Etcétera

[Minwoo Hwang]

La verdad era que aun no podía creer lo que estaba sucediendo: no solo su hermano había llegado oliendo terrible al restaurante, sino que había aceptado la loca idea que habían propuesto. Increíble. Esperaba que el ministerio no leyera las cartas que enviaba a Corea, quizá para eso usaban a Jaehyun para que tradujera lo que escribían los coreanos, porque pensaba contarle todo a su otro hermano para que todos pudiesen reírse mucho de Minho. Puro amor fraternal.
Resoplo y se quejo con un falsamente dolido: "Deberías tener más fe en nosotros", mientras se puso de pie casi al mismo instante que el mayor y luego le agarraba la manga del suéter a su primo y lo jaloneaba, con una mirada cómplice porque todo eso iba a ser super divertido... Hasta que les soltó esa amenazaadvertencia... ¡Si solo querían ayudar! "¡YA!" le llamo la atención y bajo la mirada y jalo más a Jaehyun para que lo se defendiera "No me puedes botar, te vas a quedar sin quien te haga la comida" reclamo entre dientes. Pues no quería quedar de patitas en la calle por andar de respondón, pero tampoco quería que lo botaran sin darle chance de demostrar su rol en la casa.

[Jaehyun Jung]

Él se quedó sentado un par de segundos extra después de que Minho se levantó. ¿En serio? ¿La virgen se dirigía voluntariamente al volcán para el ritual de sacrificio así de fácil? Una ligera, molesta y no bienvenida sensación de culpa se agregó a la mezcla de diversión anticipada y entusiasmo por la travesura próxima, mas se la sacudió cuando el mayor les echó en cara que tenía la capacidad (no de que fuera capaz, aunque después de esto quién sabe, sino de que podría si quisiera) de mandarlos a vivir bajo un puente. ¡Todavía que estaban haciendo lo posible por ayudarlo! ¿Quién lo mandaba a ir a apestarse?

Se dejó jalonear un poco por Minwoo antes de pasar las piernas por encima de la banca y ponerse de pie del otro lado dando un brinco, correspondiéndole brevemente la mirada a fin de confirmar que estaban en la misma página. Ellos habían nacido para que el karma pudiera cobrarle a Minho todas las que debía, y era un honor ser la herramienta del ajusta-cuentas universal. Rió un poco porque su primo usara su talento en la cocina para defender su lugar en el departamento. "A mí no puedes botarme porque soy el que hace tu panorama más agradable cada mañana" apuntó, más en serio de lo que debería ser, pero al niño le gusta ver su reflejo hasta en el reloj aguantándose la carcajada. Sin más, comenzó a dirigirse al depósito.

[Minho Hwang]

Hablando de karma, ya veremos quién apesta más, si ustedes o él, cuando los mande a vivir debajo de alguno de los puentes que cruzaban el Támesis. Porque no sé qué haya hecho de malo Minho en esta vida o en la anterior, pero juraría que ustedes tienen que pagar el triple que él.

"Yo echo a quien quiero, al menos hasta que pongan su primer sueldo en la mesa" les retrucó, sin haber escuchado del todo pero seguro de que se estarían quejando de eso. Levantó las cejas a modo de amenaza, en una de las clásicas expresiones que hacía sin pensar y luego se arrepentía, porque esos dos salvajes se burlaban de él gracias a ellas. No se lo tomaban en serio nunca, esos dos. Minho lo sabía, y a veces se lo tomaba con gracia y se reía de él mismo con ellos, pero la mayoría del tiempo solo se ofuscaba como un nene sin piruleta y perdía la capacidad de disfrutar un poco de humor. Ok, convengamos que el hecho de que ese 'poco de humor' en general significaba reírse de él, no con él. No lo culpen luego por desarrollar un pequeño placer por las amenazas.

Entreabrió la puerta por la que había salido Minwoo y asomó la mitad del rostro, para chequear que no hubiese nadie. Ahora es cuando pueden hacer gestos a sus espaldas, supongo.

