Entre estantes

[Basil Markinswell]

Basil se cruzó de brazos y la miró sonriendo levemente. Siempre le habían gustado las cosas por las que no tenía que esforzarse y, aunque en esos momentos estaba en pleno debate interno, intentando cambiar esa parte de su forma de ser, le agradaba no tener que hacerlo con Alessa. Le quitaba peso de encima. En un momento donde sentía que todos podían exigirle cosas y que estaba en falta con su familia, con Joanne y con sus amigos, Alessa parecía ser la única que no esperaba nada de él y era liberador. Podía ser de cualquier manera con ella y todo igual estaría bien.

Asintió una vez con la cabeza, para que supiera que lo tendría en cuenta, mientras la observaba tomar su helado, sintiendo que las ganas seguían intactas. Quizás pudiera sorprenderla cuando la besara con bastante más desesperación de la habitual en el callejón.

((Cerramos este?))

[Basil Markinswell]

Observó la mano extendida de Alessa y luego subió la mirada hacia su rostro a medida que se le iba formando una sonrisa por el descaro de la chica. Por esas cosas le gustaba la rarita. Contuvo una risa y sólo tomó su mano para levantarse juntos y abandonar la heladería.
"Como usted quiera, Capitana" respondió bromeando y usando el apodo que ella usaba con él, porque tenía la sospecha de que esa tarde era la chica la que estaba al mando.

((Cerrado))