Excusas

[Maggie Grimbale]

Cuando el verano terminó las cartas comenzaron a ir y venir con frecuencia, Maggie nunca había visitado tanto la lechucería del castillo como en el año anterior. Para Navidad, la intensidad del correo entre Rainier y ella había disminuido pero habían compartido unos días de las vacaciones e incluso se habían visto en el pueblo de Hogsmeade en el momento favorito de Maggie, cuando estaba todo nevado. Sin embargo, ya había llegado la primavera y las cartas eran cada vez más esporádicas y las promesas de verse también. La última vez Rainier no había podido porque le habían cambiado el día de descanso en el trabajo y nunca coincidía en sábado para que pudieran verse desde temprano en Hogsmeade. Sin embargo, el chico había jurado que en Abril allí estaría... y lo que Maggie recibió fue una carta pidiendo disculpas y enviándole unas flores como si compensaran que una estúpida pelea de boxeo había sido más importante que verse. Sí, era una gran oportunidad y Maggie se habría alegrado si no hubiera coincidido con su salida a Hogsmeade. En ese momento odiaba al boxeo y se sentía completamente desilusionada de Rainier.

Quería estar un momento a solas antes de buscar a Gretchen y Alice y explicarles que su novio tampoco vendría ese día. Ya hasta le daba vergüenza tener que decirles que todo, el maquillaje, la ropa y las despedidas porque pasarían el día separadas habían sido en vano. Tenía la carta arrugada en un bolsillo de su campera y las flores en la mano, mirándolas como hipnotizada, intentando que se le pase el enojo y la tristeza.
Reservado

[Nigel Sinclair]

Qué bueno que iban a la escuela en Escocia, porque Nigel se imaginaba que las cartas de Rainier escritas en crayón se empezarían a pegar unas con las otras si estuvieran en un clima más caluroso.

Tenía una bolsita con todas las monedas que le habían sobrado del año en el bolsillo, porque había ido hasta Hogsmeade con el propósito de comprarle algo a Bonnie May. Era su última oportunidad de, inspirado por un comentario de April unos años atrás, aprovechar a tratar de quedar bien antes de que Bonnie ingresara a Hogwarts y él dejara el colegio. No había sido buen hermano desde que arrancó la adolescencia.

"Ah, bueno, qué producción" dijo en tono jocoso cuando la vio. Prometo que no está tratando de ofenderla, pero le salen así las cosas cuando habla con ella. Igual solamente pensaba intercambiar un par de palabras y dejarla en paz, porque parecía que la Gryffindor tenía grandes planes para ese día.

[Maggie Grimbale]

Daba igual quién le hubiera hablado en ese momento, si Nigel a quien no soportaba o Winston a quien consideraba un amigo, el tono y las palabras la habían sacado de sus pensamientos y le resultaban molestas. Levantó la cabeza y tardó un instante en reconocer a Nigel sin el uniforme del colegio. Todos se veían diferentes cuando iban a Hogsmeade.
Maggie frunció levemente el ceño, sin entender que eso podía pretender ser un halago a cómo estaba vestida y maquillada. No importaba en ese momento. "Quiero estar sola" dijo tampoco pretendiendo ofenderlo, era un pedido sincero porque necesitaba que nadie le hablara por unos minutos. Sentía que tenía mucho en qué pensar y le iba a llevar un rato procesar la tristeza y dejar de sentirse así. Claro, estar sentada en una de las calles principales del pueblo no ayudaba mucho a su plan de estar en paz.

[Nigel Sinclair]

La sonrisa desapareció cuando la escuchó. Se esperaba que lo mandara a cagar (ya sea con buena onda o no, cualquiera sería algo normal), o que ella disparara con algo que iniciaría el breve intercambio hasta que cada uno fuera a hacer lo suyo en Hogsmeade. Pero no se esperaba que le dijera eso, con esa expresión, vestida así. Nada encajaba.

Miró a Maggie unos momentos, frunciendo el entrecejo, detenido frente a ella. Una persona normal hubiera continuado caminando, o un buen amigo le hubiera ofrecido un oído, pero Nigel no era ninguna de esas dos cosas. -¿Qué onda?- miró alrededor, como buscando la explicación ilustrada.

