Diez minutos

[Lorenz Van Buren]

Faltaban diez minutos para que empezara la clase de Astronomía. Qué se le había cruzado por la cabeza a la hora de elegir esa materia a la noche era algo que aún no había descubierto. Aparte de eso... ¿astronomía? ¿No era como la cosa más aburrida desde que inventaron los sujetadores de medias? Pero lo hecho, hecho estaba.
Había llegado diez minutos antes y se había quedado cerca del telescopio con el que le había tocado trabajar la clase anterior donde había hecho un malísimo trabajo en enfocar el maldito coso. Ni siquiera había logrado aprenderse los nombres de las partes. Pero es que era tarde en la noche y las ganas de aprender se le habían quedado en el plato de comida durante la cena.

[Diane Roseveare]

Nunca le había interesado la Astronomía; comprendía por qué había gente que tomaba la clase, pero a la hora de escoger con qué materias atormentarse hasta que terminara su educación en Hogwarts, esa había sido de las primeras en ser eliminadas como opción. En cualquier caso, ella no estaba ahí por obligación, sino por necesidad. Había pasado más de una semana desde que Lorenz le había prestado su abrillantador, pero hasta ese día no había tenido oportunidad de regresarle el tarro. Aquella noche, después de interrogar a un par de personas, averiguó dónde encontrar al chico, y ahí estaba, frente al acceso a la zona donde se impartía la clase. "Hum... ¿Van Buren?" llamó levantando un poco la voz.

[Lorenz Van Buren]

Casi suelta el telescopio, haciendo que tambalease hacia uno de los lados. Había aflojado la ruedita de abajo para poder apuntar hacia Júpiter (porque todavía no había marcado correctamente la posición de las lunas o lo que fuera que sean esos cosos en su chart) y la apretó rápidamente mientras giraba la cabeza en dirección a la entrada.
Demoró unos segundos. "¿...Sí?" preguntó. ¿Para qué salir si podría ser alguna profesora que había decidido darle detención por haberse mandado alguna cagada que recién ahora acababan de descubrir? No, no señor.

[Diane Roseveare]

... Ok, gracias por confundirle la voz con la de una profesora.
Titubeó antes de adentrarse en el área, con el tarro en la mano izquierda. Se detuvo después de unos pasos, buscando con la mirada a Lorenz ((imagino que no está muy iluminado)). "Hola" saludó, desechando la formalidad de un 'buenas noches'. "¿Te interrumpo?".

[Lorenz Van Buren]

Si Diane le hablara más seguido y lo llamara por el apellido, seguramente estas equivocaciones no sucederían. Si de algo sirve, así como un consuelo, confundió la voz con la de alguna profesora sexy. Que pudo haber imaginado, supongo.
"...¡Diane!" exclamó, soltando el telescopio y girándose hacia ella "No, para nada..." y se notaba que estaba sonriendo hasta en la voz, si es que la luz que había ahí no era la necesaria. Qué genial, que ella lo buscara. De noche. En un aula que aún estaba vacía. Un aula poco iluminada. Rawr.

[Diane Roseveare]

Que yo recuerde, en ningún momento lo ha llamado por su nombre, asi que, si alguna vez antes que ésta quiso atraer su atención, también usó el apellido. Pero te concedo la parte de que es probable que no le hable muy seguido.
Se acercó más hacia él, pero su mirada recorría el lugar. "No sabía que te interesa la Astronomía" comentó con aire casual. No sabía muchas otras cosas sobre él, pero esa suposición era la que importaba en el momento.

[Lorenz Van Buren]

Cosa que es súper remediable, si quieres le paso una copia de sus horarios a Diane para que sepa dónde encontrarlo a todo momento, así planean cómo organizar el tiempo libre juntos, e invitar a amigas de ella si eso la hace feliz.
Dudó sobre qué responderle, porque decir que le interesaba sería una mentira imposible de sostener, y decirle que no le gustaba lo hacía quedar como un imbécil por haber escogido esa materia "La prefiero antes que otras cosas, nada más" comentó alzando un hombro. Todavía no podía creer que ella hubiera subido hasta la torre para hablar con él, y no dejaba de mirarla por si desaparecía de repente.