[Minwoo Hwang]

Jamás iban a oler peor que Minho, porque aparte de oler el saquito de café, a él no le daba miedo usar hechizos para quitarse los olores de encima. No se sorprendan si el Ministerio les mandaba unas cuantas lechuzas un día de esos con cartas que no iban a ser precisamente de elogios.
No sabía si comenzar a reírse del mayor (¿cómo iba a botarlos? Sus padres seguro viajaban desde Corea a defenderlos) o molestarse por la mención del tema del salario. Era un tema delicado porque no solo no tenía un salario que aportar, sino que el suyo iba a ser el más bajo de todos. -Aishh... ¡Hyung es $%#&!*/&!- ¿Sabían cuánto ganaba un pobre pelador de papas asistente de cocina como él? Ya lo descubrirían a fin de mes.
Volviendo a su otra realidad, aquella en la cual no le preocupaba tanto un sueldo, se vio obligado a seguir a los otros dos dando pasos largos y apresurados porque obviamente, sus piernas eran mucho más cortas. Y así como no le esperaron, él tampoco espero a que confirmaran que la zona estaba libre de muggles curiosos, "Están ocupados, nadie nos va a prestar atención" explico mientras terminaba de abrir la puerta y les hacía un gesto para que entraran a la ajetreada cocina.

[Jaehyun Jung]

Le mostró a Minho su mejor expresión herida, llevándose una mano al pecho y todo, para que su despiadado primo supiera muy bien cómo lo afectaban sus crueles palabras (léase: nada, sólo le daban armas para hacer drama). El tema del sueldo no era tan sensible para él como para Minwoo y las amenazas de Minho no le causaban conflicto por dos razones: uno, él en serio consideraba que ver su linda cara cada mañana era más que suficiente para compensar los gastos que Minho estaba solventando solo de momento; dos, si su primo de verdad quisiera enseñarles una lección y los corriera, dejándolos en un aprieto económico y residencial (??!!) grave, sabía que Minwoo y él en realidad nunca estarían en un aprieto grave. Incluso si el abuelo Choi les negara ayuda, él siempre podría tragarse su orgullo y recurrir a su familia paterna. Entonces no, aunque no era su hit que le restregaran en la cara que no estaba aportando dinero todavía, tampoco se iba a dejar incomodar tan fácil.

Y disculpa, Minwoo, no es que no te esperara a propósito, pero le resultaba menos sencillo acomodarse a tu paso cuando los acompañaba alguien que podía ir a su mismo ritmo. Total que él entró a la cocina como si nada, manos en los bolsilos del pantalón, porque si Minwoo decía que estaba OK, estaba OK, y mejor no ir luciendo como persona paranoica que sabe que está por hacer algo malo.

[Minho Hwang]

Tuvo que apretar la boca para que no se le escapase una sonrisa ante los gestos dramáticos de su primo.
Los siguió a los dos adentro del local, dejando que la puerta se cierre detrás suyo. Aunque confiaba en que su hermano sabía mejor que él dónde estaba el resto del staff del restaurante, no pudo evitar mirar hacia la puerta posterior de la cocina, temiendo que se abriera... Y que lo olieran, obvio. Porque verlos ahí era normal.
Casi normal, porque si los otros dos actuaban como si nada raro fuese a pasar, a Minho se le notaba a la legua que estaba por hacer algo malo. Mirando hacia un lado y caminando hacia el otro, era obvio que se iba a tropezar con alguno de los dos.
"Perdón". Apoyó la mano en el hombro de su hermano mientras lo miraba un segundo, antes de volver la vista hacia atrás.

[Minwoo Hwang]

Qué traición más grande Jung Jae Hyun. No queremos saber nada más de ti, anda a vivir a la ciudad caminar al paso de otros. No interesa cuál familia paterna pueda mantenerlos, ¿Ok? Anda otro lado con tus piernas largas.

