Cita de ciegos.. o algo asi... // Madam Pudipie

[Bree Northwood]

Lo cierto es que Bree había recibido todos los regalos de la semana encantadísima, con sonrisas amplias muy breves porque tenía que esconder lo genial que se sentía que la trataran como ella consideraba que se merecía. ¡Por fin había justicia en el mundo!
Llegó un poquito tarde (a propósito, porque ella quería hacerse desear, pobrecita) a la casa de té de Madam Puddifoot y miró alrededor buscando, muy errada, a Seth con la vista. Quizás era necesario aclarar que Bree había recibido los regalos pero jamás se había dignado a abrir las tarjetas o leerlas, porque de lo contrario no hubiera tardado demasiado en darse cuenta que esas iniciales eran sospechosamente idénticas al apodo Jean Paul, su compañero de otra casa.
Ella quería irse casi que disfrazada a la cita: un vestido corto, o ajustado, o algo con mucho escote... pero terminó cediendo a las sabias palabras de una compañera que le eligió algo más digno. Se quedó parada en la puerta del local, recorriendo cada mesa con la mirada buscando a un Slytherin que probablemente no iba a encontrar allí.

[Bree Northwood]

-...¿Y?- se preguntó, haciendo contacto visual con el Hufflepuff pero enseguida girándose para ver hacia afuera por el vidrio de la puerta de entrada. ¡Ella estaba tan segura de que había ido lo suficientemente tarde como para que él no fuera hacerla esperar! Pero si se trataba de Seth, como ella había asumido con ese versito de 'un amigo quiere salir contigo' que no le había creído ni de broma, era capaz. Era capaz de llegar tarde y hacerla quedar mal. Se estaba tentando de darse media vuelta e irse, pero algo le tenía que decir a la gente que la había visto recibir cosas y salir vestida así de niña disfrazada y maquillada como adulta, no podía pasar tanta vergüenza.
Volvió a ver hacia dentro del local, su expresión orgullosa lentamente desvaneciéndose por una de preocupación. Si la dejaba plantada pensaba no volver a hablarle jamás en la vida y no descansar hasta que probara una humillación igual o superior a la que podría pasar ella.

[Bree Northwood]

No sé si estuvo parada sin moverse tanto tiempo porque quizás llamaban a un medimago a que se la lleven en estado catatónico, pero sí estuvo parada pasando la vista de mesa en mesa por si la vista le estaba jugando algún truco. Lo que notó fue una adición a la mesa donde estaba su compañero de año, y alzó las cejas. El papel era idéntico a los regalos que tanto había adorado recibir toda la semana.
Caminó con pretendida seguridad hasta donde él se encontraba sentado, aunque por dentro estaba llena de dudas. "¿Tú me estuviste mandando los regalos?" preguntó cuando estuvo lo suficientemente cerca de él. Se salteó los saludos y demás, necesitaba entender lo que pasaba primero.

[Bree Northwood]

No es que a Bree le faltara educación, si es que por ahí va la muy evidente insinuación, sino que era una chica de quince años que no pensaba que fuera necesario tratar con tanta cordialidad a un compañero a quien conocía hace tantos años. Pero bueno, la educación o como se perciba es muy subjetivo, supongo.
Tomó asiento, mirando a Jean Paul y luego a la cajita que estaba sobre la mesa. Sí, era el mismo envoltorio. No sabía a qué responder primero, porque ella también tenía preguntas que quería hacer, pero supuso que le tocaba dar el brazo a torcer por el momento. "¿Qué estás tomando tú?" preguntó, volviendo a mirarlo. No entendía nada.

[Bree Northwood]

Captó un poco lo que pasaba cuando dijo que la había esperado. En vez de sentirse triste, sintió una profunda ira... no hacia el Hufflepuff, quien no tenía culpa alguna, sino por Seth. Y ahora, en venganza, haría su mejor esfuerzo para que ambos al menos la pasaran bien.
-No traje nada- recordó, asumiendo que era Seth quien la esperaba y con quien no sentiría la más mínima culpa sacándole hasta el último knut. "Solamente el té, gracias" miró a la mesera con una sonrisa y esperó que se retirara antes de mirar a su compañero de mesa. Si le preguntaba alegaría que no tenía hambre, todavía estaba tratando de procesar la situación.

[Bree Northwood]

Bree había abierto la boca y la cerró cuando se dio cuenta que no iba a haber lugar a sus comentarios (o exigencias, como sería más adecuado catalogar a las cosas que solían salir de su boca). Pero debía haber paz, y ella tendría que estar en su mejor comportamiento, porque primero muerta a dejar que Seth les arruinara el día a los dos.
"No, está bien" le dijo, tratando de sonreír. Tampoco quería ser falsa, así que dijo un "Está bien que hagas cosas así cuando estás nervioso, gracias" aclaró, porque no le iba a dar gracia si él la mandoneaba alguna vez. Apoyó los antebrazos sobre el borde de la mesa y entrelazó los dedos de las manos, mirándolo con curiosidad.

