Quodpot vs. Quidditch

[Dmitriy Tsyolkovsky]

¿Te quejas del frío? Creo que tendré que llevarte un día a Durmstrang para que sepas lo que significa frío, aún con el sol a todo lo que da. Es lo bueno de venir de lo más alto de Europa, por lo menos llegar acá a Inglaterra es como veranear. Y hablando de quidditch, precisamente ese día, Dmitriy tenía propuesto ir al campo para ver el nivel de los equipos que tenía Hogwarts, porque quería entrar al equipo de la casa donde se hospedaba, o que lo había elegido, o lo que fuera que sea... porque todavía no entendía eso de las divisiones de las casas.

Desde abajo vio que las gradas no estaban muy pobladas, y subió. Estando arriba, se acercó gradualmente a la única persona que estaba sentada de ese lado y que, aparte, traía encima harta ropa puesta ¿no tenía calor? Lo reconoció de lejos, era uno de séptimo; y lo sabía por una clase que tomaron juntos. "Mucho calor ¿eh?" bromeó en un inglés bastante fluido pero con un acento marcado por el ruso, al tiempo que tomaba asiento a su lado. Dmitriy traía puesta una sudadera nada más, como si no le afectara el clima.

((Prefiero septiembre, sábado ¿no? para no traer uniforme XD))

[Dmitriy Tsyolkovsky]

Claro, los dedos son importantes cuando haces mucha actividad... If you know what I mean. Ok, posponemos la visita.

No importaba cómo le dijeran a Dmitriy [ˈdmʲitrʲɪj] ((Sólo hazle caso a la pronunciación del nombre, lo demás no va XD)), podían ponerle apodos si querían. A él no le importaban esas cosas porque... él lo hacía también. Sonrió por la descripción que le hizo Cloud: rudo hombre, digo ¿a quién no le gusta que le echen flores?, y al mismo tiempo turnó mirada entre el gryfjflafjfdaf y los jugadores de quidditch que se encontraban ahora en el aire. "¡Buena!" gritó con emoción al ver cómo uno de los cazadores lanzaba la quaffle a otro de sus compañeros, con algo de dificultad. "¿Los viste?" ¿qué iba a saber Dmitriy que Cloud no era aficionado? ¿Qué estaba haciendo ahí, entonces?

[Dmitriy Tsyolkovsky]

.................pfffff. Pero bueno, te creo, con trabajos pronuncia Dmitriy las casas de Hogwarts. Aunque ahora optó por asociar palabras y verbos para poder aprenderse los nombres. Era el colmo no saberlos.

El manifiesto de Cloud lo hizo girarse hacia él con asombro en su rostro. "Sí" contestó sonriente (porque eso de que Durmstrang = seriedad, con Dmitriy se rompía la regla) "¿por qué, tú no?", la jugadora había lanzado la quaffle antes de que el equipo contrario llegara y se la quitara, lo cual había hecho que lanzaran entre ellos la pelota para marear a sus adversos.

[Dmitriy Tsyolkovsky]

¿El quodpot deporte de hombres? ¿Nada más porque explota si no llega al aro? Uy, que machos. Yo digo que es la misma gata, no más que revolcada. Dmitriy lo volteó a ver con suspicacia, como quien no se cree lo que acaba de escuchar. "¿Y qué se supone que juegan los hombres?" ¿Guerra de trolls? ¿Quién avienta la orina más lejos? ¡O SEA! Frunció el ceño risueño, esperando un SUPER deporte que le haga abrir los ojos y decir ¡mis respetos! o algo así.

Repitieron una jugada los cazadores a la cual Dmitriy, aprovechando la pausa, miró de reojo (¡no iba a perderse el juego tampoco!)

