Soltando la sopa

[Aimee Daughtrey]

Sinceramente, ella no entendió nada raro con sus palabras porque yo no entendí nada raro, y a veces limito a mis personajes de esa manera, lo siento. Lo que sí pasó fue que enarcó una ceja, porque no se le había olvidado lo que él contestó cuando se conocieron sobre su estado civil. Lo que la hacía estar segura de que en una etapa de su vida, no sabía qué tan lejana, él definitivamente había tenido que rendirle cuentas a la persona con la que compartía el techo. Pero ese es el tipo de cosas que no puedes comentar súper casual la segunda o tercera vez que te encuentras con alguien, de modo que se quedó callada varios segundos, desviando la mirada a la puerta (porque era lo que estaba por ahí a su izquierda).
"¿Nunca viviste con un amigo, o un ex-compañero del colegio, algo así?" preguntó en un tono inofensivo. También era una pregunta que le daba chance de contestar como prefiriera, incluyendo un simple 'no'. Para que no la taches de entrometida.

[Kevin Broadmoor]

"No" respondió alzando los hombros, sin detenerse a pensar en alguna forma de ampliar la respuesta. Nunca había convivido como adulto con nadie que no fuera familia (es decir, con su hermano, y con su esposa) y ni siquiera se le había ocurrido pensar en ellos como housemates. Y en San Mungo había tenido una habitación para él solo, por más que le pesara.
"Ustedes son muy amigas, me imagino. ¿Como hermanas?" sugirió, tratando de entender el nivel de amistad con el que se manejaban. Y hasta algo se parecían, según lo que vio en las fotos, no como para hermanas pero... primas, quizás. No que la apariencia fuera relevante, claro.

[Aimee Daughtrey]

Inclinó la cabeza hacia la derecha y miró al techo, en plan de estar pensando seriamente cómo quería contestar. "Me pregunto si es como hermanas" reflexionó en voz alta. "Yo sólo tengo hermanos, y es muy distinto" agregó, ahora mirando a Kevin, porque eso ya era parte de su respuesta. "Es decir, los adoro, pero no sé si podría vivir con ellos otra vez". A diferencia de Kelsey, sus hermanos tendrían el refrigerador repleto de comida congelada en cajas, cervezas y refrescos. O por lo menos Etienne; Porter lo tendría vacío, con un queso en estado de descomposición en medio de la helada nada. Y el baño… por Merlín, el baño. Sacudió la cabeza, no sé si negando o como si quisiera espantar las imágenes mentales sugeridas por su cerebro.

[Kevin Broadmoor]

Él tampoco tenía hermanas, así que supuso que los dos tendrían que esperar a una segunda vida para enterarse qué tan distinto sería. Se le escapó una risa con el comentario de Aimee, girando la cabeza hacia un costado como esperando que ella no viera su expresión divertida, tapada con un puño cerca de la boca.
Bajó la mano y se rascó la barba brevemente. "No sé si eso significa que ellos son terribles, o es un comentario sobre los hombres en general" le dijo todavía con la cabeza girada, pero mirándola de soslayo.

[Aimee Daughtrey]

Se rió también, aunque a destiempo. "Iba a decir que sólo he vivido con ellos, pero es mentira, supongo". Porque Hogwarts. "Aunque no es exactamente lo mismo; en el castillo no compartíamos los baños, ni la cocina" agregó. Vivían todos compartiendo el mismo techo, pero bajo las reglas de adultos que, a diferencia de los padres de familia, tenían como misión hacerlos cumplir sin excepciones.
Mientras tanto, en otro lugar de Londres, sus pizzas están siendo preparadas, deliciosas y perfectas. Creí importante mencionarlo, antes de que a alguno le gruña el estómago.

[Kevin Broadmoor]

La risa de ella le causó más risa a él, una risa aliviada y relajada.
"Tiene sentido que no cuente como convivencia en serio si no se comparte el uso de la porcelana" comentó con todavía menos seriedad. Ojalá a ella no le parezca demasiado grosero, porque eso era lo más delicado que se podía decir en un vestuario de quidditch sin que te preguntaran tus compañeros si te pasaba tu novio a buscar para que te montes a otra escoba.
Me parece bien que me recuerdes lo de la pizza porque sino te volvía a invitar a que vayamos a tomar una sopa rara de un país que no sé marcar en un mapa.