El depósito se encontraba justo frente a la cocina y tras una mirada para asegurarse que no iba a salir nadie de esta última, se acerco al lugar que le interesaba inclinándose un poco sobre la puerta como si pudiese escuchar si había o no movimiento dentro. Tras no escuchar algo, porque era humanamente imposible, hizo un ok con sus dedos y se dispuso a girar la perilla de la puerta. Y fue ahí cuando sintió que su hermano lo tropezaba y le ponía una mano en el hombro, definitivamente aquello merecía una queja (no porque fuera más bajo podían llevárselo por delante todo el tiempo...) pero al verlo se le ocurrió que siempre era mejor molestarlo. "Si sigues así, te harás uno con el olor" le advirtió, moviendo el hombro suavemente para quitar la mano del mayor de su cuerpo (se le contagiaba el olor, recuerden) "Leí que la preocupación hace que los olores de las plantas permanezcan más tiempo en tu cuerpo" -O ropa- daba igual, lo acaba de inventar. Le dio otra mirada cómplice a su primo, él también podía inventarse otras cosas y ambos disfrutarían de jugar con la mente del mayor.

Aunque su pasatiempo favorito fuera fastidiar a Minho (al menos el de Minwoo) no merecían ser echados del apartamento, porque uno era lindo y el otro sabía cocinar.

[Jaehyun Jung]

((Primo, no te lo tomes a mal, pero voy a estrujarte porque awwn, tu avatar *estruja... + wink* No, no, no, broma XD))

Pero Minwoo, la idea del departamento en la ciudad fue tuya vamos a bañar a Minho como si fuera perro, lo mínimo que puedo hacer es caminar a su paso unos cuantos metros(?!).

Como estaba ocupado siendo casual, no pudo intervenir a tiempo para impedir que Minho tratara de jugar a DBZ fuera a querer fusionarse con el pobre Minwoo accidentalmente, pero como la situación no pasó a mayores se limitó a reírse por lo bajo de la amenaza sin sentido que soltó su mejor amigo. "¿Por cómo interactúan los químicos que despide tu cuerpo a causa del estrés con los de la planta, dices?" se fumó, aunque luciendo demasiado confiado como para delatar a la primera que no tenía ni idea de si acababa de soltar una reverenda estupidez. "Creo que yo también leí eso una vez" comentó, mirando a Minho con repentina preocupación. "O lo dijeron en clase, De hecho, estoy casi seguro de que con ciertas plantas, el olor reaparece cada vez que te estresas el resto de tu vida" añadió, enarcando mucho las cejas.

[Minho Hwang]

Minho los odiaba a veces, sobre todo cuando llegaba a su casa y se daba cuenta de que le habían mentido en cosas como: 'vas a quedar oliendo feo toda la vida' o 'no hay forma de sacar los olores que no sean bañándote como a un perro'. Él va a buscar esa información en google you wish, Minho sus libros por la noche y, cuando se dé cuenta de que sí había un hechizo super simple para limpiar olores, se va a vengar. Posiblemente eso sea por la mañana, porque buscar en los libros no era tan rápido como preguntarle a los profesores. Y probablemente, quizás, tal vez, ambos mocosos se despertasen con las frazadas petrificadas, sin poder salir de la cama de otra forma que no sea moviéndose como gusanos.

Levantó la mano a la altura de la cabeza para excusarse de tocar a Minwoo con su peste.
"No mientas..." le respondió, sin creerle demasiado. Pero, cuando su primo acotó lo suyo, la duda se le notó en el rostro. Duda y preocupación. Por un lado nunca les creía nada, pero por el otro les creía siempre. Con esos dos, Minho vivía como un bipolar atormentado por diablitos y angelitos.
Los diablitos lo estaban haciendo entrar al depósito para bañarlo con la ropa puesta. Los angelitos estaban en la biblioteca investigando si había alguna solución menos... ridícula. Llegarían tarde, los angelitos. Una lástima.
"¿En serio lo dices?" preguntó.

¿Se saben el cuento ese de que en el mundo existía gente confiable? Tsk. También se lo deben haber inventado esos mocosos.