[Diane Roseveare]

Si Diane estuviera interesada en hacer planes para su tiempo libre con él, ciertamente no invitaría a nadie más. Cuando llegue el momento oportuno, si llega, Lorenz se va a enterar. "Ah" contestó, finalmente deteniéndose a unos dos pasos de él. Entonces le sonrió, y extendió su brazo izquierdo para mostrarle lo que llevaba en la mano (y que la había llevado hasta ahí). "Quería devolverte esto" explicó.

[Lorenz Van Buren]

Normalmente la gente estaría feliz de que se le devuelvan las cosas, pero ese no era el caso de Lorenz esta vez. La sonrisa se volvió menos sincera y si prestaban mucha pero mucha atención verían cómo su espalda se había aplastado varios milímetros.
"Ah, gracias" le dijo, tratando de sonar igual de animado que antes, pero con poco éxito. Tomó el tarro que le ofrecía Diane y lo miró, culpándolo en silencio de sus esperanzas rotas en miles de pedazos. "Me había olvidado que te lo había prestado..." -tarro del mal-.

[Diane Roseveare]

Iba a contestar 'gracias a ti', pero le había repetido aquella palabra más veces que el apellido, y ya hasta la hacía sentir incómoda. "De cualquier modo lo tenía que regresar" apuntó encogiendo los hombros y llevándose las manos a la espalda para volver a recorrer con los ojos el aula. "¿Siempre llegas con tanta anticipación a tus clases?". No le gustaba someter a los demás a un interrogatorio, pero no le parecía apropiado decirle 'ok, te lo devolví, ya me voy'. Al menos podía hacerle compañía en lo que llegaban los demás... y entonces se le ocurrió que quizá quería estar solo.

[Lorenz Van Buren]

Supuso que quedaría mal arrojar con todas sus fuerzas el tarro contra la pared más cercana, expresando toda su ira contra el maldito coso que sí, le acercaba a Diane con básicamente poco esfuerzo, pero por todas las razones equivocadas.
"No" dejó de mirar el tarro de abrillantador de escobas porque ya estaba pareciendo un poco autista si seguía así. Miró a Diane, y le sonrió lo más honestamente que pudo "Es solamente que si no vengo apenas termino de cenar sé que me voy a quedar en la Sala Común haciendo nada y luego me va a dar mucha flojera venir a clases".

[Diane Roseveare]

Rió brevemente, asintiendo con la cabeza. "Tiene sentido. Yo no podría obligarme a funcionar correctamente a esta hora" confesó. Particularmente porque, con todo y la desvelada, tendría que levantarse temprano al día siguiente. Dio los pasos que la separaban de él para colocarse a su lado e inspeccionar más de cerca el telescopio. Sin tocar; seguía con las manos en la espalda.

[Lorenz Van Buren]

Oh, por Dios. A esa hora para Lorenz (y a ésta para mí) no es saludable hacernos leer cosas tales como que Diane estaba inspeccionando de cerca un telescopio, sin usar las manos que tenía detrás de la espalda. Estas historias nunca acaban bien.
"Bueno, a decir verdad yo tampoco puedo" admitió, ladeando la sonrisa y mirándola con interés. Quizás debería prestar un poco más de atención en la clase de ahora en más, para tener algo para decirle si esto volvía a ocurrir. "No está bien enfocado" le avisó, por si quería echar un vistazo. Justo era un día de pocas nubes y alta visibilidad.

[Diane Roseveare]

De acuerdo, no sé qué entendiste al leerlo, pero que conste que yo lo escribí en el plan más inocente posible. ¡Sin malpensar!
Volvió a reírse, girando un poco para mirarlo a la cara. Al menos le respondía con sinceridad. Devolvió su atención al telescopio tras escuchar el aviso y soltó sus manos para dirigir la derecha al objeto, mismo que se limitó a tocar con el dedo índice como si quisiera asegurarse de que era sólido. "Prefiero no mover nada".

[Lorenz Van Buren]

Pero es la hora la que hace imposible que tome de un sentido inocente una frase como aquella. Muy noble la intención, pero es simplemente imposible llevar a cabo el inocente cometido.
"Por favor, no podrías hacerlo peor que yo" le aseguró, señalando con una mano el telescopio como si éste fuera a hablar y decir el malísimo desempecho de Lorenz en la materia. Ojalá que no, o su noche iba a seguir empeorando.