Cómo no luchar contra el aburrimiento

[Irene Spurway]

Durante esas vacaciones se había propuesto metas para el nuevo año escolar, se trataba de cosas sencillas como dedicar dos horas de repaso a las materias que viese durante el día, hacer los deberes con suficiente tiempo o escoger mejores grupos de estudio pero...Transcurrida la primera semana de septiembre y casi culminando la segunda, Irene se encontró fallando estrepitosamente en cumplir sus fulanos planes. A esas alturas ya tenía una hermosa pila de tareas acumulada en su habitación, seguía haciendo equipo con sus amigos de siempre (y hablaban más de lo que estudiaban) y de las dos horas de repaso que se obligaba a cumplir solo llegaba a treinta minutos sin distraerse.

Treinta minutos que acababan de culminar en ese preciso instante, lo que quería decir que podía tomar un descanso de su lectura sobre Puffapods, ahg, ¿qué más necesitaban saber sobre esa planta? ¿no era suficiente con todo lo que habían aprendido durante los tres años anteriores? La respuesta parecía ser no, era un tema recurrente y todos los años estudiaban la misma planta. -Qué aburrido- pensó, apoyando su cabeza sobre la mesa, era tan aburrido que (bostezo) solo pensar en continuar (bostezo) le causaba sueño y... le hacía preguntarse que tan terrible seria tomar una mini siesta y luego continuar. Quizás después de descansar unos quince minutos tenía más energías para seguir estudiando.
((Libre))

[Val Zelinski]

Traía consigo un pedazo de pergamino usado donde, en un costadito libre, había anotado algunas de las sugerencias que le había hecho Jane para que empezara a leer otras cosas que no fueran las básicas de la escuela, a ver si dejaba de escribir como un animal.

Era difícil para Valerian hacer el esfuerzo de leer por placer, aunque eso sonara a que no tenía sentido. Tenía que adoptar el hobby para no tirar por el retrete el milagro que había sido poder asistir a Hogwarts en vez de estar fertilizando la huerta en el terreno de su casa a la salida del colegio.

No sabía ni dónde estaba la sección de... como fuera que se llamaran los libros que no eran los que usaban en clase, con información y referencias. Había demasiados estantes, demasiadas secciones, y no quería ir a preguntarle a la bibliotecaria que ya bastante atareada estaba ubicando libros de texto para esos alumnos que necesitaban tener el trabajo más completo con las referencias más oscuras.

Caminó cerca de donde estaba la mesa donde descansaba Irene, subiendo la vista para ver qué decía la biblioteca más cercana.

[Irene Spurway]

La madera era muy rígida para una siesta y a sus brazos les fallaba la circulación muy rápido para usarlos de almohada. Agh, que incomodo era dormir en la biblioteca... Tomar una siesta perdón, una siesta, no dormir. Dormir en ese lugar era una falta a las normas escolares y ella no quería ser irrespetuosa con la bibliotecaria. Como fuera, Irene entreabrio sus ojos y busco los pergaminos donde había estado haciendo el intento de tomar apuntes, los arrugo y los metió bajo su cabeza para usarlos de almohadas.

Mucho mejor, ahora podía seguir con su siesta reparadora, después iría a cenar y después hablaría con sus compañeras de cuarto, alistaria su mochila y uniforme del día siguiente y finalmente iría a dormir. Quizás, quizás con un poco de suerte recordaría esa tarea de defensa debía terminar para la proxima clase y la dejaría en un lugar visible. Uuuh, frunció el ceño, su sueño estaba tomando una dirección que no le gustaba. Siesta, perdón, aunque ya ni pudiese identificar los ruidos a su alrededor (¿Era eso un elefante o los pasos de alguien?).

[Val Zelinski]

Se acercó el papel a la cara y entrecerró los ojos, sabía que la mayoría eran obras muggles clásicas, de esas que él esperaba que trascendieran la forma de catalogar los libros en Hogwarts. ¿Habría una sección de literatura muggle y él ni enterado? O más interesante aún, ¿y si había una sección de libros de misterio y crimen, pero mágicos? ¿Qué tipo de cosas escribirían los magos sobre el crimen? ¿'Le hizo un avada kedavra, tiró su varita a un volcán y vivió feliz para siempre'?

Tan preocupado con sus propias preguntas no había caído en cuenta que estaba caminando demasiado cerca de la silla de Irene, y que cuando soltó una de las manos con las que sostenía el papel con nombres de los libros, hizo que el peso de su brazo cayera sobre algo. No sé si fue la espalda, el hombro, o la cabeza de Irene, pero algo acaba de recibir un golpe accidental.

[Irene Spurway]

Los libros de terror mágicos seguro tenían que ver con las tareas de pociones olvidadas, donde un profesor con aspecto de vampiro te perseguía hasta que terminaras los cinco metros de pergamino sobre los efectos negativos de las pociones limpia cabello. No que su mente quisiera decir que el profesor de pociones tenía un pelo muy feo pero... Si, eso queria decir. Lo cierto era que Irene estaba teniendo un mal sueño, no le estaba gustando para nada el rumbo que tomaba porque eso de tener al profesor Snape en su mente no era nada lindo. Asi que para el momento en que el brazo de Valerian hizo contacto con su espalda, el susto que se llevo no fue normal.

Por si les causa curiosidad fue algo asi como que dio un salto aun sentada, se le escapo un grito ahogado y se tapo la cara con ambas manos. -¡Gryffindor, Merlin y Cristo!- ¿La bibliotecaria la acababa de descubrir? ¿Snape había ido a buscarla? No falta decir que continuo sentada, con los hombros encogidos y la cara escondida esperando lo peor. Sea lo que fuera lo peor.

[Val Zelinski]

Valerian se sorprendió cuando sintió la espalda de Irene, así que retrajo el brazo rápidamente y soltó sin querer el papel que llevaba. El hecho de que Irene no se haya movido más después del salto lo asustó más de lo que podría haberlo hecho que ella gritara, poniéndose de pie para boxearlo ahí mismo.

-...La maté- pensó exagerando, aunque la descabellada idea cada vez se le hacía más probable con los segundos que Irene pasaba inmóvil. Se le acercó con cautela, con miedo, rodeando la silla donde estaba sentada como queriendo ver si había una mancha de sangre agrandándose sobre la mesa y tenía que empezar su vida en Azkaban siendo tan joven. Tenía una cara de asustado fatal.