Guerra campal

[Jesse Sacheverell]

Salió del baño agitando la pierna derecha, donde se podían apreciar pequeñas gotitas sobre el pantalón que hacían que la tela se viera de un color más oscura de lo que era. Pero no te preocupes, Lauren, porque no era pis. No, yo sé que uno pensaría que es pis, pero nada que ver. Era agua. Es más, ¿ves esas manchas pseudo verticales a los lados del pantalón, un poco menos visibles? Esa es evidencia de que Jesse se había secado las manos. Porque se las lavó. Con agua. Después de hacer pis.

[Jesse Sacheverell]

Ni siquiera se había dado cuenta que Lauren había estado cerca de los baños, por lo que cuando ella le habló de tan cerca se giró hacia el lado opuesto por impulso -????-.
"¿Q-?" se llevó una mano al pecho cuando la vió. "¡Lorena!" exclamó como saludo a su casi asesina. Porque eso había sido un intento de asesinato, no cabía duda.

[Jesse Sacheverell]

Creo que a Lexie le daría mucho gusto saber no solamente que puede llevarse mi esqueleto cuando muera, sino que también soy el usuario 666 del foro. ¿Así o más perfecto?
"¿Por qué intentabas matarme de un susto hoy, bichita de luz?" preguntó. Claro que luciérnaga sonaba mejor, pero a la hora de seguir con los apodos ridículos usar la palabra bicho con cariño era de lo más bizarre.

[Jesse Sacheverell]

No, no, Lexie se queda con mi calavera, pero Jesse vivo (y Jesse versión fantasma) siguen totalmente disponibles para quienes lo quieran en su vida. De última lo cortan en pedacitos y ya, todos felices.
"Obvio, siempre tengo tiempo para mi pelusita de ombligo preferida" confirmó mirándola con una sonrisa. "A menos que sea para hacer trabajos de aritmancia" agregó, enseriándose.

[Jesse Sacheverell]

-¡!- ¿Era esa una invitación lo que escuchaban sus oídos? La verdad es que estaba sorprendido, porque no se lo esperaba de Lauren, y si le hubiera tocado sospechar una invitación sus fichas hubieran ido más hacia Ravenclaw que Hufflepuff, pero bienvenida sea.
La miró de reojo con una sonrisa "¿Toda la comida que pueda guardar en mis mejillas para el invierno?" preguntó, como cersiorándose de que iba a poder seguir con su rol de ardilla.

[Jesse Sacheverell]

Estaba riéndose por la oferta de Lauren, imaginándosela arrastrando un saco de patatas lleno de golosinas por los pasillos solamente para complacerlo en un pedido ridículo de comida.
Oh, ¿tenía que responder? ¿No era obvio que claro que quería ir a la fiesta de San Valentín? "Te digo que sí, moquito seco de mi corazón" le dijo con voz melosa, como si ese fuera el apodo más tierno y romántico del mundo. Algún día Lauren se va a cansar de escuchar esas gansadas.

[Jesse Sacheverell]

Se rió, exhalando audiblemente por la nariz y por suerte no tenía mocos, porque hubieran salido disparados hacia el frente como dos bolas de cañón. Y con una nariz como la de Jesse hubieran sido tremendos cañones.
"¿Me vas a hacer bailar?" preguntó con una sonrisa, porque no se imaginaba el baile en sí. Es decir, escuchó que habría música y comida americana, pero le costaba imaginarse la situación en el Gran Salón. ¿Bailarían comiendo o cómo?

[Jesse Sacheverell]

Rió despreocupadamente "No te preocupes, sería imposible que me pisaras" la miró como si la simple idea fuera tremendamente ridícula.
"Después de todo yo voy a estar parado sobre tus pies, así que..." como cuando los niños pequeños quieren bailar con los adultos, así es como se imagina que van a pasar la noche bailando. Bah, Lauren bailando y él ahí parado sobre sus pies, dejándose llevar. Ah, la magia de los bailes adolescentes.

