La despedida

[Maggie Grimbale]

No había entendido la parte de que Nigel le estaba dando un vale a futuro para que lo usara cuando quisiera. Sólo entendió que él estaba molesto porque se estaba quedando con ganas y que no le molestaba chapar con ella aunque fuera una tonta. Repito, no sabía bien qué debía sentir sobre eso. La cachetada podía valer también para desquitarse por todas las cosas que Nigel le decía y Maggie no sabía interpretar como insultos.
"Adiós" respondió todavía dudando de si aquello era o no un buen final, sin que le saliera devolverle la sonrisa. Sentía que su cabeza era una maraña de pensamientos contradictorios. Bajó su mano nuevamente al costado de su cuerpo y comenzó a caminar.

[Nigel Sinclair]

La miró, incrédulo. ¿Adiós, y así sin sonrisa se iba? No es que esperara un montón de ella a esta altura, pero parecía haberse quedado como tildada desde alguna barbaridad anterior que le habrá soltado, Nigel no había notado el cambio en algún momento específico.

Alzó las cejas y miró hacia un lado, como si estuviera hablándole a alguien más "Ah, bueno, re antipática" dijo en voz más baja pero perfectamente audible. ¡Con todo el esfuerzo que hacía él para que todo quedara bien entre ellos! Nigel, el próximo santo, te cabe Eufrasia.

[Maggie Grimbale]

Como estaba pasando al lado suyo, lo escuchó murmurar, quejándose otra vez. Maggie inspiró fuerte y alzó la mirada al techo por un instante. Por Merlín, estaba más cansada por hablar con él que por todas las clases de ese día.
"¿Ahora qué?" Preguntó volviendo al tono molesto. Ella también consideraba que había hecho todo de su parte, lo habia saludado con tono neutral y todo "¿Qué quieres? ¿Que nos abracemos?" Preguntó como si fuera la idea más descabellada que se le podía ocurrir, lo más bizarro para terminar su extraña relación.

[Nigel Sinclair]

Pero eso es buena señal, ¿no? La dejaba agotada con sus dotes orales y solamente estaban hablando. ¡Imaginate si lo pasaban al plano físico!

"..." la miró, sintiéndose mal por haberle dicho estúpida unos minutos atrás. Una chica estúpida no tendría una idea tan genial como esa, ni la ofrecería como opción con tanta sinceridad y buena onda. "Bueno, dale" aceptó con una sonrisa y abriendo los brazos mientras caminaba hacia ella "así cerramos todo en paz" agregó Nigel, porque esta lengua de serpiente miente, Maggie.

[Maggie Grimbale]

La agotaba mentalmente, todavía no físicamente, pero si pensar eso lo hace a Nigel feliz...

Claro que no lo había ofrecido de la manera en que él lo interpretó. Maggie frunció el ceño, mirando algo impresionada que se le acercara con los brazos abiertos. "Era irónico..." intentó explicar pero ya era un poco tarde. Se sintió mal de que hubiera tomado la pregunta literal y que hubiera levantado los brazos así que, con desconfianza todavía, despegó los brazos de su cuerpo y se dejó abrazar. Insegura, palmeó dos veces en la espalda a Nigel como si quisiera consolarlo por algo y luego, incómoda, intentó separarse. La cercanía de nuevo con él la ponía nerviosa, le daba un deja vu de Las Tres Escobas que se sentía bien y era emocionante pero a la vez lleno de culpa.

[Nigel Sinclair]

Hacía bien Maggie en desconfiar, con Nigel siempre le convenía estar alerta por su propio bien, por su salud mental. Pero Maggie era buena persona, sintiéndose mal al verlo ofrecerle el abrazo con los brazos abiertos cuando tendría que haber aprovechado para tirarle arena a los ojos y salir corriendo.

Nigel la abrazó con toda normalidad, sin palmadas de su parte. Le dió un apretoncito con los brazos, que aflojó pero no la soltó. "En serio que no te voy a escribir, Magdalen. Pero si vos me querés escribir, para que nos veamos o algo, me decís" le dijo, girando la cabeza para hablarle contra el cuello. Un ser despreciable y malévolo.

[Maggie Grimbale]

Es que la confundía con sus cambios de humor, primero quería terminar las cosas bien con ella, después se ofendía, le decía estúpida y ahora quería un abrazo. Maggie prefería hacerle caso para mantener la paz del momento y para terminar lo mejor posible esa parte de su historia en Hogwarts.
Se quedó quieta, esperando a que él la soltara para echarse hacia atrás pero eso no pasó. Quedó con la cabeza cerca de su hombro y pudo escucharlo hablarle contra el cuello, produciéndole una leve cosquilla que no colaboraba en nada a no seguir pensando en lo que había pasado la última vez. Debía sentirse aliviada porque prometía no escribirle y sonaba sincero, pero seguramente era porque Nigel sabía bien qué hilos mover, como decirle Magdalen. Que le estuviera proponiendo que le escribiera ella para engañar al novio con él no estaba tan bueno pero Maggie asintió con la cabeza, preguntándose por qué la posibilidad le producía cosquillas en el estómago primero y recién después recordaba que si lo hacía era una pésima persona. Apretó los labios y apoyó las manos en la cintura de Nigel con la intención de empujar levemente para poder echarse hacia atrás y que él finalizara el abrazo.

[Nigel Sinclair]

Nigel solamente tenía un estado de ánimo: excitado. Excitado feliz cuando Maggie le daba bola, excitado triste cuando ella no le daba bola. Había otras versiones, como excitado enojado cuando ella decía boludeces en vez de usar la boca para otras cosas, también. Que después no se diga que Nigel es unidimensional. Uniceja te acepto, pero unidimensional no.