[Minwoo Hwang]

((*le hace la cruz al Chanbaek*))
PERO NADIE TE DIJO QUE TE FUERAS A SER TRAIDOR

Humedeció sus labios y movió la cabeza afirmativamente, haciendo un gesto serio para respaldar todo lo que su otra mitad el otro muchacho decía. Cualquier persona normal, después de todo lo que acababa de escuchar se habría soltado a reír con muchas ganas pero después de tantos años haciendo lo mismo con Minho, poco a poco había aprendido a tener control sobre su cuerpo y no reír cuando cosas como esa ocurrían y por supuesto, a no molestarse cuando sus palabras eran puestas en duda y las de los demás no.

Termino de abrir la puerta y acomodarse un poco contra ella para dejar paso a los otros dos, "Oh, si. Lo dijeron en clase de pociones y herbología por dos años seguidos" agrego, para darle más trasfondo al asunto "y también puedes buscarlo en uno de los libros del Sr. Kim, ya sabes que me hizo leerlos todos durante mi primera semana". Y pues no, no había leído nada de eso en ningún libro, pero si había leído todos los libros posibles que habían en la tienda y esperaba que eso fuese suficiente para terminar de guiar a su hermano al baño perruno.

Sí, se acababa de ganar despertar con las cobijas congeladas por una semana mínimo, pero valía la pena. Siempre valía la pena, su hermano siempre lo dejaba muy fácil.

[Jaehyun Jung]

((Mi nuevo superpoder es desbloquear este thread, ¿quién necesita prenderle fuego a las cosas? XD))

Ya me imagino a Minho ojeroso al día siguiente, desvelado a causa de todas esas horas que no le ahorró Google. Y me da miedo, porque la gente con sed de venganza y sueño debe ser peor que la gente con sed de venganza que durmió bien. Suerte sacando tus exageradamente largas extremidades de debajo de esas cobijas, Jaehyun. Pero lo bailado nadie se lo quita.

Casi suelta una carcajada cuando su primo mayor pidió al menor que no mintiera -¿de verdad, hyung?-. Miró a su primo un par de segundos como quien mira a un infante a punto de sufrir un wedgie a manos del grupo de bullies de la escuela... luego recordó que técnicamente él era uno de los bullies y se llevó la mano a la boca para ocultar la sonrisa. Si tan solo Minho no les pusiera todo en bandeja de plata, él no se vería forzado a tomar estas oportunidades. "Pobre hyung, con lo que te gusta preocuparte" comentó con aire apenado, en voz bajita, porque no quería ser necesariamente escuchado mientras entraba al depósito, moviéndose como rayo para entrar antes que el apestoso y analizar el espacio con el que contaban para actuar.

[Minho Hwang]

((Mi superpoder es... Ah, no, cierto que yo no tengo. Seguro me perdí ese día porque me dieron mal las indicaciones ustedes :P))

Eso es verdad. No recuerdo muchos villanos de películas que quisiesen romper el mundo después de una noche de sueño placentero. Oh, pero Minho no era el villano, es cierto. Acá los malos eran los menores. Quizás si le cambiamos 'venganza' por 'justicia', Minho se quede más tranquilo cuando los escuche maldecir desde sus camas por la mañana.

"No se me va a quedar pegado nada" aseguró, quizás más para sí mismo que para los otros dos. La expresión que llevaba era una mezcla de preocupación, por los olores, y enojo, por sentir que nunca podía estar seguro de creerles, pero también saber que no podía darse el lujo de no creerles. Al menos no allí, lejos de sus libros. Y de los del Sr. Kim. Maldita sea su vida... ¿Tendría que leerse todos los libros de su casa Y los del Sr. Kim para estar seguro?
Cuando pasó por la puerta, se paró en el medio de la zona libre del depósito y se giró hacia su hermano y su primo. Odiaba no tener más opciones que esa. Realmente lo odiaba.

[Minwoo Hwang]

Ya lo dijo, Minho es un villano. ¡JA! Si el par de jovencitos no son más que unos angelitos, no rompían ni un plato. No entiendo por qué tanto odio.