[Dmitriy Tsyolkovsky]

Apuesto tres galeones. Ok, no. Pues no sé a qué tipo de gente te refieras pero en Durmstrang cuando enseñan Quidditch, enseñan teoría respecto a otros deportes; no se juegan, pero sabemos cómo. En Hogwarts, no sé. Supongo que sí, una escuela de alto nivel académico no permitiría un mar de ignorancia en conocimientos básicos. "Ajá" onomatopeya de su contestación. Dmitriy tenía nociones generales del juego, ¿pero que exista una marcada división de género? No lo creía posible, y para zanjar el tema porque no se iba a poner a debatir eso, lo cambió: "Así que eres de Salem, ¿cómo es la escuela, muy grande? Sólo he visto fotos", no se había topado con chicas de Salem todavía como para platicar con ellas, o... chicos. Y para hablar maravillas del Quodpot, supuso que tendrían un estadio enorme, por lo tanto su táctica era conocer primero la escuela y después adentrarse al porqué de la tan grande afición por ese deporte norteamericano.

[Dmitriy Tsyolkovsky]

Tuvo que reír por el comentario final, es que ¿en qué escuela se respetaba, la verdad? Durmstrang tampoco era la excepción. Lo que sí es que escuchó que en Hogwarts los hombres no podían entrar a las habitaciones de las mujeres, pero viceversa sí (¡eso era todavía más fácil!) "En todos lados se cuecen habas", se acomodó en su lugar utilizando la grada de atrás como respaldo. "En Durmstrang es igual" pronunció correctamente el nombre del Instituto para que se lo aprendiera el americano. Y no sé por qué, no le pregunten, pero se le antojó la manzana que comía Cloud.

[Dmitriy Tsyolkovsky]

Hmm, no le hubieras sacado el tema de las chicas a Dmitriy porque es como sacarle un videojuego a un chico de 10 años. Sonrió de oreja a oreja reacomodándose en su lugar y olvidándose de la manzana. "Veamos, hay de todo tipo. Desde las más fáciles hasta las más difíciles y amargadas", recordó aquella fiesta a finales de su sexto grado donde muchas virgencitas resultaron ser no tan... vírgenes (lo comprobó él mismo). Miró nuevamente el pase de los cazadores y admiró el gol que acababan de meter. "¡Bien!". Quidditch: distracción al 100%.

[Dmitriy Tsyolkovsky]

Deportista OP.
No iba a terminar su frase con algo como frígidas porque no es adivino, pero un "¿apaticas?" no es tan malo tampoco, ¿no? Rió por el comentario, Dmitriy muy relajado como siempre, viendo cómo los jugadores regresaban a su puesto y otros volaban hacia el centro. "Pues..., son serias y toscas algunas, pero como en todos lados", já como si fuera todo un experto. Me cae que no sé cómo Cloud le creé.

Estaba emocionado porque era la primera vez que veía un entrenamiento entre equipos 'ingleses', digo, no era como estar viendo profesionales, pero era entretenido, de verdad.

[Dmitriy Tsyolkovsky]

Negó con la cabeza cuando le ofreció manzana, se le antojaba pero no tanto y después sonrió de oreja a oreja cuando comentó lo del intercambio. "Sí" alargó la última vocal. "Hagamos que suceda, igual me he topado antes contigo en el Gran Salón ¿no?" que no le haya hablado es otra cosa "o en clases... ahí podría suceder también". Luego giró hacia el partido nuevamente, ahora los que se encontraban en las orillas buscaban cómo meterse de nuevo al juego, acababan de lanzar la quaffle. "Supongo que para no estar tan lejos unos de otros al momento de los pases. ¿En el Quodpot no hacen eso?", bieeen, habían vuelto al tema. No sé por qué pero le interesaba saber más de ese deporte aunque no lo fuera a jugar nunca en su vida. A menos que reprobara en Hogwarts y tuviera que repetir el año como intercambio en Salem... </fantasías 1.0>

[Dmitriy Tsyolkovsky]

Asintió respecto a estar juntos en Transformaciones, sin embargo, la onomatopeya representada por Cloud del BOOM le causó un poco de gracia, sonriendo ampliamente y regresando la mirada a los jugadores. "¿En serio?" preguntó sorprendido porque la verdad nunca había visto un juego de esos en acción (no habían torneos de esos a nivel mundial, ¿o sí?) "Me gustaría ver cómo hace boom eso que dices" confesó al tiempo que regresaba la vista a Cloud. "¿Y qué se supone que hacen después de que explota? Porque supongo que ha de estar formada la pelota por una consistencia asquerosa y pegajosa" supuso, digo, el pobre sólo estaba inventando.