[Maggie Grimbale]

Volvió a bajar la cabeza, esperando ansiosa que Nigel se fuera para poder volver a sentirse enojada con Rainier y con ella misma, a hacerse la cabeza pensando en lo bien que la podrían haber pasado ese día juntos, y que ahora le parecían un montón de horas libres en el mismo pueblo de siempre, con los mismos locales de siempre, incluso Dervish y Banges donde habían comenzado a hablar con Rainier.

Pero su compañero no se iba y eso la hizo soltar un suspiro de cansancio, como queriendo liberarse de todo lo que sentía en ese momento. Maggie sabía que podía resultar incomprensible para los que pasaran por la calle que ella quisiera ser invisible y que nadie entendería que hiciera tanto escándalo porque su novio la dejó plantada pero así era la adolescencia. Tenía ganas de ponerse de pie e irse a buscar un lugar en el que pudiera estar sola, pero le dio unos segundos más a Nigel para irse.

[Nigel Sinclair]

Como no vio nada alrededor que explicara simplemente lo que estaba pasando, volvió a ver a Maggie. Decidió sentarse al lado de ella, porque imaginaba que el problema iba a ser una estupidez: que no se había delineado los ojos lo suficiente, que se le rompió una uña, que alguna piba del colegio le gritó 'zorra'.

"Dale, nadie viene hasta acá y vestido así para estar solo. Te ayudo si querés" ofreció, rodando los ojos. Es que él nunca se imaginaba que Maggie pudiera tener sentimientos, problemas, o cosas así. Ella, tan perfectita, seguro que no podía pasarla mal en serio.

[Maggie Grimbale]

Que siguiera remarcando que estaba vestida de manera llamativa la hacía sentir peor, se sentía desubicada, ridícula, como si tuviera un cartel gigante en la cabeza que iba a contarle a todos sus compañeros que Rainier la había dejado en banda. Por primera vez en su vida no quería llamar la atención y padecía hacerlo.
Apretó las flores, nerviosa, al ver que se sentaba a su lado y, aunque debería haberla terminado de sacar de quicio, por un instante agradeció el gesto. Lo miró confundida ¿en qué iba a poder ayudarla? ¿iba a aparecerse en Manchester y obligarlo a punta de varita a Rainier a ir a Hogsmeade?
"No podés" le contestó "Ya se me va a pasar..." además lo único que le había pedido, que era estar sola, ya no lo había cumplido, así que dudaba de qué más podía ser de ayuda Nigel. Se sentía incómoda y no quería darle demasiada información, presentía que iba a terminar burlándose de ella.

[Nigel Sinclair]

-Aaah- pensó, como si acabara de entender todo. Inmediatamente asumió que lo que le pasaba a Maggie era algo físico: quizás le había agarrado diarrea antes de salir y todavía se sentía mal, o le vino, o algo por el estilo. Tal vez lo que necesitaba era que la entretuvieran hasta recomponerse. Iba a hacer su buena acción de la década hoy.

"¿Tenés idea de qué se le puede comprar a una nena de diez, once años?" preguntó, mirando al frente. Siempre le daba curiosidad imaginar lo que debía ser Hogsmeade los días de semana, porque se lo imaginaba re desierto. Seguro que era re aburrido vivir ahí.

[Maggie Grimbale]

Qué bellas las opciones que barajaba Nigel. Menos mal que Maggie no podía leerle la mente.

La pregunta la sorprendió, creyó que iba a decir alguna pavada más o iba a ofenderse porque ella pensaba que no la podía ayudar. Maggie parpadeó y se quedo pensando unos segundos. Tenía la mente en otro lado y necesitaba tiempo para volver a la realidad. "Bromas de Zonko... y dulces de Honeydukes" contestó con simpleza, como que era re obvio. Recién cayó en que era Nigel el que le hacía la pregunta y lo miró extrañada "¿Tienes una hermana pequeña?" le preguntó entonces.

[Nigel Sinclair]

-Bromas de Zonko...- pensó, aunque no estaba seguro de que fuera una buena idea en el caso particular de Bonnie May, porque no tardó nada en imaginársela plantando todas las bromas que le compró en el cuarto de Nigel. Había que buscar un enemigo en común con esa chica.