¿Y saben quién escucho a Jaehyun? Ujum, ese mismo que estaba allí sosteniéndoles la puerta, el más bajito de los tres por supuesto. Lo que no tenía de altura se lo había ganado en un buen oído (y otras cosas que no vamos a mencionar). Y entonces si que le costo no soltarse a reír, menos mal que ya los otros dos habían entrado y podía girarse a cerrar la puerta y hacer que se reía en silencio. Total que hasta se imaginaba a su hermano leyendo cuanto libro se le cruzara por delante hasta no encontrar lo que se acababan de inventar.

Carraspeo y tras sacar su varita de los bolsillos de su uniforme y asegurar la puerta para que ningún muggle entrara de repente, volvió a girarse con una expresión seria. "Hyung, haremos todo lo posible para ayudarte con la peste pero debes poner de tu parte para que funcione" le dijo, intercambiando una mirada y un asentimiento con su primo para que comenzara él, le cedía los honores.

[Jaehyun Jung]

Minho, tú dices papa, yo digo tubérculo comestible... La conclusión es que todos estamos de acuerdo en que él es el villano y estos pobres inocentes ojalá lo castiguen sin desayuno (Minwoo) y sin su adorable presencia a primera hora de la mañana (Jaehyun).

Después de echar un rápido vistazo al espacio, determinó que sería más fácil limpiar el desastre después (con el buen humor proporcionado por la travesura), que hacer preparativos preventivos, como impermeabilizar el suelo con magia, o algo. Su mirada aterrizó en su primo mayor y el simple hecho de poder percibir lo poco encantado que estaba con la idea de que lo mojaran para des-apestarlo le causó una nueva oleada de risotadas que tuvo que reprimir. Igual, siendo sinceros, probablemente sí iban a ayudarlo a oler menos feo en realidad. ¿No? ¿No? ¿El jabón sería obligatorio para tener éxito bañándolo?

Por cierto, supongo que como Jaehyun todavía va con su ropa de calle muggle y suena a muy mala idea llevar la varita en el bolsillo del pantalón como si nada, debe ir cargando una mochila en la que guarda la evidencia de que es mago, misma que en ese momento se descolgó del hombro para sacar a su fiel compañera. Después dejó la mochila cerca de la puerta, porque cero ganas de que se salpicara de agua apestosa cuando Minho se sacudiera. Ah, no, no, que sigue siendo humano.

Cuando Minwoo le cedió los honores, Jaehyun decidió que su primo mayor ya había tenido suficiente tiempo para hacerse a la idea de lo que iba a suceder, así que las cosas mejor como arrancar un curita. Sin decir agua va ((tee hee)), literalmente, apuntó a varita hacia Minho y le aventó un chorro de agua (apuntando al pecho, pero obvio él es libre de moverse) cortesía de su Aguamenti no verbal. "¡Desapéstate!" ordenó, tremendamente serio.

[Minho Hwang]

Minho no fue tan previsor como Jaehyun con su bolso cruzado, así que recordó sacárselo solo unos segundos antes de que el chorro de agua le pegase de lleno en el pecho. Al revolear el bolso a un lado, hacia la pared de la puerta, hizo un recuento mental de las cosas que llevaba adentro: libros, cuaderno, una pluma (pero de las muggles, a la que se había acostumbrado ya, aunque le resultaba super incómoda por la forma tan corta y la diferencia de peso con las plumas-plumas)... Nada que se rompiese con el golpe, por suerte.

Cuando sintió que el agua ya le había empapado todas las capas de ropa del pecho y comenzó a sentir el frío en sus zonas más bajas (nada lindo que no pudiesen regular la temperatura del agua de las varitas), se dio vuelta. No pudo evitar el escalofrío que le dio al sentir el agua en la espalda.
"¡Está muy fría!" se quejó.
Los odiaba. Se las devolvería. Sabía que el olor no era culpa de su hermano y su primo, pero no tenía otras personas hacia las cuales dirigir su enojo, así que se las devolvería a ellos.