[Bree Northwood]

Se le escapó una risa con la pregunta de él.
"Bien, bien, en una cita a ciegas, aparentemente" le dijo muy chistosa ella, poniendo su granito de arena tratando de que la situación fuera menos incómoda para ambos. Se preguntaba internamente si quizás Jean Paul estaba esperando a alguien que no fuera ella, que por eso él estaba tan nervioso, y que la maldad de Seth era igual para ellos. Esperaba que no, también, porque ella quería ser especial en ese sentido también. "¿Tú, qué tan incómodo estás del uno al diez?" le dijo, esperando sinceridad y alzando una ceja con una mueca de sonrsa en la boca.

[Bree Northwood]

Dejó que las palabras de Jean Paul le llenaran el ego, mirándolo con una sonrisa controlada en los labios, sin mostrarle los dientes. Obviamente se suponía que ella debería sonrojarse y negarlo, pero a Bree le encantaba amigarse con su ego y ni siquiera fingir sorpresa con los halagos.
"¿Esperabas en realidad a una chica fea?" preguntó alzando una ceja, porque de paso quería saber si él había sido tan engañado como ella. Había muchas cosas que quería saber, pero al menos planeaba en divertirse mientras tanto, durante el tiempo que fuera posible.

[Bree Northwood]

Mientras más hablaba Jean Paul, más cosas quería preguntarle. Ya encontraría momentos para ir sacando cada tema y saciarse, pero requeriría paciencia de su parte. Una de las muchas virtudes que Bree no poseía, pero al menos él le estaba dando la chance de practicar.

"Claro que esperaba que fuera él" le dijo sorprendida por la pregunta. "Pensaba sentarme frente a su cara amargada y pedir todo lo del menú y comer media galletita" le dijo con aire de superación, como para que no se sintiera mal. No era la completa verdad, pero todo lo que había dicho era cierto.

[Bree Northwood]

Alzó una ceja y lo miró, sintiendo un gran cambio entre el entusiasmo previo a su respuesta y la más reciente. ¿Le molestaba que no estuviera abusándose de la bondad financiera de él como pensaba hacerlo con Seth?
"Cabreada es una palabra muy desagradable, Jean Paul" porque primero muerta a llamarlo por el apodo. "¿No hay un animal más lindo para compararme?" rió, tratando de ver qué tan enojado estaba él y quizás eventualmente descubrir porqué. ¿Quizás estaba molesto pensando en la chica esa que mencionó antes?

[Bree Northwood]

Captó en entender lo que él estaba diciéndole, hasta que lentamente unió los cabos. ¿Hablaba sobre el león de peluche que le había regalado, cierto?
"Fue todo muy lindo" le aseguró sin saber porqué estaba casi que consolándolo. Desenlazó los dedos y estiró una mano para darle una palmadita en el brazo. "¿Te hice sentir mal por algo que hice o dije?" preguntó, porque quería saber si quizás había sido cruel con él sin darse cuenta. No se daba cuenta de las cosas que pasaban por la cabeza de él, tampoco sabría reaccionar correctamente si lo supiera.

[Bree Northwood]

Se rió despreocupadamente, pasándose una mano por el hombro para levantar un mechón de cabello y tirarlo hacia la espalda.
"Está bien que no hayas buscado nada, es como que estamos casi en igualdad de condiciones" después de todo no es que ella hubiera pensado en investigarlo. "Pero no sé qué contarte, no soy una persona muy interesante" mintió, ella se creía interesantísima "¿qué cosas crees interesantes de ti mismo?" curioseó. Por algo Seth debía haberla juntado con Jean Paul, ¿tal vez no era por maldad sino porque veía alguna conexión que ninguno de los dos había notado?

[Bree Northwood]

-Paciente...- pensó, ¿quizás Seth había pensado que los opuestos se atraerían? Porque Bree, si algo carecía, era de paciencia. Era caprichosa y mandona, aunque a veces hacía esfuerzos por ser mejor persona.
"Depende, pero supongo que sí, que bailar me parece divertido" le dijo mientras analizaba lo que él le contaba. Le parecía tan inusual que a un chico le gustara bailar que le causaba curiosidad (¿bailaría el waltz, o pop, o qué? Era un misterio interesante). "A mí me gusta más cantar, pero va de la mano con bailar" sí, a ella le gustaba cantar, pero cantar para que todos se callen y la escuchen emocionados, sin hacer ni un ruido.

[Bree Northwood]

"No te podría decir si canto tan bien" que conste que solamente no lo podía decir, pero totalmente podía creer fervientemente en que su voz era como el canto de las sirenas come-hombres "pero te aseguro que no me da vergüenza" explicó.
"¿Qué cosas bailas? Quizás puedo cantar y tú bailas" fue en broma, porque no podía imaginarse la situación en serio. Quizás si algún día quedaban varados y a Jean Paul dejaban de pasarle la manutención, y necesitaban pagarse el boleto de regreso a donde sea que fueran.

[Bree Northwood]

Se rió con el comentario de él, quizás por imaginárselos a ambos tirándose a una piscina llena de galletas como si fueran billetes de cien libras. Las monedas de oros o galleones serían demasiado mortales incluso en su imaginación.
"Bridget" respondió contenta, porque a ella le gustaba tanto su apodo como su nombre completo. "¿Te resulta demasiado atrevido decirme Bree?" bromeó alzando las cejas y poniendo cara de sorpresa exagerada, todo en plan de broma.