Miró a Maggie, alzando una ceja. "Tengo dos" contestó, y no es que creyera que todo el mundo tenía que saber sobre su vida, pero por alguna razón se había imaginado que era obvio que al menos tenía una. Más evidencia de que era un hermano sorete.

[Maggie Grimbale]

No eran exactamente cercanos con ella como para que supiera que tenía hermanas y menos tan pequeñas. Además Nigel no le parecía el tipo de chico que fuera un hermano mayor y que encima hacía regalos. Al final su compañero podía ser una caja de sorpresas.
Maggie alzó las cejas por la nueva información. "También puedes regalarle algo de ropa o unos aritos" le tiró más ideas aunque no sabía si le serían de ayuda "Depende de cuánto dinero tengas para gastar y de qué le guste" se llevó una mano al pelo para quitárselo de la cara, algo molesta con el peinado que tenía "¿Es el cumpleaños o algo?"

[Nigel Sinclair]

Pero adentro de la caja la única sorpresa es que estaba llena de porquerías también. Yo diría que Maggie se ponga guantes descartables antes de revisar esa caja de sorpresas.

Asintió levemente con la cabeza, considerando la idea de los aritos porque sonaba a que eran baratos y que quizás serían una buena forma de bienvenirla al mundo adolescente que sería Hogwarts. "No, es que como ya estamos por egresar" la miró "y ella está por entrar, me queda poco tiempo para tratar de impresionarla con algo" admitió alzando los hombros. ¿Era el cumpleaños de Maggie, y por eso sugirió el cumpleaños? ¿Y por eso tenía flores? ¿La habían dejado afuera porque era una fiesta sorpresa? Cada segundo en el que ella no explicaba lo que pasaba, él imaginaba otros escenarios.

[Maggie Grimbale]

Lo escuchó y no pudo evitar soltar un "Wow". Así, cortito y sorprendido. Maggie sonrió sin despegar los labios "No te imaginaba intentando tener un gesto así..." sabía que Nigel podía ofenderse pero era la realidad, de todas maneras no debería tomarlo personal, después del todo Maggie casi no lo conocía "Si quieres te puedo acompañar a comprarle el regalo" le ofreció porque no tenía nada que hacer y era mejor tomarse un rato más antes de buscar a sus amigas.
Quizás podría inventar que Rainier apareció pero se tuvo que ir temprano... no, mejor no. No servía para mentirle a sus propias amigas, no tenía sentido con lo mal que se sentiría y con la posible pelea por pergamino que iba a mantener con Rainier apenas pudiera escribirle. O no, mejor no le escribía nunca más para hacerle pagar un poquito de lo que ella sentía en ese momento. No sé, su cabeza no estaba muy lúcida esa mañana.

[Nigel Sinclair]

Totalmente pensó que Maggie lo estaba cargando con ese 'wow', así que puso los ojos en blanco con una sonrisa porque sí, él ya sabe que no está bueno haberse colgado siete años y querer enmendarlo ahora, a último momento. Es genial que ellos dos tengan interacciones reales, pero que Nigel flashee otros significados a las cosas.

"Nah, todo bien" le dijo, poniendo la mano en horizontal con la palma en alto y moviéndola en dirección a ella, como para señalarla toda. "Hacé lo tuyo tranquila, ya con esas pistas que me diste quizás encuentro algo" sonrió de lado.

[Maggie Grimbale]

Quizás ella se había perdido el detalle de que durante todos los años que llevaba en Hogwarts nunca le había llevado nada de Hogsmeade a sus hermanas, pero como no tenía hermanos cualquier detalle le parecía curioso o bueno, aunque viniera de Nigel. O mejor dicho, especialmente si venía de Nigel.

Hizo una mueca con los labios cuando escuchó el 'hacé lo tuyo'. "No.. no tengo nada para hacer" le dijo poniéndose seria y bajando la mirada a las flores de nuevo. ¿Valía la pena quedárselas? ¿O mejor las tiraba? Se sentía mal por pensar en echarlas a la basura pero en ese momento le daban bronca, sentía que estaban ahí intentando comprar su perdón y ella no quería flores, quería a Rainier ahí.