"¿Sí? ¿Lo vas a pensar?" preguntó, ¿sabías que solamente lo hacías hablarte de más cerca y en voz más baja si lo agarrabas de la cintura? Es como esos muñecos a los que podés hacer hablar cuando les apretás la espalda. Nigel vendría a ser así, tipo Chucky.

[Maggie Grimbale]

Tomó aire, sintiendo que en ese momento no podía pensar en nada seriamente. "No lo sé..." murmuró luego de un instante, tenía el rostro serio mientras intentaba entender cómo se sentía "Me confundes" fue lo primero que le salió y que sabía que era cierto. Estaba también agotada de darle vueltas al asunto y cansada de sentirse dividida entre la culpa y las diferentes emociones que Nigel le hacía sentir "No sé qué quiero hacer" le fue sincera y esta vez sí empujó despacio para despegarse de él y mirarlo.

[Nigel Sinclair]

Qué paciencia que había que tener con Maggie, caramba, él también estaba agotado pero de tratar de aflojarla y que ella siguiera resistiéndose. Con razón el novio que tenía era un chico que ya de por sí era medio lento, y ahora con todos esos golpes que recibía seguramente estaba cada día más dañado.

"Yo tampoco sé lo que querés hacer" le dijo mientras dejaba que ella lo empujara para separarse. Ya iba a extrañar el calorcito del abrazo de Nigel, mezquina de cariño que era ella. "Yo sé lo que quiero y no me dejás" le recordó.

[Maggie Grimbale]

Sus métodos para aflojarla eran algo cuestionables, y quizás se resistía porque justamente tenía novio! Pero Nigel le estaba comiendo la cabeza con ese trabajo lento de pájaro carpintero que siempre nos lleva 8 hojas de thread.

Había dejado de mirarlo cuando la soltó y pudo separarse, llevándose una mano a la frente. Exhaló, algo rendida como para seguir haciéndose la tonta. Fingir que no se le movía un pelo era fácil cuando se ignoraban como en esas semanas, pero si él le decía esas cosas e insistía, le costaba más hacerse la sorda con sus hormonas. Maggie lo miró sintiendo que volvían a Las Tres Escobas, a ese momento en que él no parecía entender que no podía. "Yo... también quiero" admitió "Pero no se puede" y deseó muchísimo que esta vez Nigel lo entendiera "No es tan fácil para mí como para ti" Era re fácil ser Nigel y no tener nada que perder.

[Nigel Sinclair]

A Nigel le costaba entender el problema de Maggie. Claro, en teoría era simple: ella estaba en una relación monógama, no había cabida para Nigel. Pero como lo pensaba él, ella simplemente tendría que avisarle a su novio que tendrían una relación abierta y listo, y si al tipo no le venía bien, ¿para qué mantenerlo al tanto? Aparte ella ya lo había engañado: que besara a Nigel una, dos, o quince veces era más o menos lo mismo, ¿no?

"..." la miró apretando los labios, casi que incómodo con tener que hablar con una persona que tenía fuerza de voluntad. "O sea que no daría... tipo por última vez..." negó con la cabeza lentamente mientras la miraba fijamente. Solamente para asegurarse, ¿sabés? Por si en realidad sí daba.

[Maggie Grimbale]

Para Maggie y su conciencia no era lo mismo que fuera un desliz de una única vez (porque ese era el justificativo para no sentirse tan mal) que fuera algo continuo o que se repitiera porque sí. Repetirlo significaba aceptar que Nigel la atraía y, aunque él ya había roto con esa barrera de su orgullo y se lo había dicho sin muchos tapujos, a Maggie le costaba mucho más. ¿No era suficiente con decirle que también estaba tentada con repetirlo?
Se quedó mirándolo sintiéndose todavía dividida. Si era por última vez no era tan malo ¿no? Es decir... era quitarse las ganas para seguir y sin pensar en escribirle como él le decía porque ya no quería nada pendiente. "Una última vez... ¿así como una despedida?" preguntó para asegurarse, porque quizás si se repetían mucho que era la última sus cerebros se enterarían y no querrían repetirlo.

[Nigel Sinclair]

No había mucho que Nigel pudiera hacer aparte de intentar tentar a Maggie al lado oscuro, la pelota siempre había estado de su lado de la cancha. Usualmente a él le molestaría mucho que fuera otra persona la que tuviera exclusivo control sobre la situación, pero al menos está aprendiendo a ser paciente para tratar de lograr lo que quiere.

-¿Despedida?- pensó con la pregunta de ella, pero asintió con la cabeza. Asentiría a cualquier cosa, sinceramente, con tal de probar sus chances. "Sí, una vez que egresamos ya está" dijo con seguridad, aunque no tenía idea de si lo que estaba diciéndole a Maggie tenía la más mínima pizca de verdad. Detalles.

[Maggie Grimbale]

Nigel era como un Sith y Maggie se estaba dejando arrastrar como Anakin (?) al lado oscuro de la fuerza. Hasta le creyó y todo cuando dijo que una vez que egresaran ya no. No sabía qué cosa iba a estar terminada, si ya no iban a tenerse ganas, si ya no iban a verse nunca más, si dejaría de molestarla, o si todo eso a la vez. Quiso creer que realmente sería así, que al llegar a Londres podría lavar su conciencia hablando con Rainier y olvidándose de todo eso. Si después se hacía responsable por sus errores, ¿estaba mal cometerlos igual?

Maggie se mordió el labio inferior, pensando, porque todavía dudaba. Lo miró a Nigel como pidiéndole que no se la haga más difícil, que ella no quería ser la que tomara la decisión. Además ¿qué se suponía que tenía que hacer? ¿agarrarlo de la túnica y darle un beso ella? Sin darse cuenta, mientras pensaba esas cosas, había comenzado a mirarle la boca.