlo por la fuerza y tirarle la ropa por el balcón, como un buen escándalo manda.

[Jesse Sacheverell]

Pensá en todo el gas que te ahorrás calentando el agua para la bolsa si traés a Jesse a tu casa en invierno, Sophia. Y si lo entrenás para que te suba las bolsas con comida todos esos pisos en escalera, ¡con lo poco que pide a cambio! Yo no sé porqué no ves que te re conviene. Con lo normal y fashion que es él.

"¿Cómo que ya tomaste?" le preguntó dolido, lo bueno es que eso lo había confundido lo suficiente como para que empezara a caminar hacia la habitación. "Es porque tardé mucho en la ducha, ¿no?" claro, la pobre seguro se moría de hambre y no lo pudo esperar más. Bueno, que se quede tranquila porque estaba por cambiarse en la habitación. "¿Me alcanzás mi té?" pidió.

[Sophia Wright]

Ni por más estufa viviente que fuera ni por todo lo necesario que era tener a alguien que calentara la cama en invierno. Sophia no estaba dispuesta a volver a vivir una situación así. Esperaba no emborracharse nunca más así, no, iba a tener que mantenerse medianamente sobria como para poder sacarse de encima al tipo y que se fuera de su casa sin dormir allí. Era eso o no coger nunca más y esa idea no le copaba tanto.

No respondió nada a la primer pregunta, porque lo que le faltaba era darle explicaciones en su propia casa. Sólo abrió un poco más grande los ojos y movió la cabeza dándole la razón porque OBVIO que había tardado demasiado en el baño. Sin embargo lo último fue lo que la dejó impresionada en el medio del living, porque estaba siguiéndolo como un guardaespaldas para asegurarse de que esta vez se vistiera y se fuera. ¿Qué le había visto? ¿Cara de Starbucks? Ya le había dicho que desayunara en su casa, ella no pensaba hacerle ningún té. Era tardísimo, tenía que bañarse e ir a trabajar.
Jesse tenía 2 minutos para salir de la habitación.