[Aimee Daughtrey]

No encontró el comentario grosero, porque si quieres que te diga la verdad, creo que no lo entendí su mente se desconectó temporalmente de la conversación después de esa risa aliviada y relajada de Kevin. Por suerte no se le escapó la expresión babosa que iría bien con el momento, sino que sonrió como lo hace alguien que vio algo sumamente encantador, más que divertido. Igual, antes de que pasara mucho tiempo sin contestar, se aclaró la garganta por lo bajo. "Respondiendo a la pregunta" sí, esa que rodeó para visitar tres pueblos distintos antes de llegar al destino, "no creo que seamos como hermanas. Hay demasiado respeto" concluyó. Es decir, respetaban sus espacios, sus pertenencias, sus decisiones. No sonaba a algo que harían hermanas de verdad.

[Kevin Broadmoor]

-Demasiado respeto- repitió en su cabeza mientras la miraba, y dedujo que era más que lógico que las personas sintieran respeto por Aimee de solamente conocerla. Era muy hermosa, e inteligente, y probablemente eso se tradujera como respeto en algunos, y como intimidante en otros.
"Nunca está de más que te respeten" comentó mientras enderezaba la espalda, haciendo que sonara muy suavemente. "Especialmente si eso es sinónimo de un baño limpio" quizás lo que hacía falta era que Porter conviviera con alguien que pudiera intimidarlo lo suficiente como para mantener algo de orden en su hogar. El miedo no siempre era del todo malo.

[Aimee Daughtrey]

"Totalmente de acuerdo" respondió muy seria y asintiendo con la cabeza un par de veces, porque ella era 100% pro-respeto y pro-baños limpios.
Separó la cadera del mueble en el que se había estado apoyando, pero no avanzó en ninguna dirección. Creo que está esperando que Kevin le lea la mente (ja) y dé media vuelta para regresar a la sala, porque para eso había pasado semanas con Kelsey eligiendo muebles, para tener dónde sentarse con sus visitas en lugar de tenerlas de pie en el vestíbulo. Si el nivel de confianza fuera un poco más alto, habría estirado los brazos para ayudarlo a entender lo que quería (yo no lo describiría como 'empujar', pero es a idea general). Lástima que todavía no estaban ahí.

[Kevin Broadmoor]

La vida sería más sencilla si le pusieran una correa a las personas que visitan casas ajenas, así se los puede guiar sin tener que detener la conversación, ¿no? ¿...No? O sea, hay muchos más usos de esa correa, pero lo menciono con esa función en particular nada más.
La miró, y seguramente la hubiera seguido si ella se hubiera movido hacia la sala, pero como era la casa de ella (y de Kelsey, claro) se quedó en el lugar. Creo que dejó su vaso sobre el posavasos que apoyó en la mesita de la sala, y ya lo estaba empezando a extrañar de todos modos. "La próxima vez que hagan una fiesta alocada espero que me inviten" comentó en broma, porque le había quedado claro que a las dos les importaba demasiado el orden para hacer una fiesta así.

[Aimee Daughtrey]

Se le escapó una carcajada antes de que pudiera procesar que podría sonar grosera y aguantarse, pero no pudo evitarlo cuando se imaginó a Kevin perdiendo el control en una 'fiesta alocada'. Si me preguntas a mí, fue mejor eso a que se imaginara la versión de Kevin que seguramente había sido el centro de atención en verdaderas fiestas alocadas un par de décadas atrás, porque el buen comportamiento tiene límites frágiles. Lo miró, muy divertida con su imagen mental como para dejarla ir tan rápido. "Temo que sólo podré invitarte a reuniones tranquilas con snacks y bebidas saludables, pero eres bienvenido a sembrar el caos siempre y cuando me ayudes a limpiar al final" contestó risueña, ahora sí comenzando a caminar de regreso a la sala, rodeándolo.

[Kevin Broadmoor]

Siguió a Aimee primero con la mirada, y luego girando el cuerpo como si el de ella fuera un imán, para finalmente caminar unos pasos atrás de ella hacia la sala. La frase 'sembrar el caos' le causó gracia, así que se rió exhalando ruidosamente por la nariz, bajando la cabeza. No podía declarar que nunca había hecho tal cosa, aunque era más un recuerdo de sus días como jugador en el campo de quidditch que en alguna fiesta.

"No va a haber mucho para limpiar si la reunión tiene snacks y bebidas saludables" a menos que invitaran a alguien con alergia a las nueces y al citrus, levantó la cabeza para ver a Aimee "así que confirmo mi presencia desde ya". Y si justo cancelaban los demás invitados no sería un problema.