[Dmitriy Tsyolkovsky]

La explicación del chico de Salem fue tan buena que no parpadeó siquiera un segundo. Estaba completamente convencido de que el Quodpot era OTRA ONDA totalmente distinta al Quidditch. Es decir, desde que explota ya eran otros esfuerzos, otras emocionas, otro estrés... "Me gusta tu idea" lo señaló con el dedo índice para que quedara claro que estaba de acuerdo con él. "Si consigues juntar a tus compañeros, estaré gustoso en participar". De puros alumnos de intercambio de Salem que jueguen Quodpot, ¿se podía casi formar un equipo, no? Dmitriy podría rellenar.

[Dmitriy Tsyolkovsky]

Sonrió a modo de aceptación de la propuesta para jugar Quodpot algún día del año, pero la felicitación de Cloud le hizo girar bruscamente hacia el campo para encontrar ahora que los jugadores volvían a sus posiciones. -Mmm- se lo había perdido y quería saber qué había pasado tan bueno como para que Cloud gritara de esa forma. "¿Qué, qué pasó?" preguntó "¿Qué viste?" ¿un pase?, ¿un golpe?, ¿un tiro al aro? ¿Qué era? Siguió mirando, expectante, hacia el campo y principalmente a los cazadores. Tenía que verlos practicar porque si quería ingresar al equipo de la casa amarilla, debía al menos saber contra quienes se enfrentaría.

[Dmitriy Tsyolkovsky]

Er... yo que tú no hacía señas como esas con las palmas. Puedes dar entrada al cábula de Dmitriy para que te haga burlas vulgares respecto a partes del cuerpo del hombre. De hecho, Dmitriy vio a Cloud con una sonrisa reprimida porque no quería reír frente a él (¡y todavía dijo que le gustó! Pff). No quería explicar el porqué si se reía. ¿Qué tal si en Estados Unidos los chistes eran completamente diferentes a los de Rusia? "Oh" comentó de forma condescendiente, porque no tenía realmente nada que decir al respecto, no había visto la jugada. "Me gusta la golpeadora de allá" se refería a Ligeia Lynn. La había visto un par de veces en la sala común pero no tantas como para acercarse a platicar con ella.

[Dmitriy Tsyolkovsky]

No te lo voy a negar: a las chicas les gustaba viborear a otras chicas. Y creo que terminaban hablando más de ellas que los mismos hombres ¿a que no?

Había visto jugar a la hufflepuff desde rato atrás y no precisamente admiraba sus movimientos con la escoba, if you know what I mean. "Se le ve un muy buen trasero desde aquí" comentó muy quitado de la pena como si fuera tan normal hablar de traseros. Al fin que era una plática normal de hombres. "Y a la que está de guardián allá al fondo también", se refería a Anne Summers. Cada que decía una frase asentía y retorcía el labio cual meme.

Ojalá pudiera entrar al equipo de Hufflepuff...

[Dmitriy Tsyolkovsky]

Creo que todos los hombres (o casi todos) tienen ese gusto por las tetas y los traseros por igual, el chiste acá era el reto de poder tocarlos, no nada más verlos.
Se reacomodó sobre su asiento y sintió que su estómago empezó a gruñirle, creo que ya iba siendo hora de retirarse para darle de comer a la solitaria. "Oh, sí, eso también", se llevó una mano al estómago para sobarlo, amagando con ponerse de pie.