[Jesse Sacheverell]

Jesse se rió, aunque su alma sangraba por dentro, porque no sé si deba confesarte algo así, Lauren, pero lo del banquito le llegó al corazón, y luego se le instaló momentáneamente en el hígado. Porque la Hufflepuff tenía razón, y eso es lo que más le dolía: la verdad.
"Si usas tacones yo también voy a usar tacones" le dijo como si hablara en serio. Primero porque no tenía, pero aún si los tuviese dudo que pudiera mantenerse de pie arriba de esos cosos. ¿A quién se le ocurría crear zapatos que te daban la impresión de estar de puntitas de pie sobre un plano inclinado? Era de locos.

[Jesse Sacheverell]

"¿Cómo es de princesa?" preguntó, sumamente interesado. No estaba seguro sobre cómo era que se cargaba a la realeza, por lo que necesitaba la explicación y/o demostración.
"Quizás yo quiero ir de princesa" le recordó, alzando las cejas. Y ahí sería ideal, Lauren: ninguno usaría tacones, y él bailaría subido a tus pies y luego te toca cargalo escalones arriba hasta la sala de Gryffindor. Un cuento de hadas para la rubia, seguro.

[Jesse Sacheverell]

Jesse había logrado mantenerse serio, dentro de todo, hasta que ella se puso en pose para llevarlo como princesa. Eso no solamente alcanzó pero sobrepasó su límite, por lo que tuvo que echarse a reír, así agarrado a Lauren en el medio de un pasillo.
"No, no, cambié de opinión" logró decir entre carcajadas, cerrando los ojos aunque déjame confirmarte que todavía podía verlos en esa pose detrás de sus párpados. Si no fuera porque él pensaba que podría lastimarla, se hubiera subido. Pero ahora que sabía que ella estaba dispuesta a hacer algo así, más gracia le causaba toda la situación.

[Jesse Sacheverell]

Meternos ahí vestidos de negro era muy cliché, pero seguro que si iban de mascota de equipos de quidditch no los iban a encontrar nunca. Vale, estarían incómodos y es difícil correr adentro de un traje de cuerpo completo, pero eso aseguraba el anonimato.
"Los chismosos se van a quedar con las ganas de ver las marcas de látigo sobre mi flácido cuerpo" declaró serio, con más orgullo del que quedaba lógico en una frase como esas.

[Jesse Sacheverell]

No sé lo que es el conejito, pero como Lauren es linda y adorable voy a imaginarme que es el estómago y no otra parte que seguramente Jesse apreciaría mucho menos que le apretaran así, con fuerza, en el medio de un pasillo.
"¡No!" exclamó, como si ella en vez de nombrar abdominales y push-ups acabara de decir las palabras claves de un ritual satánico. "No digas esas cosas, no manches tus labios con esas palabras tan sucias" agregó, acercando la mano a la cara de ella, dándole una palmadita suave a su rostro entero.

[Jesse Sacheverell]

Oh, wow... creo que la persona que vio un conejito ahí estaba sin sus gafas, y con unos cinco o seis tragos demás... bajándose de una montaña rusa y segundos después de que le tomaran una fotografía sorpresa con flash. Es la única explicación, Lauren.
"Con que te laves la boca con jamón alcanza, pequeña" le dijo como si ahora él fuera el Papa. Y no sé, se imaginaba que el Papa usaba palabras como 'pequeña' para referirse a las niñas, pero Jesse no sabe nada de religión así que probablemente se lo esté inventando. "El jamón te purifica el alma" agregó, uniendo las palmas de las manos como en rezo.

[Jesse Sacheverell]

La miró con cara de shock, pero luego ladeó la cabeza, como si comenzara a comprender lo que Lauren le estaba diciendo.
"Oh... creo que somos de la misma religión, pero de distintas denominaciones" comentó pensativo. Seguramente la Hufflepuff era de la iglesia de los santos sundaes, mientras que Jesse pertenecía a los testigos del jamón. "Siempre y cuando nos respetemos mutuamente, podemos seguir hablándonos" le dio un golpecito amistoso con el hombro.